Paz por econom¨ªa
Tras recibir el espaldarazo de la Casa Blanca, el nuevo Gobierno israel¨ª ofrece ayuda financiera a la Autoridad Palestina sin abordar los problemas pol¨ªticos de fondo
La visita del ministro de Defensa israel¨ª, Benny Gantz, al presidente palestino, Mahmud Abbas, ha puesto fin a una d¨¦cada de ruptura de puentes a ambos lados de la L¨ªnea Verde que separaba Cisjordania del Estado jud¨ªo hasta la ocupaci¨®n de 1967, pero no reabre la senda del proceso de paz, bloqueada desde 2014. El anuncio de un plan para fortalecer la econom¨ªa palestina presentado por el exgeneral Gantz se ha producido apenas dos d¨ªas despu¨¦s de la reuni¨®n que mantuvieron el viernes en Washington el presidente de EE UU, Joe Biden, y el primer ministro israel¨ª, Naftali Bennett, quien recibi¨® el espaldarazo de la Casa Blanca a su Gobierno de amplia coalici¨®n, que en junio enterr¨® la era de hegemon¨ªa electoral de Netanyahu.
Como responsable pol¨ªtico de la ocupaci¨®n militar, el ministro Gantz ha sido el encargado de ofrecer un rescate de urgencia de 500 millones de s¨¦queles (132 millones de euros) para reflotar las maltrechas arcas de la Autoridad Palestina, anticipo de los tributos que Israel recauda en su nombre. Al mismo tiempo ha ofrecido miles de permisos de trabajo para palestinos y centenares de licencias de construcci¨®n el ¨¢rea de Cisjordania sobre la que mantiene control exclusivo.
En realidad, Israel se limita a volver a cumplir, al menos en parte, cap¨ªtulos de los Acuerdos de Oslo que hab¨ªan sido relegados por los sucesivos gobiernos de Netanyahu entre 2009 y 2021. En la Casa Blanca, Biden defendi¨® formalmente la soluci¨®n de los dos Estados, pero el primer ministro israel¨ª ha puntualizado que ¡°no hay proceso diplom¨¢tico con los palestinos ni lo va a haber¡±.
El plan de rescate ofrecido por Israel representa una tabla de salvaci¨®n para el presidente palestino. Pr¨®ximo a cumplir 86 a?os e instalado en el poder desde 2005 sin haberse vuelto a someter a las urnas desde entonces, Abbas se ha visto cuestionado por sus ciudadanos, hartos de la corrupci¨®n de su Gobierno. Muchos de ellos se echaron, adem¨¢s, a la calle en protesta por la muerte de un disidente pol¨ªtico detenido por las fuerzas de seguridad palestinas. La Uni¨®n Europea, contribuyente destacado en la financiaci¨®n de la Autoridad Palestina, ha condenado la brutal represi¨®n policial de estas marchas.
En medio del declive de la econom¨ªa, que se desplom¨® un 11,5% en 2020 a consecuencia de la pandemia, agravado adem¨¢s por la dr¨¢stica ca¨ªda de la ayuda internacional, los s¨¦queles de Israel sirven ante todo para reflotar al veterano rais palestino ante la emergencia del islamismo de Ham¨¢s. Aunque la oferta de financiaci¨®n por paz ¡ªpero sin territorios¡ª busque estabilizar el liderazgo de la Autoridad Palestina, la ausencia de toda esperanza de que puedan contar con un Estado propio dif¨ªcilmente satisfar¨¢ a sus ciudadanos. Ni a los pa¨ªses vecinos ni a la comunidad internacional.
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