Denunciar la violencia machista
Los lectores escriben sobre las agresiones a mujeres, la decisi¨®n de Pedro S¨¢nchez de seguir como presidente, los bulos y la informaci¨®n interesada y el fallecimiento de amigos
Ten¨ªa 13 a?os cuando me enamor¨¦ de un chico malote, atractivo y, a ojos de todos, una persona amable, vergonzosa e incluso protectora de los suyos. Los primeros meses fueron de plena felicidad; nunca antes hab¨ªa sentido el amor as¨ª. Pero poco a poco las cosas fueron cambiando. La felicidad y el amor se transformaron en inseguridad, agresividad y celos. Desde que identifiqu¨¦ que era v¨ªctima de violencia de g¨¦nero, he arrastrado un sentimiento de injustici...
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Ten¨ªa 13 a?os cuando me enamor¨¦ de un chico malote, atractivo y, a ojos de todos, una persona amable, vergonzosa e incluso protectora de los suyos. Los primeros meses fueron de plena felicidad; nunca antes hab¨ªa sentido el amor as¨ª. Pero poco a poco las cosas fueron cambiando. La felicidad y el amor se transformaron en inseguridad, agresividad y celos. Desde que identifiqu¨¦ que era v¨ªctima de violencia de g¨¦nero, he arrastrado un sentimiento de injusticia, rabia, dolor e inseguridad. ?Por qu¨¦ no lo denunciaste? La decisi¨®n de denunciar resulta muy dif¨ªcil. El trauma provoca respuestas emocionales muy da?inas: miedo, culpa o verg¨¹enza. Se necesita tiempo para procesar lo que ha sucedido y buscar el apoyo emocional necesario. Uno de los grandes obst¨¢culos es el miedo a no ser cre¨ªda o afrontar represalias del agresor o su entorno. Cada persona tiene su proceso de recuperaci¨®n, y la decisi¨®n de denunciar puede ser un paso importante. Hay que respetar y apoyar a las v¨ªctimas, independientemente de cu¨¢ndo decidan hablar sobre su experiencia.
Ana ?lvarez Alonso. Bilbao
La reflexi¨®n de S¨¢nchez
Tras cinco d¨ªas de reflexi¨®n, Pedro S¨¢nchez ha decidido seguir y se ha comprometido a liderar un cambio para terminar con el muladar en el que se ha venido convirtiendo la pol¨ªtica. Entendiendo el hartazgo, me gustar¨ªa plantearle alguna pregunta (quiz¨¢ necesite otros cinco d¨ªas para responder), como por ejemplo si se puede terminar con el barro manteniendo a ?scar Puente, si ayuda a despejar el barro re¨ªrse a carcajadas del l¨ªder de la oposici¨®n en el debate de investidura, si es decoroso hablar de fachosfera, si es valiente quedarse callado cuando la m¨¢quina del barro escupe sobre los rivales a su izquierda¡ En fin, si lo de liderar una pol¨ªtica m¨¢s ¨¦tica lo dice en serio o es simplemente una separata de su Manual de resistencia.
David Barbas. Pamplona
Algo va mal
Empatizamos y aceptamos que se usen el miedo y los bulos como un arma electoral, blanqueamos la pol¨ªtica de lodazal, promovemos el enfrentamiento ideol¨®gico en las redes sociales... Y, mientras tanto, los precios siguen marcando m¨¢ximos, el derecho a la vivienda se convierte en un lujo, estamos metidos en la rueda de la autoexplotaci¨®n y la productividad, y la tasa de suicidios es cada vez m¨¢s alarmante. Sin embargo, algunos se movilizan y llenan la calle de Ferraz de Madrid para pedir a Pedro S¨¢nchez que no dimita, para que se sienta querido. Algo va mal en nuestras conciencias.
Alba S¨¢ez L¨®pez. Madrid
Oportunidades perdidas
Al leer las esquelas de amigos y conocidos, nos invade la congoja. Lamentamos no haber compartido m¨¢s momentos, experiencias y conocimientos que habr¨ªan enriquecido nuestras vidas. El tiempo pasado y perdido es irrecuperable. Sin embargo, nos queda aprender a valorar cada instante y cultivar relaciones significativas. Honremos la memoria de los que ya no est¨¢n fortaleciendo los lazos que nos unen con los que a¨²n nos acompa?an.
Fernando Serrano Echeverria. Eibar (Gipuzkoa)