A la vista de esta imagen, podr¨ªamos imaginar Banglad¨¦s como un pa¨ªs pintoresco y lleno de colorido. Pero la realidad es que gran parte de su poblaci¨®n vive sumida en la pobreza, y que muchos banglades¨ªes sufren como los que m¨¢s los efectos perversos del cambio clim¨¢tico ¡ªciclones, inundaciones y dem¨¢s desastres naturales¡ª sin haber sido ellos los causantes.Cedida por Corr the Jute ?Esta joven acaba de comprarse este minibolso de tendencia y aprovecha para hacerse una selfie y anunciarlo a trav¨¦s de Instagram al mundo virtual? Nada m¨¢s lejos de la realidad. Shabana Bagum es una de las 500 trabajadoras artesanas de Corr the Jute Works. Se trata de una organizaci¨®n banglades¨ª de comercio justo que trabaja desde 1973 para devolver la dignidad a las personas m¨¢s vulnerables y marginadas, con un especial foco en las mujeres. Por su cara se dir¨ªa que podr¨ªa ser, s¨ª, una joven influencer, si no le hubiera tocado nacer en Banglad¨¦s.Cedida por Corr the Jute Aqu¨ª no hay confusi¨®n posible. No son occidentales, y no lo revela solo su tez y sus saris multicolores. ?Qui¨¦n cose todav¨ªa hoy a este lado del planeta? ?Y en grupo? ?Y se toma la molestia de ir a tomar clases? Nosotros no tenemos ya ni tiempo ni ganas. Estas mujeres no solo ganan en conocimiento, sino tambi¨¦n en autonom¨ªa y empoderamiento. Adem¨¢s de t¨¦cnicas de costura, se les ofrece formaci¨®n en desarrollo de productos, gesti¨®n, liderazgo, contabilidad, prevenci¨®n de la violencia dom¨¦stica, trabajo infantil y derechos humanos.Cedida por Corr the Jute
Cesta de yute. Es uno de los productos estrella de la organizaci¨®n. Tras el algod¨®n, el yute es la segunda fibra vegetal m¨¢s producida en el mundo. El 80% procede de India y Banglad¨¦s, donde crece con facilidad gracias a su clima h¨²medo y c¨¢lido. Es una planta especialmente beneficiosa para el medio ambiente: su producci¨®n genera muy poca huella de carbono, adem¨¢s es biodegradable y reciclable, y no necesita apenas fertilizantes o pesticidas. La cesta es un trabajo totalmente realizado a mano y, por lo tanto, de gran valor y calidad. Los pa¨ªses del norte global tienen la riqueza econ¨®mica, pero han perdido la sabidur¨ªa artesanal de esas manos y esos pies y no sabemos valorarla en su justo precio, que deber¨ªa ser siempre un precio justo.Cedida por Corr the Jute La escueta biograf¨ªa de Harisa Begun encoge el coraz¨®n: ¡°Se cas¨® con 12 a?os¡±. Creo que ser¨ªa m¨¢s exacto decir que ¡°la casaron¡± con 12 a?os. ¡°Su marido era un jornalero sin tierra, cuyos ingresos no eran suficientes para mantener a la familia¡±. As¨ª, Begun empez¨® a trabajar el yute con su suegra para sostener a la familia y al cabo de un tiempo integr¨® Corr the Jute Works. Hoy es coordinadora de la organizaci¨®n, donde se encarga de distribuir el trabajo y formar a sus compa?eras.Cedida por Corr the Jute
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