DNI trans para ¡®todes les ni?es¡¯
En los temas de g¨¦nero no hay blancos o negros. Existe un control de nuestros cuerpos por parte de otro cuerpo, el pol¨ªtico, absolutamente inadmisible y violento
El borrador de la nueva ley trans permite a las personas de m¨¢s de 16 a?os que no se sienten ni hombre ni mujer no poner el sexo en el DNI. Yo estoy deseando que se apruebe para eliminar una etiqueta tan da?ina como obsoleta del m¨ªo y eso que supuestamente me autopercibo como mujer y he nacido con una vulva entre las piernas. No obstante, siento que esta ley tambi¨¦n va conmigo.
Seg¨²n la OMS, ...
Reg¨ªstrate gratis para seguir leyendo
Si tienes cuenta en EL PA?S, puedes utilizarla para identificarte
El borrador de la nueva ley trans permite a las personas de m¨¢s de 16 a?os que no se sienten ni hombre ni mujer no poner el sexo en el DNI. Yo estoy deseando que se apruebe para eliminar una etiqueta tan da?ina como obsoleta del m¨ªo y eso que supuestamente me autopercibo como mujer y he nacido con una vulva entre las piernas. No obstante, siento que esta ley tambi¨¦n va conmigo.
Seg¨²n la OMS, las personas trans son entre el 0,3% y el 0,5% de la poblaci¨®n mundial. Sin embargo, la nueva ley trans, tan urgente para este colectivo, ata?e a todas las personas nacidas en Espa?a en tanto podr¨ªa suavizar la vieja y r¨ªgida relaci¨®n que el Estado establece con nuestros cuerpos. Y en este sentido, creo que todes (binarios, no binarios, fluidos, trans o cis) necesitamos un contexto legal m¨¢s abierto, flexible y respetuoso hacia nuestros cuerpos y g¨¦neros.
Cuando nacieron mis hijes, antes incluso de que nacieran, sent¨ª en el entorno lo importante que era saber si iban a ser ni?as o ni?os. La raz¨®n de tanto inter¨¦s es que su vida y su identidad ser¨ªan muy distintas en funci¨®n de una u otra asignaci¨®n. Tambi¨¦n su educaci¨®n, los modelos que recibir¨ªan del exterior, los juguetes que se les ofrecer¨ªan, las revistas del quiosco, hasta los dibujos animados¡ En su caso, los m¨¦dicos declararon que ser¨ªan ni?as, porque hasta ahora son los m¨¦dicos quienes asignan el sexo a las personas. As¨ª que, si todo va como en la mayor¨ªa de los casos, dentro de unos a?os ser¨¢n mujeres hechas y derechas y entonces su sexo marcar¨¢ tambi¨¦n su salario, sus gustos, sus cargas mentales, sus inseguridades y hasta su deseo.
¡°Cuando me miro a m¨ª misma me pregunto c¨®mo co?o me he pasado toda la vida construyendo esto. Mi cuerpo, mi personalidad y hasta mi alma en funci¨®n de lo que cre¨ªa que deseaban los t¨ªos. Me da hasta verg¨¹enza, me siento una farsante¡±. As¨ª explica Jules (Hunter Schafer), ¨ªdolo juvenil y protagonista de la serie Euphoria (HBO) c¨®mo ha construido su feminidad. Ella es una joven trans de 20 a?itos y yo a mis 41 supuestamente cis suscribo cada una de sus palabras. Mi feminidad, como la de todas las mujeres que conozco, tambi¨¦n ha sido construida con esfuerzo y artificio. Estoy segura de que Jules no querr¨ªa poner su sexo en el DNI. Y como ella, todas las personas que han sufrido por encajar en una de esas dos categor¨ªas estatales a las que llamamos hombre o mujer.
Las personas trans sufren de un modo feroz el control de las instituciones sobre su cuerpo y tienen la valent¨ªa de enfrentarse a la marca pol¨ªtica que les fue asignada al nacer. Pero este control y categorizaci¨®n de nuestro cuerpo por parte del Estado lo padecemos todas las personas. De hecho, tambi¨¦n existe un sufrimiento feroz en todas las ni?as que intentamos alguna vez convertirnos en mujeres. Y en los ni?os que tratan de encajar en ese traje a veces monstruoso que llamamos hombre. En realidad, no conozco a una sola persona que no haya tenido que pelear y sufrir para construir su identidad por encima de las implicaciones sociales, culturales y en ¨²ltima instancia pol¨ªticas, asignadas a su sexo de nacimiento. Me pregunto entonces qu¨¦ persona en este pa¨ªs no cree que tenga derecho a la autodeterminaci¨®n de g¨¦nero. ?En qu¨¦ momento aceptamos que un asunto tan absolutamente ¨ªntimo puede ser determinado por otros o por instancias p¨²blicas?
Mis hijes no tienen DNI. El documento no es obligatorio hasta los 14. Y para entonces espero que escribir hombre o mujer en su carta de identidad resulte tan obsoleto como informar sobre el estado civil de cada une, algo que tuvieron que hacer mis padres antes que yo. Cuando el Estado cre¨ªa que aquello tambi¨¦n era asunto suyo. Al final, tanto si eres cis como si eres trans, identificarse como hombre o mujer en un documento oficial no es una cuesti¨®n sencilla. Si nos preguntamos seriamente lo que significa la categor¨ªa hombre o la categor¨ªa mujer y lo escribimos en un papel, encontraremos una definici¨®n compleja y llena de matices. Y adem¨¢s, esta definici¨®n ser¨¢ muy distinta a la que escriba cualquier otra persona. Siempre habr¨¢ quien argumente que el sexo es solo una cuesti¨®n genital, pero si ese fuera el caso, entonces en el DNI deber¨ªamos se?alar si nacimos con pene o vulva. Y esta historia no va solo de eso.
Que el sexo sea una categor¨ªa estatal es un disparate tan grande como que lo fuese la raza. ?Alguien se imagina que nos hicieran confesar si somos blancos o negros en documentos oficiales? Evidentemente, tendr¨ªan que darnos m¨¢s de dos categor¨ªas para elegir, porque en el siglo XXI ya hemos entendido que la raza no es una cuesti¨®n binaria. Incluso si nos hicieran decir si somos blancos o no lo somos, ser¨ªa dificil¨ªsimo responder. Porque mucha gente preguntar¨ªa c¨®mo de blanco hay que ser para responder que uno es blanco. Algunos dir¨ªan que hay que ser albino, otros que basta con ser latinos, otros dir¨ªan que no hay blanco como el asi¨¢tico. Al final, habr¨ªa que asumir que no existe una piel del mismo color que otra y que esta categor¨ªa no puede ser en ning¨²n caso oficial pues la sola pregunta convertir¨ªa al Estado que la formulara en un Estado racista. Exactamente igual que la categor¨ªa del sexo en el DNI convierte a cualquier Estado que la exija en un Estado sexista.
En los temas de g¨¦nero tampoco hay blancos o negros. Lo que existe es un control de nuestros cuerpos por parte de otro cuerpo, el pol¨ªtico, absolutamente inadmisible y violento. ?Que hay que ser trans para librarse de esta condena? Entonces seamos todos trans. ¡°Para m¨ª ser trans es algo espiritual, no lo digo en plan religioso o una congregaci¨®n. Es m¨ªo, me pertenece a m¨ª¡±, explica en otro momento la joven y preclara Jules. Visto as¨ª, nada me parece tan universal como el grito de este colectivo. Es hora de que el Estado quite sus sucias manos de nuestros cuerpos. Y el DNI es un buen comienzo. Sin sexo y para todes.