Insensibilidad y humillaci¨®n
Los lectores opinan sobre el rechazo de PP y Vox de sustituir en la Constituci¨®n la palabra ¡°disminuido¡± por ¡°personas discapacitadas¡±, la funci¨®n p¨²blica, la memoria hist¨®rica y reaccionan al editorial de EL PA?S sobre el laborismo
Las abajo firmantes, todas personas ciegas totales, queremos expresar nuestro m¨¢s en¨¦rgico rechazo a los grupos parlamentarios que votaron en el Congreso en contra de sustituir en la Constituci¨®n la palabra ¡°disminuido¡± por ¡°personas discapacitadas¡±. Con su postura sesgada y arbitraria demuestran su hipocres¨ªa y falta de sensibilidad hacia los colectivos afectados que llegan a 3,8 millones de personas en nuestro pa¨ªs. Con su indignidad...
Las abajo firmantes, todas personas ciegas totales, queremos expresar nuestro m¨¢s en¨¦rgico rechazo a los grupos parlamentarios que votaron en el Congreso en contra de sustituir en la Constituci¨®n la palabra ¡°disminuido¡± por ¡°personas discapacitadas¡±. Con su postura sesgada y arbitraria demuestran su hipocres¨ªa y falta de sensibilidad hacia los colectivos afectados que llegan a 3,8 millones de personas en nuestro pa¨ªs. Con su indignidad nos sentimos humillados. Desde ni?os hemos luchado por alcanzar la dignidad que la sociedad ancestralmente nos arrincon¨® y que ahora estos representantes de la ciudadan¨ªa nos devuelven a los tiempos del oscurantismo cuando las personas con discapacidad estaban en el ostracismo.
Ernesto de Gregorio, Teresa Alcal¨¢, Antonio Casado, Concepci¨®n S¨¢nchez y Bernab¨¦ Mart¨ªnez. Madrid
Exigir y recompensar a los funcionarios
Los empleados p¨²blicos estamos sometidos a un tipo de relaci¨®n laboral absolutamente exigente, que la jurisprudencia califica de ¡°especial sujeci¨®n¡±, para garantizar que las Administraciones presten, bajo cualquier circunstancia, los servicios p¨²blicos establecidos; al tomar posesi¨®n del cargo aceptamos un contrato de adhesi¨®n, en el que pueden cambiarse las cl¨¢usulas contractuales, todos los a?os a trav¨¦s de los Presupuestos Generales del Estado (PGE), sin consentimiento de la parte m¨¢s d¨¦bil: el trabajador p¨²blico. Se est¨¢n discutiendo los nuevos PGE para el a?o 2022. No es solo cuesti¨®n de recuperar el poder adquisitivo de nuestros sueldos, se trata de reconocer que la democracia espa?ola, si quiere ser de calidad, debe garantizar el acceso universal a determinados servicios y prestaciones, b¨¢sicos e irrenunciables, muchos de los cuales no tienen precio accesible en el mercado. Esto exige un servicio p¨²blico eficaz y suficiente, donde trabajen los mejores profesionales porque se dan las mejores condiciones de empleo.
Luis Fernando Crespo Zorita. Las Rozas (Madrid)
Honrar la memoria
EL PA?S editorializaba, el pasado viernes, sobre la posibilidad abierta por el Constitucional de investigar los cr¨ªmenes ocurridos durante la dictadura franquista, sin que, por hacerlo, se deriven consecuencias penales para los responsables de aquellos delitos porque aquellas atrocidades ya han prescrito. Estar¨ªa bien que entre las decisiones que pudieran tomar las autoridades estuviera la de colocar en el edificio de la Puerta del Sol de Madrid una placa que dijera: ¡°En los s¨®tanos de esta casa, la antigua Direcci¨®n General de Seguridad, estuvieron detenidas miles de personas, que sufrieron torturas y humillaciones por luchar por la libertad. Incluso, algunos fueron asesinados impunemente. Ocurri¨® entre los a?os 1939 y 1977, durante la dictadura franquista¡±.
Jes¨²s Bermejo Bermejo. Madrid
Corbyn caricaturado
Calificar al anterior l¨ªder laborista de fracasado por sus ideas izquierdistas, como se hizo en un editorial de este diario, me parece un tanto esperp¨¦ntico. La mayor¨ªa de noticias aqu¨ª le¨ªdas hac¨ªan referencia a ocurrencias, contradicciones, cambios de opini¨®n y amagos de s¨ª, pero no en la salida de la UE. Una caricatura. En la oposici¨®n y con esa puesta en escena no es extra?o que la gente renunciara a seguir al veleta pol¨ªtico Corbyn, as¨ª dibujado. Incidir en su izquierdismo como causa principal no deja de ser un martillo dando golpes en el clavo del capitalismo, que llaman centro para mayor gloria de la comuni¨®n que profesan.
Jos¨¦ Rivas S¨¢nchez. Almer¨ªa