Presidenta Von der Leyen, con la Tierra no se negocia
Los asuntos clim¨¢ticos est¨¢n perdiendo centralidad en la UE y la transici¨®n ecol¨®gica, ambici¨®n
Las orientaciones estrat¨¦gicas presentadas por la reci¨¦n reelegida presidenta de la Comisi¨®n Europea, Ursula von der Leyen, son un equilibrado collage de propuestas que buscan contentar a socialdem¨®cratas, conservadores, liberales y verdes, las cuatro familias en las que se sigue sustentando el equilibrio europeo. A lo largo de las siete directrices se comprueba c¨®mo la defensa y la migraci¨®n van a ser los temas centrales en Europa los pr¨®ximos cinco a?os, permeando al conjunto de pol¨ªticas.
En este contexto hay que entender ...
Las orientaciones estrat¨¦gicas presentadas por la reci¨¦n reelegida presidenta de la Comisi¨®n Europea, Ursula von der Leyen, son un equilibrado collage de propuestas que buscan contentar a socialdem¨®cratas, conservadores, liberales y verdes, las cuatro familias en las que se sigue sustentando el equilibrio europeo. A lo largo de las siete directrices se comprueba c¨®mo la defensa y la migraci¨®n van a ser los temas centrales en Europa los pr¨®ximos cinco a?os, permeando al conjunto de pol¨ªticas.
En este contexto hay que entender la inclusi¨®n del Pacto Verde Europeo entre las directrices estrat¨¦gicas bajo el t¨ªtulo Un nuevo plan para la prosperidad y la competitividad sostenible en Europa. La transici¨®n ecol¨®gica pasa as¨ª a ser reenfocada, por un lado, dentro de las orientaciones econ¨®micas, por otro, como factor de competitividad internacional. En el primer aspecto, con la reindustrializaci¨®n como protagonista mediante un ¡°Pacto Industrial Limpio¡±, centrado en el cambio de modelo energ¨¦tico, con impulso a la econom¨ªa circular y manteniendo la importancia de la transici¨®n justa. Entre los puntos d¨¦biles, las m¨¢s que t¨ªmidas referencias a la biodiversidad, que se sit¨²a dentro del ep¨ªgrafe de seguridad alimentaria en un claro gui?o a los agricultores, o la ausencia de menci¨®n alguna a las pol¨ªticas verdes al hablar de digitalizaci¨®n, inteligencia artificial ¡ªambas con enormes consumos energ¨¦ticos, de agua, y problemas de acceso a materias primas y circularidad¡ª o compra p¨²blica. En su dimensi¨®n exterior, la presidenta lo expresa as¨ª: ¡°El mundo compite en una carrera que dictar¨¢ qui¨¦n ser¨¢ el primero en alcanzar la neutralidad clim¨¢tica y en desarrollar las tecnolog¨ªas que conformar¨¢n la econom¨ªa mundial durante las pr¨®ximas d¨¦cadas.¡±
Habr¨¢ que esperar al nombramiento de comisarias y comisarios y a la agenda que estos desplieguen para comprobar el papel del Pacto Verde en el pr¨®ximo lustro, pero a la luz de estas orientaciones estrat¨¦gicas, y en comparaci¨®n con lo ocurrido los ¨²ltimos a?os, la posici¨®n actual supone una merma de centralidad de los asuntos clim¨¢ticos y de p¨¦rdida de ambici¨®n en la transici¨®n.
Mientras esto ocurre, resulta interesante preguntarse: ?El mantenimiento de la agenda verde en este momento, aunque con ropajes casi exclusivamente econ¨®micos, es solamente producto de la necesidad de Von der Leyen de contar con los votos de verdes e izquierdas? ?Habr¨ªa podido la presidenta de la Comisi¨®n, de no haber necesitado estos votos, desechar la agenda verde? Perm¨ªtanme que lo dude.
Recientemente se ha conocido la mayor encuesta mundial sobre cambio clim¨¢tico, People¡¯s Climate Vote 2024, impulsada por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), la Universidad de Oxford y GeoPoll, que refleja las opiniones de m¨¢s de 73.000 personas de 77 pa¨ªses que representan el 87% de la poblaci¨®n mundial. Seg¨²n esta investigaci¨®n, el 80% de los encuestados en todo el mundo quiere que sus gobiernos tomen mayores medidas para hacer frente a la crisis clim¨¢tica, el 72 % se muestran a favor de una r¨¢pida transici¨®n para eliminar el uso de los combustibles f¨®siles ¡ªincluidos los pa¨ªses productores de petr¨®leo¡ª, el 78% pide m¨¢s protecci¨®n frente a los fen¨®menos meteorol¨®gicos extremos, el 80%, que la educaci¨®n en las escuelas preste m¨¢s atenci¨®n a este problema, y 4 de cada 5 encuestados piensan que su pa¨ªs debe hacer m¨¢s por restaurar la naturaleza. Ser¨ªa dif¨ªcil que la Europa que ha liderado la transici¨®n verde en los foros internacionales diera ahora, cuando la poblaci¨®n se muestra m¨¢s preocupada y favorable al cambio, un frenazo o giro brusco.
Para buena parte del sector empresarial tampoco ser¨ªa sencillo entender ni un retroceso ni un par¨®n en la transici¨®n ecol¨®gica. Muchos de ellos han acometido ya inversiones que necesitan culminarse para empezar a generar beneficios. CONAMA (Congreso Nacional de Medio Ambiente) acaba de presentar su Bar¨®metro 2024 elaborado con 500 encuestas y 200 entrevistas a profesionales de empresas relacionadas con la transici¨®n ecol¨®gica o aquellas otras que, siendo empresas tradicionales, est¨¢n en plena transformaci¨®n verde. Todos coinciden en que la transici¨®n est¨¢ en marcha, de forma m¨¢s lenta y menos ambiciosa de lo necesario, pero avanzando. Como todo lo que se hace por vez primera, y m¨¢s con la complejidad de este caso, su puesta en marcha va desvelando dificultades y contradicciones que se convierten en nudos que es preciso desatar para garantizar el ¨¦xito. Lo que nadie plantea es detener esta transici¨®n; m¨¢s bien al contrario, la identificaci¨®n de esos nudos se hace con el objetivo de ayudar a desatarlos.
Para los profesionales y expertos una de esas dificultades es la que supone situar la transici¨®n ecol¨®gica en un marco de sacrificio y p¨¦rdida de calidad de vida. Entender y trasladar la transici¨®n ecol¨®gica como oportunidad para generar econom¨ªa, vivir mejor y repensar aspectos del sistema que no funcionan es una de las claves que identifican estos profesionales, lo que coincide tambi¨¦n con lo se?alado en el II estudio de percepci¨®n social sobre la transici¨®n ecol¨®gica en Espa?a del Observatorio de la Transici¨®n Justa. All¨ª se constata que el porcentaje de quienes viven este proceso como una amenaza en el corto plazo ha crecido cuatro puntos en el ¨²ltimo a?o, especialmente en municipios de tama?o peque?o y medio y en las comunidades del centro peninsular. Para que la transici¨®n se entienda como la oportunidad que es, necesita ser justa y poner en valor todos los co-beneficios asociados a cada acci¨®n. As¨ª, por ejemplo, es necesario explicar que la viabilidad de buena parte del sector primario depender¨¢ de que sea capaz de adaptarse a las nuevas condiciones de disponibilidad de agua, temperaturas, etc. No hacerlo es la mejor manera de dejar morir el campo. La transici¨®n ecol¨®gica es, por tanto, para agricultores, ganaderos y pescadores, la ¨²nica opci¨®n para librarles del desastre.
Los profesionales que han trabajado con CONAMA subrayan, por otro lado, que las pol¨ªticas p¨²blicas y la inversi¨®n privada necesitan ir de la mano. Si, pongamos por caso, la industria del autom¨®vil debe invertir para desarrollar tecnolog¨ªas que cambien el modelo de movilidad no solo con coches el¨¦ctricos sino con otras soluciones como plataformas para compartir viajes o veh¨ªculos, entre otras, esto debe verse favorecido por pol¨ªticas p¨²blicas que permitan dar el salto de escala que se necesita. Favorecer la movilidad activa a pie, en bicicleta o patinete, desarrollar redes intermodales de transporte p¨²blico para llegar a la mayor parte posible del territorio, facilitar el despliegue de cargadores o ensayar f¨®rmulas como el leasing social en coches el¨¦ctricos para aquellos que deban recurrir a un veh¨ªculo privado, son ejemplos en los que lo p¨²blico y lo privado deben ir de la mano, incorporando tambi¨¦n al tejido social.
En definitiva, con el nivel de conocimiento existente, el grado de preocupaci¨®n social, las inversiones ¡ªmanifiestamente insuficientes, pero muy relevantes¡ª ya realizadas y la urgencia de la adaptaci¨®n, la reelegida presidenta de la Comisi¨®n europea no pod¨ªa no incluir en sus orientaciones pol¨ªticas el Pacto Verde, aunque haya optado por vestirlo ¨²nicamente de competitividad econ¨®mica para no asustar a nadie.
Ahora bien, tanto el enfoque elegido, como todo lo que ha quedado fuera o en segundo plano, indican que el incremento de la ambici¨®n y la velocidad del cambio, imprescindibles para alcanzar los objetivos clim¨¢ticos, ni han de darse por hechos ni van a ser f¨¢ciles. Algo especialmente preocupante en un momento en el que d¨ªa a d¨ªa se comprueba c¨®mo la crisis clim¨¢tica se est¨¢ acelerando, y donde mantener el ritmo actual significa retroceder. Presidenta Von der Leyen, ha sido usted una magn¨ªfica negociadora para conseguir los apoyos que necesitaba para su reelecci¨®n, pero no olvide una cosa: con la Tierra no se negocia.