Retro

Dicen que para la mayor¨ªa el a?o pasado ha sido el peor de sus vidas. Les envidio la existencia feliz que han debido llevar hasta 2020. No dudo que muchos de los afectados por el virus lo han pasado mal, incluso muy mal. Pero que los dem¨¢s no hayan padecido nunca nada m¨¢s grave que el confinamiento, las limitaciones de movilidad o el alejamiento temporal de sus seres queridos... vaya, me parece una gran suerte. Yo cambiar¨ªa gustoso esos razonables incordios, que s¨®lo me han fastidiado y aburrido, por lo sufrido en mis ¨¦pocas realmente malas. Y eso que hasta hace poco cre¨ª haber sido afortunado...

Lo m¨¢s interesante que hice en 2020 fueron ejercicios en busca del tiempo perdido. No supongo que el pasado siempre haya sido mejor, lejos de ello, pero s¨¦ que tuvo cosas que merece la pena volver a paladear aunque sea por ¨²ltima vez. Es una de las pocas ventajas de la vejez, porque los j¨®venes apenas tienen nada que recuperar. Por ejemplo, cuando la nonagenaria recibi¨® la primera vacuna dijo que se encontraba bien ¡°gracias a Dios¡±. Si tuviera siete d¨¦cadas menos o fuese una valkiria del Ministerio de Igualdad, habr¨ªa asegurado ¡°jo, t¨ªa, mola que te cagas¡±. Ya s¨¦ que ambas f¨®rmulas expresan gratitud y esperanza, pero cuanto m¨¢s oigo la segunda m¨¢s me gusta la primera. Me he pasado estos d¨ªas volviendo a ver pel¨ªculas de los a?os cincuenta y sesenta: me encantan porque en ellas todo el mundo fuma y nadie dice tacos. En Nochevieja vi Los primeros hombres en la luna de Nathan Juran, estrenada cinco a?os antes de que se desembarcara en el sat¨¦lite. Una delicia. Los protagonistas, liderados por Lionel Jeffries, viajan en una victoriana esfera con puntas, muy semejante al coronavirus...