Gallard¨®n cumple su sue?o de ir al Congreso tres a?os y medio despu¨¦s
En 2008 Aguirre amenaz¨® a Rajoy con dimitir si el alcalde iba en las listas
Esta vez s¨ª. El alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallard¨®n, vuelve a la pol¨ªtica nacional 17 a?os despu¨¦s de abandonar el Senado y entrar¨¢ en el Congreso por primera vez en su carrera pol¨ªtica. El alcalde cumple as¨ª un sue?o que ya acarici¨® hace cuatro a?os pero que trunc¨® su compa?era de partido, la presidenta de la Comunidad, Esperanza Aguirre.
El nuevo intento de Ruiz-Gallard¨®n por ir en los primeros puestos en las listas del PP por Madrid al Congreso de los diputados no se ha encontrado, esta vez, con la oposici¨®n frontal de Aguirre a diferencia del a?o 2008.
La carrera de Gallard¨®n por dar el salto a la pol¨ªtica nacional comenz¨® en 2007, despu¨¦s de ganar las municipales del 27 de mayo. Desde ese momento, record¨® la compatibilidad de ser alcalde y diputado y expres¨® en varias ocasiones su deseo de acompa?ar a Rajoy en el Parlamento. El anuncio fue criticado por Eduardo Zaplana y ?ngel Acebes mientras que Mariano Rajoy mantuvo la incertidumbre apelando a la prudencia. ¡°Podr¨ªa ser un buen n¨²mero dos pero hay muchos otros. Todo a su debido tiempo. En la vida un poquito de prudencia¡±.
Mientras el alcalde lanzaba directas, Aguirre tampoco ced¨ªa cuotas de poder y repiti¨® candidatura a la presidencia regional del partido. Unos meses m¨¢s tarde, la presidenta dio un paso decisivo por evitar el ascenso en el escalaf¨®n de Gallard¨®n y amenaz¨® al l¨ªder del PP con dimitir si lo inclu¨ªa en las listas al Congreso.
La amenaza obligaba al candidato popular a la presidencia del Gobierno a decantarse por uno de los dos o a dejar a ambos sin premio, aunque esto ¨²ltimo significara la mayor derrota en la carrera de Gallard¨®n.
En aquella ocasi¨®n, la puesta en escena fue casi m¨¢s humillante que la propia decisi¨®n porque Rajoy comunic¨® la noticia al regidor madrile?o en presencia de quien hab¨ªa movido los hilos para frustrar su deseo. Fue durante una reuni¨®n de 45 minutos que alcanz¨® niveles de gran tensi¨®n y que cont¨® adem¨¢s con la presencia de uno de los m¨¢s fervientes integrantes del n¨²cleo duro, el entonces secretario general del PP, ?ngel Acebes.
Seg¨²n la reconstrucci¨®n de la escena, Gallard¨®n lleg¨® confiado al encuentro en G¨¦nova, hasta el punto de que pidi¨® a su esposa que estuviera tranquila y le asegur¨® que se encontrar¨ªa con ella en el intermedio de la ¨®pera Trist¨¢n e Isolda de Wagner. La reuni¨®n, sin embargo, empez¨® fuerte. ¡°Aqu¨ª hay un ofrecimiento p¨²blico para ir en las listas al Congreso por Madrid ¨Cel de Gallard¨®n- y otro privado ¨Cel de Aguirre¡±, dijo Rajoy.
La noticia descoloc¨® al alcalde que se enter¨® en ese momento del ¨®rdago lanzado por la presidenta de la Comunidad. El cargo de diputado es compatible con la alcald¨ªa pero la llegada de Aguirre al Congreso implicar¨ªa necesariamente su renuncia a la presidencia regional y un riesgo innecesario de perder las elecciones auton¨®micas.
¡°Es una encerrona¡±, respondi¨® Gallard¨®n que a?adi¨®, ¡°no me pod¨¦is hacer esto¡±. Por el contrario Esperanza Aguirre repas¨® sus resultados: ¡°He sacado los mejores de toda la historia del PP de Madrid en las ¨²ltimas elecciones¡±. Un d¨ªa m¨¢s tarde el alcalde pronunci¨® ante la prensa: ¡°He hecho siempre lo que el partido me ha solicitado y yo hab¨ªa solicitado al partido figurar en las listas al Congreso de los Diputados que es una ilusi¨®n que arrastraba desde hac¨ªa muchos a?os¡±. Continu¨®: ¡°No ha podido ser. En pol¨ªtica a veces se gana y a veces se pierde y quien les habla, evidentemente, ha sido derrotado en esa aspiraci¨®n¡±.
Alberto Ruiz-Gallard¨®n demostr¨® su enfado ante la direcci¨®n nacional del partido con una pataleta y afirm¨® que tras las elecciones de marzo dejar¨ªa la pol¨ªtica. Sin embargo, el 14 de marzo, despu¨¦s de la segunda derrota de Rajoy en las elecciones, cambi¨® de parecer y acab¨® present¨¢ndose de nuevo a la alcald¨ªa de Madrid, En las elecciones municipales del pasado 22 de mayo volvi¨® a ganar con mayor¨ªa absoluta aunque perdi¨® 120.000 votos y tres concejales.
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