La incapacidad del ¡®Camale¨®n¡¯ Arg¨¹eso

Cuando este verano Vox dio por rotos los acuerdos con el Partido Popular, el president de la Generalitat valenciana ces¨® a los pol¨ªticos del partido de extrema derecha antes de que abandonasen su Gobierno. Para ocupar el vac¨ªo,...

Cuando este verano Vox dio por rotos los acuerdos con el Partido Popular, el president de la Generalitat valenciana ces¨® a los pol¨ªticos del partido de extrema derecha antes de que abandonasen su Gobierno. Para ocupar el vac¨ªo, tir¨® de un hombre de su confianza. Emilio Arg¨¹eso, que llevaba un a?o en el Ejecutivo como secretario del sistema sociosanitario, pas¨® a ser secretario de seguridad y emergencias de la Conselleria de Just¨ªcia. El pasado lunes 21 de octubre lo entrevistaron en el programa Les not¨ªcies del mat¨ª de la cadena p¨²blica ? Punt. En esa conversaci¨®n destac¨® la val¨ªa t¨¦cnica de los responsables pol¨ªticos que integran la direcci¨®n de la Consejer¨ªa a la que ahora pertenece. En su caso, en lo relativo a la seguridad y las emergencias, porque su profesi¨®n es la de comisario de polic¨ªa. Pero esa experiencia no le ha servido de nada cuando le ha tocado gestionar una situaci¨®n cr¨ªtica que era de su competencia.

Lo que sabemos de su actividad durante el desbordamiento y la inundaci¨®n es que el martes 29, seg¨²n la agenda abierta, mantuvo una ¨²nica reuni¨®n con un subordinado, el jefe del Servicio de Espect¨¢culos P¨²blicos, Actividades Recreativas y Festejos Taurinos. Aunque esa ma?ana se dispon¨ªa de buena informaci¨®n para intervenir desde la administraci¨®n ante la emergencia, no consta que su secretar¨ªa adoptase medida alguna hasta el mensaje que se lanz¨® a las ocho de la tarde. Lo que s¨ª ha transmitido ¨¦l mismo con posterioridad, a trav¨¦s de las redes sociales, es que el mi¨¦rcoles d¨ªa 30, cuando la tragedia ya se hab¨ªa producido, estaba trabajando a las once de la ma?ana. La acci¨®n judicial que ha decidido impulsar un sector de la sociedad civil valenciana tiene, entre otros prop¨®sitos, obtener la documentaci¨®n que estaba a la disposici¨®n de las administraciones durante esas horas y determinar qu¨¦ se hizo. Ese material permitir¨¢ reforzar la posici¨®n de las v¨ªctimas ante las compa?¨ªas aseguradoras.

No sorprende que el apodo de Arg¨¹eso fuese Camale¨®n, como cont¨® Sergio Sampedro en La Vanguardia. Aunque tuvo una breve militancia en las juventudes socialistas y despu¨¦s fue secretario general de Nuevas Generaciones del PP en Elche, el grueso de su actividad pol¨ªtica la desarroll¨® en Ciudadanos. Fue secretario de organizaci¨®n de ese partido en la Comunidad Valenciana, premiando m¨¢s la lealtad que el m¨¦rito a la hora de construir la estructura regional. En 2015, ya diputado, era secretario primero de la Mesa en Les Corts. Luego senador por designaci¨®n auton¨®mica hasta que pas¨® al grupo mixto cuando la formaci¨®n naranja colaps¨®. En marzo de 2021, tras el gatillazo de la moci¨®n de censura en Murcia, la direcci¨®n de su partido le acus¨® de ofrecer ¡°prebendas a cargos y afiliados del partido con tal de que abandonaran la formaci¨®n y pasaran a ser tr¨¢nsfugas¡±. Fue expulsado. Pero no dej¨® el acta de la C¨¢mara Alta y, al cabo de dos a?os, ya estaba en la ¨®rbita del PP, pr¨®ximo a Carlos Maz¨®n, asistiendo a comidas del partido o a sus m¨ªtines en Alicante o maniobrando para evitar que los diputados no adscritos en Les Corts (los suyos, los ex de Ciudadanos) se sumasen a la iniciativa gubernamental que pretend¨ªa rebajar el list¨®n electoral del 5% al 3% en la Comunitat Valenciana (lo cont¨® Rosana Crespo en Valencia Plaza).

Parece indiscutible que Arg¨¹eso tiene experiencia en la din¨¢mica interna de los partidos. Pero a pesar de sus titulaciones acad¨¦micas ¨Dlicenciado en Criminolog¨ªa, Periodismo, Publicidad y Relaciones P¨²blicas y m¨¢ster Universitario en Ciencias Forenses por la Universidad de Murcia¨D, nada le avalaba para ejercer cargos de alta responsabilidad en la administraci¨®n auton¨®mica. Los partidos tienen sus intereses, claro, pero sin t¨¦cnicos capacitados en lugares claves, los partidos deslegitiman al Estado.