X, un nido de negacionistas clim¨¢ticos
En Francia, las cuentas de usuarios que niegan el calentamiento global y se dedican a atacar a cient¨ªficos y ecologistas no han dejado de crecer desde la pandemia
A ciertas personas, visiblemente, les cuesta entender que otras puedan tener principios y que, para colmo, intenten vivir siendo coherentes con ellos. Hace unos d¨ªas, la activista clim¨¢tica Greta Thunberg viaj¨® al departamento del Tarn, en el sur de Francia, para protestar, junto a grupos ecologistas franceses, contra la construcci¨®n de una autopista entre Toulouse y Castres. No hac¨ªa ni 24 horas que Greta hab¨ªa puesto un pie en el pueblo de Sa?x, cuando el vicepresidente macronista del ¨¢rea metropolitana de Toulouse, Vincent Ter...
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A ciertas personas, visiblemente, les cuesta entender que otras puedan tener principios y que, para colmo, intenten vivir siendo coherentes con ellos. Hace unos d¨ªas, la activista clim¨¢tica Greta Thunberg viaj¨® al departamento del Tarn, en el sur de Francia, para protestar, junto a grupos ecologistas franceses, contra la construcci¨®n de una autopista entre Toulouse y Castres. No hac¨ªa ni 24 horas que Greta hab¨ªa puesto un pie en el pueblo de Sa?x, cuando el vicepresidente macronista del ¨¢rea metropolitana de Toulouse, Vincent Terrail-Nov¨¨s, favorable al controvertido proyecto de la A69, acus¨® en X a la activista de haber cogido ¨Daqu¨ª viene lo mejor, porque el listado es muy preciso¨D ¡°un boeing 747, dos lanzaderas en el aeropuerto, dos taxis y un coche para llegar hasta Toulouse desde Washington¡±, e ironizaba sobre ¡°la huella de carbono¡± que supone semejante traves¨ªa. ¡°Y mientras, los ecologistas aplaudiendo. El mundo est¨¢ enloquecido¡±, escribi¨®, muy indignado, en un tuit que, curiosamente, borr¨® en silencio y sin dar explicaciones al cabo de unos d¨ªas, al darse cuenta de que estaba propagando una noticia falsa fabricada en la fachosfera.
Como explic¨® el diario Lib¨¦ration, el pol¨ªtico, cuyo mensaje tuvo 800.000 visualizaciones y dio lugar a numerosos retuits, se inspir¨® de un tuit publicado por una cuenta perteneciente a la extrema derecha zemmouriana, llamada @France61224153, seguida por 18.000 personas. La foto de perfil de esta cuenta creada en 2022 es la de una mujer sonriente de unos cincuenta a?os junto a una bandera tricolor con el escrito ¡°amo mi pa¨ªs y sus valores; equipo bocadillo de jam¨®n y mantequilla¡±, en referencia al famoso y tradicional jambon beurre, usado como s¨ªmbolo identitario por la ultraderecha para estigmatizar a los musulmanes.
No deja de ser llamativo que un macronista se preste al juego sucio de intentar desacreditar con argumentos tan grotescos a una activista que, guste o no, lleva a?os demostrando la sinceridad de su compromiso ecol¨®gico. Un par de minutos le hubieran bastado para comprobar que Greta no estaba en Washington sino en Londres y que, siempre que se desplaza al extranjero, elige el tren o incluso el catamar¨¢n si se trata de recorrer largas distancias. Al difundir este bulo, Terrail-Nov¨¨s se ha convertido en un mercenario m¨¢s de la comunidad negacionista francesa cuya presencia en X no ha dejado de crecer desde la pandemia, seg¨²n un reciente estudio de cuatro investigadores del CNRS ¨Del CSIC espa?ol¨D, para el que fueron analizados m¨¢s de 400 millones de tuits entre 2021 y 2023. Un colectivo que empez¨® a constituirse durante el verano de 2022 en torno al movimiento antivacunas, se consolid¨® con la guerra en Ucrania y la propaganda rusa, hasta casi confundirse hoy con la derecha identitaria, y cuyo prop¨®sito es ¡°sembrar la duda sobre la realidad del cambio clim¨¢tico y frenar toda acci¨®n encaminada a reducir la huella del hombre sobre el clima¡±.
Para conseguirlo, esta comunidad ¨Dque es 3,5 veces m¨¢s propensa a compartir contenido t¨®xico que cualquier otra en X¨D, recurre a la ¡°estrategia de las cinco D¡±: desacreditar, deformar, distraer, disuadir y dividir, introduciendo la idea de que el discurso ecologista est¨¢ urdido por ¡°las ¨¦lites¡± para controlar a la poblaci¨®n, o destruir la econom¨ªa, porque, sostienen, el CO2 es bueno para el planeta. Cuanto m¨¢s delirante, mejor. La comunidad cient¨ªfica y los activistas ecologistas son el principal objetivo de este grupo de iluminados que no duda en atacarlos personalmente, como en el caso paradigm¨¢tico de Greta, cuya capacidad para digerir a diario tanto odio y tanta burda estupidez me resulta admirable.
El deleznable acoso que sufre este colectivo no deber¨ªa encontrar apoyo ninguno entre los partidos del arco republicano. Por muy tentador que pueda resultar para un pol¨ªtico en busca de popularidad sumarse al actual linchamiento del discurso ecol¨®gico en medio a las protestas de los agricultores, verter fango sobre lo que probablemente es la ¨²nica corriente capaz de salvarnos del futuro apocal¨ªptico que nos deparan los cient¨ªficos, tarde o temprano tendr¨¢ un precio. Y lo pagaremos todos.