18 fotosGentrificaci¨®nLa precariedad de Santa Teresa la viven los localesLa gentrificaci¨®n y el turismo de lujo en Costa Rica ha abocado a los ticos y a los trabajadores migrantes a vivir en habitaciones y casas compartidas por hasta cuatro familiasMauricio MoralesSanta Teresa (Costa Rica) - 08 ene 2023 - 05:35CETWhatsappFacebookTwitterBlueskyLinkedinCopiar enlaceSanta Teresa es una peque?a zona de playa en el noreste de Costa Rica. Desde principios de 2000, ha sido un punto estrat¨¦gico para los surfistas debido a sus olas ¨²nicas durante todo el a?o y en los ¨²ltimos cinco ha visto una explosi¨®n del turismo de lujo.Mauricio MoralesAlgunos turistas y residentes se re¨²nen en un bar frente a la playa para ver la puesta de sol, uno de los principales atractivos de la peque?a localidad playera de Santa Teresa, en la costa pac¨ªfica norte de Costa Rica. Una cerveza de producci¨®n local en uno de estos bares puede costar entre cinco y ocho euros.Mauricio MoralesLos minimercados y supermercados ofrecen una gran variedad de productos, locales e importados. Los precios en comparaci¨®n con la zona central de Costa Rica han aumentado y por ejemplo un kilo de pechuga de pollo puede costar entre seis y nueve euros.Mauricio MoralesLos restaurantes en Santa Teresa tienen una oferta de comida 'gourmet' e internacional con precios que oscilan entre los nueve y los 28 euros en temporada baja.Mauricio MoralesUno de los caf¨¦s y restaurantes de la carretera principal de Santa Teresa, que a menudo con propiedad de miembros de la comunidad israel¨ª.Mauricio MoralesSoda, un popular restaurante costarricense, es uno de los pocos negocios regentados por costarricenses y ofrece casado, un plato popular que consta de arroz, frijoles, ensalada y prote¨ªna animal (pescado, ternera, pollo o cerdo) y ronda los seis euros. Es un lugar habitual para algunos de los trabajadores extranjeros y locales de Santa Teresa.Mauricio MoralesNatalie Harker es colombiana. Trabaja en el sector de los servicios tur¨ªsticos y ha visto un aumento importante de los alquileres en Santa Teresa. Paga 800 euros por una casa de un dormitorio tanto en la temporada alta como en la baja. En otros lugares, los propietarios de las casas duplican o triplican el coste del alquiler, lo que obliga a los inquilinos a buscar opciones a las afueras del pueblo.Mauricio MoralesNicaragua es uno de los mayores exportadores de migrantes a Santa Teresa. Son la mano de obra que construye las villas de lujo y proyectos inmobiliarios tur¨ªsticos. Un trabajador migrante puede ganar entre 18 y 23 euros al d¨ªa por 10 horas de trabajo y pagar 121 por una habitaci¨®n compartida de 10 metros cuadrados y sin ba?o a las afueras de Santa Teresa. Estos alojamientos, como el que aparece en la imagen, son popularmente conocidos como cuarter¨ªas.Mauricio MoralesEn esta cuarter¨ªa comparten casa cuatro familias nicarag¨¹enses. Los espacios solo est¨¢n divididos por cortinas.Mauricio MoralesUn trabajador migrante nicarag¨¹ense, en una obra en construcci¨®n cerca de la playa de Santa Teresa. Con el auge del turismo, los proyectos inmobiliarios se han expandido por las zonas cercanas.Mauricio MoralesVarios trabajadores nicarag¨¹enses se desplazan en la parte trasera de camiones de construcci¨®n hasta las obras en las que trabajan.Mauricio MoralesMujeres y hombres, en su mayor¨ªa migrantes nicarag¨¹enses, hacen cola para coger los pocos autobuses que pasan desde Las Brisas, un barrio de migrantes, que les llevar¨¢n a sus trabajos en la construcci¨®n y los servicios de limpieza.Mauricio MoralesUna de las principales paradas de autob¨²s del barrio de Las Brisas es tambi¨¦n el ¨²nico punto de recogida de basuras de toda la zona.Mauricio MoralesAlgunos residentes y turistas utilizan a menudo quads, motocicletas y todoterrenos 4x4 para desplazarse por Santa Teresa y sus alrededores. La contaminaci¨®n sonora y visual se suma a de residuos humanos. Santa Teresa carece de un sistema de alcantarillado y, con frecuencia, las casas, hoteles y empresas utilizan fosas s¨¦pticas o arrojan la basura a la tierra, que acaba en el oc¨¦ano.Mauricio MoralesValerya Sztein es una migrante argentina que ha conseguido abrir una tienda de lencer¨ªa. Esta comunidad es otra de las principales en Santa Teresa y suelen trabajar en puestos de nivel medio o directivo en el sector tur¨ªstico o son propietarios de negocios.Mauricio MoralesEfra¨ªn D¨ªaz es un nicarag¨¹ense que trabaja en la construcci¨®n en Santa Teresa y vive en Costa Rica desde hace m¨¢s de 20 a?os. Sus condiciones de vida siguen siendo casi las mismas que cuando lleg¨®. Vive en una peque?a choza de metal con su pareja y paga unos 122 euros de alquiler. Gana al mes, como otros trabajadores de la construcci¨®n, entre 660 y 942, y trabaja 60 horas a la semana en seis d¨ªas.Mauricio MoralesUna villa de lujo con vistas al mar da directamente al campo de f¨²tbol, uno de los pocos lugares p¨²blicos para el encuentro deportivo y de ocio de la comunidad de trabajadores migrantes en Santa TeresaMauricio MoralesEl f¨²tbol es uno de los principales deportes que tienen en com¨²n costarricenses y nicarag¨¹enses. Efra¨ªn D¨ªaz utiliza balones de f¨²tbol desgastados para su club ¡°Coyotes¡±, donde entrena a ni?os de distintas categor¨ªas, la mayor¨ªa hijas e hijos de trabajadores migrantes nicarag¨¹enses, como ¨¦l. Todo su trabajo es voluntario y depende de donaciones.Mauricio Morales