El odio no es la respuesta

Resulta sumamente triste ver el odio alimentado por la situaci¨®n pol¨ªtica actual, con las protestas contra la formaci¨®n del nuevo Gobierno de Pedro S¨¢nchez. Hace ya mucho tiempo que la rabia y el desprecio se han apoderado de los s¨ªmbolos que en un pasado fueron una simple representaci¨®n de...

Resulta sumamente triste ver el odio alimentado por la situaci¨®n pol¨ªtica actual, con las protestas contra la formaci¨®n del nuevo Gobierno de Pedro S¨¢nchez. Hace ya mucho tiempo que la rabia y el desprecio se han apoderado de los s¨ªmbolos que en un pasado fueron una simple representaci¨®n del pa¨ªs, manch¨¢ndolos de una connotaci¨®n terrible y desvincul¨¢ndolos de todos esos ciudadanos que no se mueven por este odio tan cegador y peligroso. Ahora, en cambio, parece que los gritos de alabanza al franquismo no solo son tolerados, sino que hasta pueden llegar a recibirse con simpat¨ªa. Los insultos y las faltas de respeto constantes son la norma ante las diferencias ideol¨®gicas, y se ha conseguido, sin ninguna dificultad aparente, que signos como la bandera del pa¨ªs acaben representando una oda al fascismo. ?Hasta cu¨¢ndo vamos a seguir dando rienda suelta a estos comportamientos, justific¨¢ndolos con el enfado de sus defensores? La respuesta ante la decepci¨®n o por las discrepancias con la pol¨ªtica del pa¨ªs no se hallar¨¢ nunca en la violencia ni el odio. Si no tenemos esto claro, estamos perdidos.

Julieta Mir Roca. Barcelona

El privilegio de morir

He vivido mi primera p¨¦rdida y he comprobado que fallecer es un lujo. No solamente el ata¨²d puede llegar a rondar los 5.000 euros. La incineraci¨®n suma hasta 2.000 euros a esa cifra, y en caso de entierro, como m¨ªnimo son 1.400 euros. Los n¨²meros empeoran con gastos como la sala de velatorio, la ceremonia y las flores. La preocupaci¨®n se suma al dolor de la p¨¦rdida, una mezcla de emociones tan heterog¨¦nea como desagradable. Decido tomarme la vida con iron¨ªa y comentar con familiares lo curioso que resulta descubrir que morir es un privilegio.

Sarah Salau Morales. Barcelona

Opinar de todo

?De verdad no se siente usted un extra?o cuando todo el mundo tiene una opini¨®n sobre lo que est¨¢ pasando estos d¨ªas y usted no? Extra?o es poco; me siento directamente un extraterrestre. Pero ?ni siquiera tiene usted un parecer, aunque sea vago, sobre los pactos de Pedro S¨¢nchez ni sobre la amnist¨ªa? Pues no, no lo tengo, qu¨¦ le voy a hacer. ?Y en su casa c¨®mo lo llevan? Fatal, mi mujer no me habla, mis hijos se averg¨¹enzan de m¨ª. Dicen que vivir con una persona sin criterio es insoportable. ?Usted no se hace preguntas como para qu¨¦ se pacta con los separatistas o por qu¨¦ se amnist¨ªa a los implicados en el proc¨¦s? No; yo pienso que los que deciden estas cosas tendr¨¢n m¨¢s datos que yo. Pero ?qu¨¦ clase de persona es usted? Pues no s¨¦; a m¨ª me ense?aron de peque?o que hay que confiar en los que saben m¨¢s que t¨² y no ir de listo por la vida.

Mario Su¨¢rez. Pilas (Sevilla)

Tragedia evitable

Lo que pas¨® el s¨¢bado en Brasil es una verg¨¹enza: una joven de 23 a?os falleci¨® de una parada card¨ªaca durante un concierto de Taylor Swift en R¨ªo de Janeiro debido a las altas temperaturas y a la mala gesti¨®n del evento. En el recinto no dejaban entrar agua y tampoco la proporcionaban a las personas que se encontraban mal. Los organizadores del concierto deber¨ªan haber puesto la seguridad de las personas antes que todo, pero no es lo que hicieron. Esta tragedia podr¨ªa haberse evitado. Esperemos que no vuelva a repetirse.

Ainoa Merchan Carballo. Sant Celoni (Barcelona)