La falaz nueva guerra fr¨ªa
La agresividad de Putin en Ucrania no est¨¢ impulsada por un sentimiento de fortaleza, sino por el miedo a ser d¨¦bil e inferior. La respuesta de la OTAN tiene mucho de hablar alto y cargar un garrote peque?o
Mientras la guerra caliente en Ucrania contin¨²a sembrando muerte y destrucci¨®n, la OTAN intenta lanzar una nueva guerra fr¨ªa contra Rusia que probablemente ser¨¢ una parodia de la Guerra Fr¨ªa contra la Uni¨®n Sovi¨¦tica de Josef Stalin y Leonidas Breznev.
Hace unos a?os, tras la anexi¨®n de Crimea por Rusia, la proclamaci¨®n de dos rep¨²blicas ...
Mientras la guerra caliente en Ucrania contin¨²a sembrando muerte y destrucci¨®n, la OTAN intenta lanzar una nueva guerra fr¨ªa contra Rusia que probablemente ser¨¢ una parodia de la Guerra Fr¨ªa contra la Uni¨®n Sovi¨¦tica de Josef Stalin y Leonidas Breznev.
Hace unos a?os, tras la anexi¨®n de Crimea por Rusia, la proclamaci¨®n de dos rep¨²blicas separadas en el este de Ucrania y el fracaso de los primeros Acuerdos de Minsk entre Europa y Rusia, fui testigo cercano de c¨®mo el complejo militar-industrial americano y la burbuja de pol¨ªtica exterior de Washington aprovecharon inmediatamente la ocasi¨®n para llenar el vac¨ªo. En su nombre, el Atlantic Council, un think tank con fuertes conexiones con la OTAN, el Pent¨¢gono y la diplomacia, proclam¨® solemnemente la urgencia de que ¡°Estados Unidos debe proporcionar asistencia militar defensiva letal (sic) a Ucrania¡±. Pocos d¨ªas despu¨¦s, se firmaron los segundos Acuerdos de Minsk para descentralizar Ucrania y establecer un estatus especial para las dos rep¨²blicas de Donb¨¢s ¡ªque, sin la participaci¨®n de Estados Unidos, nunca se aplicaron¡ª. En el proceso posterior, Ucrania reform¨® su Constituci¨®n para consagrar el ¡°curso estrat¨¦gico¡± de convertirse en miembro de la OTAN. Todav¨ªa en septiembre de 2021, la OTAN estaba realizando ejercicios militares en Ucrania.
El error criminal de Vlad¨ªmir Putin de atacar a Ucrania ha satisfecho esos impulsos beligerantes. Sin embargo, las diferencias con la amenaza roja de la Uni¨®n Sovi¨¦tica son enormes. Ahora no hay misiles nucleares dirigidos al enemigo. No hay carrera armament¨ªstica sino reducci¨®n de armas. Rusia no ocupa ni controla media Europa. Los reg¨ªmenes comunistas no gobiernan una cuarta parte de la poblaci¨®n mundial. No hay una ideolog¨ªa pol¨ªtica ni una inclinaci¨®n intelectual para confrontar dos sistemas pol¨ªticos y econ¨®micos antag¨®nicos. No hay partidos pol¨ªticos prorrusos con apoyo popular en las democracias occidentales. Las guerras locales en ?frica, Asia o Am¨¦rica Latina no son exacerbadas por la rivalidad entre dos grandes potencias. Las econom¨ªas son interdependientes en un mundo globalizado.
Por un lado, la ¡°amenaza m¨¢s significativa y directa¡± de Rusia, como declar¨® la reciente cumbre de la OTAN, es casi pat¨¦tica. La agresividad de Putin no est¨¢ impulsada por un sentimiento de fortaleza, sino por el miedo a ser d¨¦bil e inferior, el temor a estar rodeado de un peligro inminente. El imperio ruso perdi¨® casi el 20% de su poblaci¨®n en la revoluci¨®n bolchevique y la disoluci¨®n de la Uni¨®n Sovi¨¦tica separ¨® al 50% de sus habitantes; como compensaci¨®n, Crimea y Donb¨¢s apenas a?adir¨ªan un 4% a la poblaci¨®n actual de Rusia. El Ej¨¦rcito ruso es m¨¢s poderoso de lo que corresponder¨ªa a su econom¨ªa y poblaci¨®n. Pero el imperio sigue decayendo, y la guerra de Ucrania es una coartada para el sufrimiento interno y una ret¨®rica de ¡°unidad nacional¡±.
Por otro lado, el rearme de Estados Unidos y sus aliados ser¨¢ extremadamente limitado. El gasto militar de EE UU, que lleg¨® a representar el 8% del PIB en los a?os ochenta, est¨¢ ahora por debajo del 4%. Las tropas norteamericanas en Europa son menos de un tercio de las que hab¨ªa durante la Guerra Fr¨ªa. No habr¨¢ un despliegue de nuevas tropas, sino una rotaci¨®n de algunas de las actualmente desplegadas. El aumento del gasto militar de los dem¨¢s miembros de la OTAN hasta el 2% del PIB es s¨®lo una hip¨®tesis para sucesivos gobiernos y ciclos electorales. En resumen, el nuevo Concepto Estrat¨¦gico de la OTAN parece lo contrario del lema del guerrero presidente Ted Roosevelt: algo as¨ª como hablar alto y cargar un garrote peque?o.
Mientras tanto, Ucrania seguir¨¢ sufriendo muerte y destrucci¨®n. No se convertir¨¢ en miembro de la OTAN, algo que la cumbre de Madrid no mencion¨® como posibilidad, en contraste con su ferviente apoyo en la cumbre de 2021. Los ucranios tambi¨¦n seguir¨¢n so?ando con el ingreso en la Uni¨®n Europea, que a otros catorce pa¨ªses excomunistas les cost¨® entre ocho y doce a?os. Ucrania es m¨¢s grande que todos estos pa¨ªses y el m¨¢s corrupto y pobre de Europa.
No debemos olvidar que el horizonte de los pol¨ªticos es a corto plazo. El anterior Concepto Estrat¨¦gico de la OTAN en 2010, que acog¨ªa a Rusia como ¡°socio estrat¨¦gico¡±, fue cancelado menos de dos a?os despu¨¦s. En 2024 habr¨¢ elecciones en Estados Unidos, en el Reino Unido y al Parlamento Europeo. Es muy dudoso que la guerra sea un tema de campa?a relevante para entonces. Ese a?o tambi¨¦n deber¨ªa haber elecciones en Rusia y Ucrania, pero ya se vera si es as¨ª.