Aborto en Polonia: grave paso atr¨¢s

Mientras el avance de las libertades consegu¨ªa un nuevo e importante aliado en Argentina, donde el Senado aprob¨® en diciembre la despenalizaci¨®n del aborto despu¨¦s de una movilizaci¨®n masiva y sostenida durante largo tiempo por numerosas mujeres, la causa retrocede a marchas forzadas en un importante pa¨ªs europeo: Polonia. ...

Mientras el avance de las libertades consegu¨ªa un nuevo e importante aliado en Argentina, donde el Senado aprob¨® en diciembre la despenalizaci¨®n del aborto despu¨¦s de una movilizaci¨®n masiva y sostenida durante largo tiempo por numerosas mujeres, la causa retrocede a marchas forzadas en un importante pa¨ªs europeo: Polonia. El Tribunal Constitucional de este pa¨ªs decidi¨® en octubre ilegalizar el aborto en caso de malformaciones graves del feto, como enfermedad o discapacidad, un supuesto en el que se amparaba el 97% de los escasos 1.110 abortos legales en el pa¨ªs. Tras la declaraci¨®n de inconstitucionalidad, solo el incesto, la violaci¨®n y el peligro para la vida de la madre quedan como razones legales.

La ola de indignaci¨®n que gener¨® la decisi¨®n del Constitucional indujo al Gobierno del ultraconservador Ley y Justicia (PiS) a retrasar la publicaci¨®n oficial de la misma, que finalmente se produjo este mi¨¦rcoles. A pesar de la pandemia y las prohibiciones de reuni¨®n de m¨¢s de cinco personas, las protestas se han extendido desde entonces en Varsovia y otras ciudades del pa¨ªs. Miles de activistas han desafiado la prohibici¨®n para alzar la voz ante un retroceso de sus derechos ¨²nico en Europa. Algunas han sido detenidas.

La ley ahora reformada ya era de las m¨¢s restrictivas de Europa y se calcula que entre 80.000 y 120.000 mujeres viajan al exterior para abortar. Otras compran pastillas abortivas de forma ilegal o lo realizan en la clandestinidad, con el riesgo que conlleva. En el continente europeo solo San Marino, Andorra y Malta son a¨²n m¨¢s restrictivas, ya que no permiten el aborto en ning¨²n supuesto. Polonia se distingue pues en la UE como el ¨²nico pa¨ªs miembro en el que este derecho no solo no avanza, sino que retrocede. La tambi¨¦n cat¨®lica Irlanda, donde la interrupci¨®n voluntaria del embarazo fue anatema durante d¨¦cadas, lo legaliz¨® en 2018 despu¨¦s de un refer¨¦ndum en el que la poblaci¨®n se inclin¨® por derogar la octava enmienda de la Constituci¨®n, que equiparaba el derecho de vida de la madre con el del feto. Un 66,4% vot¨® a favor.

Dos factores se han conjugado en Polonia, miembro de la Uni¨®n Europea desde 2004, para hacer posible este primer retroceso en derechos reproductivos de la mujer de la historia de la UE: la tradici¨®n y raigambre profundamente cat¨®licas, por un lado, y las pr¨¢cticas iliberales de un Gobierno conservador que desaf¨ªa el r¨¦gimen de derechos y libertades que abraz¨® tras la ca¨ªda del comunismo con un control creciente del aparato judicial. El nombramiento de jueces del Constitucional ha puesto la independencia de este tribunal en entredicho. Y la deriva autoritaria prosigue.