Organizaciones feministas y LGTBI respaldan la aprobaci¨®n de una ley trans

Es un tema que tensiona al feminismo como pocos y de forma especial en Espa?a. El anuncio del Ministerio de Igualdad de la aprobaci¨®n de una ley sobre derechos trans ¡ªcuyo borrador est¨¢ previsto que se conozca este enero¡ª ha desatado un enfrentamiento entre organizaciones y corrientes especialmente virulento en las redes sociales. Este mi¨¦rcoles, organizaciones LGTBI y feministas, entre las que est¨¢n algunas de las impulsoras las huelgas de mujeres de los ¨²ltimos 8M, han hecho p¨²blico un manifiesto de apoyo a la futura normativa. ¡°Otorgar derechos no es un gesto contra las mujeres¡±, se?alan en el documento. ¡°Ni la existencia ni los derechos de las compa?eras trans nos ponen en peligro¡±. Cuando lanzaron el manifiesto hab¨ªa unas 80 organizaciones, seg¨²n los datos facilitados, cuyo n¨²mero superaba las 200 horas despu¨¦s.

El feminismo ¡°no se puede usar para oponerse o para cuestio?nar los derechos de las personas trans, que se enfrentan cotidianamente con el estigma y la discriminaci¨®n en muchos ¨¢mbitos de sus vidas¡±, se lee en el manifiesto titulado Feministas por los derechos de las personas trans. Lo suscriben colectivos de distintos puntos de Espa?a. Son, entre otros, FeministAlde, Ca la Dona, Plataforma 8M Tenerife, AMA Asturies, Asamblea Feminista o Eskalera Karakola, seg¨²n destacan en una nota de prensa.

¡°Ni la existencia ni los derechos de las compa?eras trans nos ponen en peligro. Su presencia no hace menos seguros nuestros espacios, sino que nos hace m¨¢s fuertes y m¨¢s libres¡±, argumentan en el escrito, firmado a t¨ªtulo individual tambi¨¦n por dos millares de personas, seg¨²n sus impulsoras.

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?El sexo se elige? Depende de a qui¨¦n pregunte

La propuesta del Ministerio de Igualdad plantea eliminar cualquier requisito m¨¦dico o psicol¨®gico para que quien se considere hombre o mujer, lo sea tambi¨¦n a efectos legales. Y prev¨¦, salvo cambios en el borrador, que los menores puedan decidir sobre posibles tratamientos hormonales desde los 16 a?os. Parte del feminismo consideran esta ley una amenaza: argumentan que el sexo no es algo que se elija, porque entonces todas las leyes que espec¨ªficamente evitan la discriminaci¨®n de las mujeres estar¨ªan en riesgo. A finales de 2020 se presentaron dos organizaciones que piden que se revisen bien todas las posibles consecuencias antes de aprobar la ley trans. La primera organizaci¨®n, Contra el Borrado de las Mujeres, est¨¢ formada por un centenar de asociaciones feministas. La segunda es la Confluencia Movimiento Feminista, con 40 asociaciones.

Las organizaciones que respaldan la aprobaci¨®n de la ley sostienen que otorgar derechos a las personas trans ¡°no es un gesto en contra de las mujeres¡± sino que ¡°profundiza y ampl¨ªa la democracia, mejora nuestra sociedad y fortalece nuestra lucha contra unas normas de g¨¦nero que nos limitan¡±. Subrayan que el feminismo se ha enriquecido con las aportaciones de mujeres trans ¡°y no podr¨ªa entenderse sin su participaci¨®n¡±. ¡°Con ellas hemos dado forma a los 8M, con ellas peleamos aqu¨ª codo a codo contra la violencia machista o por el derecho al aborto en pa¨ªses como Argentina¡±, a?aden.

Ninguna ley ¡°va a terminar de la noche a la ma?ana con la discriminaci¨®n y los problemas del colectivo trans, de la misma manera que las leyes contra la violencia de g¨¦nero no han acabado con ella¡±, prosiguen, pero impulsar una norma permitir¨¢ ¡°nombrar la discriminaci¨®n, se?alarla y denunciarla¡± como primer paso para eliminarla.

Frente al auge de la extrema derecha, que preocupa por igual a todas las corrientes feministas, las firmantes de este ¨²ltimo manifiesto se?alan que frente al intento de partidos como Vox de denegar ¡°derechos a quienes consideran diferentes¡±, reivindican ¡°la complejidad, riqueza y diversidad de la experiencia humana¡± y el impulso de una estructura social ¡°que acoja, cuide y proteja esa experiencia¡±.