?Destruir para salvar?
Los lectores opinan sobre el da?o que se produce para generar energ¨ªa, el silencio de Pablo Casado, la vacunaci¨®n de la Selecci¨®n, la concesi¨®n del premio Princesa de Asturias a Teresa Perales y sobre la sugerencia de vuelta del himno a las aulas
El monte de Est¨¦par es conocido por ser el asentamiento de una de las mayores fosas comunes de represaliados de la Guerra Civil. Pues bien, hoy, en el mismo monte, poblado de carrascas y algunas encinas se ha cometido otro crimen: se ha levantado, de la noche a la ma?ana, un gigantesco generador e¨®lico, uno m¨¢s de las decenas que se est¨¢n levantando en la zona. Y este es especialmente hiriente, no solo por el da?o al monte, sino por la proximidad a dos pueblos en los que el impacto ambiental y paisaj¨ªstico es demoledor. Son Est¨¦par y Medinilla de la Dehesa. Una herida mortal en el paisaje, por no hablar de la condena a muerte de la colonia de buitres, que viven, o viv¨ªan hasta hoy, justo al lado. Est¨¢ bien generar energ¨ªa de forma sostenible, pero no merece la pena si se trata de un negocio destructor. Si para salvar el planeta primero hay que destrozarlo, apaga y v¨¢monos.
Sebasti¨¢n Fern¨¢ndez Izquierdo. Petrer (Alicante)
Y Pablo, sin contestar
Ante cualquier pregunta relacionada con las noticias recientes sobre los presuntos casos de corrupci¨®n del PP, Pablo Casado insiste en no contestar nada al respecto, como si no fuese con ¨¦l. Sin embargo, con frecuencia insiste en los grandes logros de su partido en sus etapas de Gobierno. Eso es una grave contradicci¨®n, ya que, si Casado reivindica unos hechos del pasado, no puede ignorar otros, especialmente si son de la misma ¨¦poca y realizados por las mismas personas. Si reivindica unos hechos, no puede ignorar otros.
Jes¨²s Mallol. Rota (C¨¢diz)
Vacunar a la Selecci¨®n
Establecer prioridades es necesario. Es evidente que cualquier sociedad avanzada que se precie debe tener claras cu¨¢les son las suyas. Lo sorprendente es que la nuestra, y nuestros gobernantes concretamente, prioricen vacunar a futbolistas antes que al personal de los supermercados, trabajadores incansables durante toda la pandemia. Quiero recordar que mientras unos descansaban de su siempre duro trabajo en sus deliciosas mansiones, otros echaban el ¨²ltimo aliento desprotegidos, ofreciendo un servicio esencial: la venta de alimentos. De bien nacido es ser agradecido, pero parece que en este caso, ni somos agradecidos ni recordamos lo vivido.
Juan S¨¢nchez Cano. Madrid
Teresa, campeona
Gran acierto que el Premio Princesa de Asturias para el deporte haya sido concedido a Teresa Perales. Bien por el jurado presidido por Abel Ant¨®n, por entregar tan importante galard¨®n a quien ha sido nuestra deportista paral¨ªmpica de nataci¨®n m¨¢s laureada. Premiar la superaci¨®n como ejemplo para la sociedad es algo m¨¢s que acertado y recomendable en valores a potenciar. El deporte tiene en Teresa Perales a nuestra sirena m¨¢s campeona.
David Garc¨ªa. Madrid
Lo que no hay que recuperar
Tengo 86 a?os. Recuerdo mi colegio perfectamente, el Lope de Vega, de Carabanchel, en Madrid. Tambi¨¦n a mi maestra, do?a Nati. Lo recuerdo todo con mucho cari?o. Pero tambi¨¦n recuerdo que a la entrada y a la salida cant¨¢bamos precisamente ante la bandera el Cara al sol. Lo recuerdo con tristeza a mis muchos a?os. Recuperar ciertos h¨¢bitos es muy lamentable.
Antonia Garc¨ªa Rodr¨ªguez. Madrid
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