11.246 millones de euros
La desinformaci¨®n interesada del PP sobre los fondos europeos se combate con transparencia y comunicaci¨®n
Con nueve millones de euros pueden hacerse muchas cosas. El Ministerio de Trabajo ha destinado esa cantidad, procedente de los fondos europeos Next Generation, a financiar programas contra el desempleo juvenil en distintos sectores productivos a partir de las ideas aportadas por varias comunidades aut¨®nomas. El resultado ha sido la asignaci¨®n de nueve millones al sector agrario de Extremadura, el industrial en el Pa¨ªs Vasco, el tur¨ªstico en Valencia; y la repoblaci¨®n de zonas rurales fue la causa que favoreci¨® a Navarra. Conviene contarlo para que la acusaci¨®n de clientelismo y dedazo digital ...
Con nueve millones de euros pueden hacerse muchas cosas. El Ministerio de Trabajo ha destinado esa cantidad, procedente de los fondos europeos Next Generation, a financiar programas contra el desempleo juvenil en distintos sectores productivos a partir de las ideas aportadas por varias comunidades aut¨®nomas. El resultado ha sido la asignaci¨®n de nueve millones al sector agrario de Extremadura, el industrial en el Pa¨ªs Vasco, el tur¨ªstico en Valencia; y la repoblaci¨®n de zonas rurales fue la causa que favoreci¨® a Navarra. Conviene contarlo para que la acusaci¨®n de clientelismo y dedazo digital que ha lanzado urbi et orbi el PP en la ¨²ltima semana se desacredite por s¨ª misma. La rapidez de reflejos de Isabel D¨ªaz Ayuso ha servido para convertir en titular medi¨¢tico un cuestionamiento de ese reparto, pactado con las comunidades y sin queja de las no favorecidas.
Lo grave de la nimiedad es que el PP de Pablo Casado ha querido usar la ausencia de la Comunidad de Madrid en ese reparto como paradigma de los criterios del Gobierno en la asignaci¨®n de los 11.246 millones de euros del primer desembolso europeo. Las elecciones de Castilla y Le¨®n pueden explicar todo este retorcimiento argumental, pero tambi¨¦n pueden ofrecer lecciones al Gobierno sobre la necesidad de ofrecer m¨¢s y mejores explicaciones sobre las ingentes inversiones que se est¨¢n acometiendo. La poblaci¨®n dif¨ªcilmente puede valorar y asumir su magnitud, dada la complejidad de los mecanismos de asignaci¨®n, aprobaci¨®n y desembolso. Espa?a sigue siendo el primer y ¨²nico pa¨ªs en cumplir con las estrictas condiciones de la UE y en recibir los fondos, pero es mucho mejor explicarlo con claridad, transparencia y tenacidad.
No solo Bruselas y el Gobierno espa?ol han creado mecanismos de fiscalizaci¨®n sobre bases precisas y acordadas con las comunidades (tras casi 60 reuniones sectoriales), sino que todo el proceso est¨¢ sometido a un control estricto y regulado a trav¨¦s del Operational Arrangement (o acuerdo de aplicaci¨®n), publicado desde noviembre. Eso explica, al menos, dos cosas: la indiferencia con que Bruselas ha acogido las denuncias del PP sobre el presunto favoritismo pol¨ªtico del Gobierno, y la escalada verbal que los l¨ªderes conservadores han ido acelerando ante la ausencia de datos, indicios o hechos que prueben la discrecionalidad clientelar de esos fondos. Como han recordado incluso los medios poco afines al Gobierno de coalici¨®n, de las seis comunidades m¨¢s beneficiadas por los fondos, cuatro de ellas est¨¢n gobernadas por el Partido Popular, con asignaciones que equivalen a un total de 4.551 millones: Andaluc¨ªa 1.915 millones de euros; Madrid, 1.213; Castilla y Le¨®n, 742, y Galicia, 681. Las insinuaciones que un potencial presidente del Gobierno como Pablo Casado ha dejado en el aire en declaraciones deliberadamente ambiguas aspiran a erosionar al Ejecutivo, como es su obligaci¨®n, pero el riesgo que asume es m¨¢s grave. Sembrar la semilla de la duda de un uso fraudulento o corrupto de esos fondos sin ning¨²n dato cre¨ªble podr¨ªa dejar en suspenso la misma aplicaci¨®n de los fondos. Cosa distinta es que el Gobierno vaya a remolque de las provocaciones de la oposici¨®n en lugar de programar una comunicaci¨®n que llegue a toda la ciudadan¨ªa, vote lo que vote, sobre una operaci¨®n crucial para la transformaci¨®n de Espa?a. La mejora de la transparencia sobre esos planes podr¨ªa ser el mejor ant¨ªdoto contra la desinformaci¨®n interesada y los bulos injuriosos. Frases de alg¨²n l¨ªder (como que son ¡°fondos del PSOE y no fondos de Espa?a¡±) son munici¨®n fatua, pero requieren ser rebatidas con transparencia y densidad informativa.