La visita de China a Rusia
La propuesta de Xi Jinping de mediaci¨®n en la guerra de Ucrania llega lastrada por su falta de neutralidad
La visita de Estado del presidente Xi Jinping a su hom¨®logo Vlad¨ªmir Putin ha dejado abundantes declaraciones sobre la relaci¨®n bilateral entre las dos potencias autoritarias y sobre la guerra desatada por Rusia contra Ucrania. En el primer ¨¢mbito, los dos pa¨ªses env¨ªan un mensaje de creciente cercan¨ªa, firmando una pl¨¦tora de acuerdos en distintas ¨¢reas comerciales. Hasta ahora, al menos, esa relaci¨®n ha tenido un tope claro: China ha evitado movimientos de apoyo a Rusia que pudieran desatar sanciones occidentales, evidenciando que tiene m¨¢s inter¨¦s en mantener vivo el flujo comercial en esa ...
La visita de Estado del presidente Xi Jinping a su hom¨®logo Vlad¨ªmir Putin ha dejado abundantes declaraciones sobre la relaci¨®n bilateral entre las dos potencias autoritarias y sobre la guerra desatada por Rusia contra Ucrania. En el primer ¨¢mbito, los dos pa¨ªses env¨ªan un mensaje de creciente cercan¨ªa, firmando una pl¨¦tora de acuerdos en distintas ¨¢reas comerciales. Hasta ahora, al menos, esa relaci¨®n ha tenido un tope claro: China ha evitado movimientos de apoyo a Rusia que pudieran desatar sanciones occidentales, evidenciando que tiene m¨¢s inter¨¦s en mantener vivo el flujo comercial en esa direcci¨®n que en sostener al Kremlin. La visita reafirma adem¨¢s que ¡ªpese al fuerte col¨¢geno de la com¨²n animadversi¨®n a la supremac¨ªa de EE UU¡ª esta no es una alianza pol¨ªtico-militar. La relaci¨®n que los mismos socios definieron hace un a?o como ¡°sin l¨ªmites¡±, de momento s¨ª los tiene. Y tampoco es previsible que cambie la clara subordinaci¨®n de un Mosc¨² d¨¦bil ante un Pek¨ªn fuerte.
En la segunda cuesti¨®n, el futuro de la guerra en Ucrania, la visita evidencia los esfuerzos de Pek¨ªn para postularse como un mediador neutral. Los v¨ªnculos que va construyendo con Rusia chocan con esa presunci¨®n, pero no fuerzan a descartar sin m¨¢s una posible mediaci¨®n futura. Las iniciativas de paz deben ser atendidas, y har¨¢ bien Kiev en escuchar los planteamientos de Pek¨ªn, a pesar de que este plan necesite todav¨ªa una maduraci¨®n mayor para resultar cre¨ªble y mientras Xi, al igual que Putin, sigue eludiendo denominar al conflicto en Ucrania como guerra y recurre al eufemismo de ¡°crisis¡±.
Putin ha declarado que ¡°muchas de las disposiciones del plan de paz presentado por China est¨¢n en consonancia con los enfoques rusos y podr¨¢n tomarse como base para un acuerdo de paz cuando est¨¦n listos para ello en Occidente y Kiev¡±. El llamado plan de paz chino ¡ªpublicado hace un mes¡ª consiste en una mera enumeraci¨®n de principios, alguno formulado con una ambig¨¹edad contradictoria. El primero de ellos apela al respeto a la soberan¨ªa, independencia e integridad territorial de los pa¨ªses y contiene, en s¨ª mismo, la cr¨ªtica a las acciones que ha emprendido Putin contra Ucrania, y que Pek¨ªn a la vez no reprueba. La posici¨®n de China consiste en la pr¨¢ctica en consentir al agresor la consecuci¨®n de sus objetivos sin pagar ning¨²n coste. China no condena la invasi¨®n, tampoco avala las sanciones contra Rusia y critica el respaldo militar al agredido. Pero sin ese apoyo, Putin ya habr¨ªa sometido a Ucrania hace tiempo. Es necesario trabajar para la paz ¡ªy eso puede formar parte del sentido de la visita de Pedro S¨¢nchez a China el 30 y 31 de este mes¡ª, pero en este momento el Kremlin est¨¢ lejos de hacerlo: el pa¨ªs agredido sigue necesitando ayuda para defenderse mientras siguen vigentes las sanciones contra Rusia.