?Qu¨¦ hacer?

Hace una semana escrib¨ªa en esta misma columna sobre la posibilidad de que el Gobierno concediera los indultos a los presos condenados por los hechos del oto?o de 2017. Era entonces solo una posibilidad que estaba en el ambiente pol¨ªtico, pero ese mismo d¨ªa...

Hace una semana escrib¨ªa en esta misma columna sobre la posibilidad de que el Gobierno concediera los indultos a los presos condenados por los hechos del oto?o de 2017. Era entonces solo una posibilidad que estaba en el ambiente pol¨ªtico, pero ese mismo d¨ªa el presidente del Gobierno fue muy expl¨ªcito sobre la intenci¨®n del Ejecutivo de concederlos. Y en solo siete d¨ªas, se han hecho encuestas que anticipan la p¨¦rdida del poder al PSOE; los suministradores de argumentario a la derecha han decretado que S¨¢nchez los concede solo para mantenerse en el cargo; hemos visto a un condenado por terrorismo de Estado, e indultado, opinar contra estos indultos y a la oposici¨®n organizar una manifestaci¨®n en la que volver¨¢n a agruparse en la plaza de Col¨®n junto a un Santiago Abascal reci¨¦n llegado de intentar agitar, sin ¨¦xito, el avispero de la frontera de Ceuta con Marruecos. La derecha ha establecido el marco, los indultos son la cesi¨®n de la soberan¨ªa nacional a cambio de los 13 votos de Esquerra Republicana en el Congreso de los Diputados, y buena parte del debate se mueve en ese marco.

Ese marco condena de antemano cualquier an¨¢lisis sobre qu¨¦ hacer, cu¨¢l es la lista de tareas convenientes para afrontar el problema pol¨ªtico catal¨¢n. Cu¨¢l ser¨ªa la pol¨ªtica m¨¢s inteligente a pesar de los propios dirigentes independentistas, que tardar¨¢n mucho tiempo en reconocer en voz alta el fracaso de su enso?aci¨®n ¡ªpor utilizar la expresi¨®n del Tribunal Supremo que los conden¨® a prisi¨®n, donde est¨¢n desde hace casi cuatro a?os¡ª. Habr¨¢ muchas personas con dudas razonables sobre los indultos, que no las despejar¨¢n en una u otra direcci¨®n en ausencia de un debate serio e interesado en la b¨²squeda de soluciones reales. Nadie ha puesto una propuesta alternativa sobre la mesa para tratar de acelerar el retorno a la normalidad en Catalu?a, algo estrat¨¦gico para Espa?a.

El campo de juego est¨¢ delimitado. O a favor o en contra. No hay m¨¢s discusi¨®n ni sobre el presente ni sobre el pasado inmediato. La democracia la trajo Juan Carlos I, pero el fin de ETA es obra de todos, tambi¨¦n de quienes acusaron de traicionar a los muertos a los que intentaron empujar el proceso. S¨¢nchez solo aspira a mantenerse en La Moncloa, Casado y el resto de l¨ªderes est¨¢n en esto por filantrop¨ªa. @PepaBueno