?Trabajamos demasiado?
Nuestros lectores escriben sobre conciliaci¨®n laboral, la muerte de Manuel Elkin Patarroyo, el coche el¨¦ctrico y la situaci¨®n de Renfe
Estos d¨ªas he tenido que combinar el teletrabajo con el cuidado de los hijos. La ma?ana ha sido dura, intentaba mandar mails teniendo una diablilla que me hac¨ªa equivocar, despedirme de mi socio con un ¡°que pase una excelente semana¡± y de un cliente con ¡°menudo co?azo de reuni¨®n¡±. Mi primer pensamiento: ?cu¨¢ndo vuelven las clases? Entonces he visto a mi hija pint¨¢ndose una ceja de cada color y me he empezado a re¨ªr, y hemos estado jugando sin parar. M¨¢s calmados me pregunto, ?no deber¨ªa ser siempre as¨ª? ?no deber¨ªa ser una prioridad que los padres puedan pasar tiempo de calidad con sus hijos? Si tenemos la obligaci¨®n econ¨®mica de trabajar ocho horas al d¨ªa, y la obligaci¨®n saludable de descansar otras ocho, hacer ejercicio, comprar, cocinar y comer comida sana y tambi¨¦n relacionarnos socialmente con adultos, el tiempo de calidad pasa de ser una hora, como hoy, en m¨¢ximas condiciones f¨ªsicas a escasos minutos despu¨¦s de cenar tras un d¨ªa agotador. Entonces, ?que empiece ya el colegio? O no ser¨ªa mejor cuestionarse¡ ?no estaremos trabajando demasiado?
Ignacio Casasnovas Cavestany. Barcelona
La partida de un ilustre cient¨ªfico
Esta semana, la comunidad cient¨ªfica llor¨® la muerte de Manuel Elkin Patarroyo, el pionero colombiano que descubri¨® la vacuna contra la malaria. Su partida deja un vac¨ªo en el ¨¢mbito acad¨¦mico y en el coraz¨®n de muchos estudiantes que se inspiran en su legado. A menudo, acumulamos experiencias y logros, pero es vital considerar lo que dejamos atr¨¢s y c¨®mo hemos vivido. Reflexionemos sobre el legado que queremos dejar y vivamos de tal manera que inspiremos a otros, para que, al llegar la hora, podamos partir en paz.
Olga Ruth Alarc¨®n Baquero. Humanes (Madrid)
Nuestra parte
Hace dos a?os que nos compramos un coche el¨¦ctrico y hemos recorrido con ¨¦l 22.000 kil¨®metros. Adem¨¢s del confort que nos ofrece y del ahorro econ¨®mico en los desplazamientos, estamos orgullosos de los aproximadamente 3.000 kilogramos de di¨®xido de carbono que hemos dejado de emitir a la atm¨®sfera. Ya s¨¦ que es una cantidad despreciable comparada con la magnitud del problema al que nos enfrentamos, pero nuestra ¨²nica salvaci¨®n pasa por la suma de actuaciones individuales de este tipo.
Javier Berasaluce Bajo. Vitoria (?lava)
?Y el cercan¨ªas?
10 de enero de 2025. Vuelta a las aulas de un instituto de secundaria de Alcal¨¢ de Henares desde Madrid capital. Anuncian por megafon¨ªa que el tren lleva acumulada una demora de 15 minutos. Lleva m¨¢s. A las 7.55 llega al and¨¦n un tren con los cristales empa?ados, cuyas puertas se abren con dificultad por la masa de gente api?ada que viaja en ¨¦l. Los siguientes 30 minutos de viaje terminan con una intensa carrera por llegar sudando y tarde a disculparme con mis compa?eros de trabajo y alumnos. Como esta ser¨¢n la mayor¨ªa de ma?anas del pr¨®ximo a?o para los miles de personas que usamos el servicio de Renfe Cercan¨ªas. Es una aut¨¦ntica verg¨¹enza. Hagan funcionar m¨¢s trenes, solucionen los problemas.
Blanca Recasens Fern¨¢ndez. Madrid.