Applebaum, Krastev, Garton Ash: un debate

En Twilight of Democracy, que Debate publicar¨¢ en castellano en marzo, la ensayista estadounidense Anne Applebaum cuenta la historia de una ruptura. El libro empieza con una fiesta de a?o nuevo, en el a?o 2000, que celebr¨® en su casa en Polonia y a la que asistieron intelectuales, pol¨ªticos y diplom¨¢ticos liberales y conservadores. Veinte a?os m¨¢s tarde, muchos de los invitados son enemigos de Applebaum, defienden a Trump y los movimientos antiliberales del Este de Europa, y son creyentes y emisores de teor¨ªas de la conspiraci¨®n. El libro es una formidable mezcla de autobiograf¨ªa, an¨¢lisis y cr¨®nica que intenta explicar c¨®mo ha ocurrido eso, c¨®mo aquellos viejos amigos se convirtieron en nacionalistas autoritarios.

El ensayista b¨²lgaro Ivan Krastev considera que Applebaum parte de un diagn¨®stico equivocado. La historiadora tiene una visi¨®n formada por el fin de la Guerra Fr¨ªa y el entusiasmo de las revoluciones de 1989. Admira a los disidentes de los pa¨ªses comunistas, interpreta el mundo m¨¢s en funci¨®n de choque de valores que de combate de intereses y ve en el atlantismo una promesa de libertad. Pero para Krastev algunos de los opositores de los reg¨ªmenes del Este ¡°valoraban los principios liberales solo porque eran un instrumento efectivo para destruir al comunismo¡±. ¡°Cuando el objetivo se consigui¨®, se empezaron a ver valores como la libertad de medios y la divisi¨®n de poderes como una amenaza a la civilizaci¨®n occidental y a los valores cristianos tradicionales¡±. Lo que une a estos nuevos autoritarios es el rechazo a los valores liberales y una sensaci¨®n de resentimiento; creen que alguien les rob¨® la victoria. Lo m¨¢s valioso del libro, para Krastev, es mostrar la debilidad de la postura de liberales como Applebaum. Su principal reto, seg¨²n ¨¦l, es la dificultad de defender el universalismo occidental cuando el poder occidental est¨¢ en declive.

El brit¨¢nico Timothy Garton Ash, que tambi¨¦n vivi¨® las revoluciones de terciopelo, discrepaba con Krastev en un art¨ªculo sobre las protestas democr¨¢ticas de Bielorrusia. Para ¨¦l, las ¡°verdades autoevidentes¡± del 89 no eran el optimismo o la arrogancia occidental (Mariano Gista¨ªn se?ala que el modelo capitalista fall¨® al quedarse sin competidor, como predice la teor¨ªa del capitalismo), sino que ¡°la gente que vive mucho tiempo bajo una dictadura normalmente termina anhelando la libertad. Y un d¨ªa, habla¡±. @gascondaniel