El poder se acerca a Rajoy

Hasta la baronesa Tita Cervera quiso acercarse a la presentaci¨®n del libro de Mariano Rajoy, En Confianza (Planeta), que se convirti¨® en una exhibici¨®n del poder que ya se vislumbra en el PP. Casi todos los pol¨ªticos que quieren ser algo en el PP del futuro estaban all¨ª. Tambi¨¦n acudieron varios presidentes auton¨®micos, entre ellos Esperanza Aguirre, Alberto Fabra, Ram¨®n Luis Valc¨¢rcel y Jos¨¦ Antonio Monago. Por supuesto, en primera fila, casi toda la c¨²pula del PP. Incluso hab¨ªa dirigentes con mucha historia que ya han dejado la primera fila, como ?ngel Acebes. Y, adem¨¢s, empresarios vinculados a la obra p¨²blica¡ªJuan Miguel Villar Mir (OHL), Luis del Rivero (Sacyr), ?nigo Meir¨¢s (Ferrovial)-, o el productor Enrique Cerezo, en un claro acercamiento al que se presume como nuevo presidente. Presidiendo toda la platea, en el lugar privilegiado, Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, el ¨²nico al que cit¨® Rajoy, con el que parece haberse reconciliado despu¨¦s de a?os de mucha distancia pol¨ªtica.

Su equipo prepar¨® un acto particular que funcion¨®, al menos para el p¨²blico asistente. Lejos de una presentaci¨®n al uso, tres mujeres ajenas a la pol¨ªtica, como le gusta al l¨ªder, presentaron el libro y mostraron su entusiasmo por el personaje en un lenguaje poco habitual en los actos del PP. Eran una trabajadora social de un comedor al que ¨¦l acude en Navidades, una peque?a empresaria y una mujer de Martos (Ja¨¦n) a la que conoci¨® en el programa Tengo una pregunta para usted. Todo pensado, como el libro, para hacer de Rajoy un hombre normal, nada "pol¨ªtico". Las tres insistieron en que no saben nada de pol¨ªtica pero les cae bien Rajoy y conf¨ªan en ¨¦l por motivos distintos.

El discurso del presidente del PP, en l¨ªnea con el libro, no apunt¨® siquiera pautas de por d¨®nde ir¨¢ su proyecto pol¨ªtico, aunque s¨ª dej¨® perlas que lograron varias carcajadas. Primero justific¨® por qu¨¦ no hay ninguna autocr¨ªtica: ¡°Este es un libro a favor de Rajoy, porque es bueno hacer justicia de vez en cuando, y adem¨¢s para lo otro ya hay voluntarios por doquier¡±. Despu¨¦s aprovech¨® su etapa de colegial para lanzar una pulla ir¨®nica al presidente: ¡°Estudi¨¦ en el mismo colegio de Le¨®n que Zapatero, aun con resultados distintos¡±. Se ri¨® de su propio clich¨¦: ¡°Escribir un libro no es tarea f¨¢cil, lleva mucho tiempo, hay que tomar muchas decisiones, hay que decidir qu¨¦ se cuenta, c¨®mo se trata a las personas, y hacer un esfuerzo no menor para acordarse de muchas cosas¡±.

Por ¨²ltimo, Rajoy termin¨® con una llamada a la concordia: ¡°No es un libro de chismes. No hablo mal de nadie, ni siquiera de m¨ª mismo. Ni de compa?eros de partido, adversarios, periodistas o banqueros, aunque ganas no me han faltado. Si yo apuesto por la concordia, parece l¨®gico que act¨²e en consecuencia¡±. Rajoy record¨® que trata a Zapatero en el libro ¡°con educaci¨®n¡± y que a Rubalcaba solo le cita una vez ¨Cpara criticar su actitud tras el 11-M, cuando dijo que los espa?oles necesitan un gobierno que no les mienta-.

Pero por encima de cualquier otra cosa, el libro, que evita mojarse en nada y pisar ning¨²n callo, quiere ser una especie de lecci¨®n moral, en el que Rajoy usa su experiencia vital para explicar qu¨¦ ha aprendido y tratar de dibujarse como un personaje moderado y negociador. Y con eso, con lo que la vida le ha ense?ado, cerr¨® la presentaci¨®n, que fue el gran acto social del nuevo PP que ya acaricia el poder, despu¨¦s de casi ocho a?os de ostracismo. ¡°Si lo hubi¨¦ramos hecho hace unos a?os, nos val¨ªa con una sala peque?a, y mira ahora¡±, ironizaba un marianista ante el aforo completo.

Rajoy explic¨® as¨ª las lecciones que le dej¨® la vida: ¡°Aprend¨ª que Espa?a no es Madrid ni Barcelona, ni siquiera mi pueblo. Que no se puede argumentar a quien te pone por delante los sentimientos pero s¨ª decirle que otros podemos tener otros sentimientos. Que en todas partes hay de todo. Que la uni¨®n hace la fuerza. Que es bueno sumar salvo que el hacerlo reste. Que la independencia es un buen valor. Que un pol¨ªtico no se debe dejar enredar en la an¨¦cdota, en el chisme. Que es fundamental para llegar a acuerdos tener la voluntad de hacerlo. Que cualquier gobernante debe ser justo, y esto es quiz¨¢ lo m¨¢s importante¡±. Y despu¨¦s lanz¨® un mensaje optimista y patri¨®tico: ¡°Creo en Espa?a, en la Constituci¨®n, en el proyecto europeo. Creo que hay que trabajar por el bienestar de todos, creo que hay que hacer pol¨ªticas sociales. Hago un apuesta por la concordia y afirmo que en Espa?a si se hacen las cosas bien hay un lugar para el optimismo, porque Espa?a tiene espa?oles y eso es una cosa muy seria¡±.