Rajoy busca una salida dialogada para evitar el enfrentamiento con Mas

Mariano Rajoy quiere evitar en lo posible la confrontaci¨®n con Artur Mas y, por extensi¨®n, con Catalu?a. La preocupaci¨®n es evidente en La Moncloa, pero la idea del presidente del Gobierno es buscar salidas pol¨ªticas que aborten el ¨®rdago de la Generalitat. Ayer mismo, Rajoy hizo en Galicia un discurso de mano tendida a Mas, sintetizado en la idea que se intenta transmitir desde el entorno del presidente para definir su actuaci¨®n en los pr¨®ximos d¨ªas: ¡°Que por m¨ª no quede¡±.

Hay movimientos pol¨ªticos del Gobierno en la superficie y otros subterr¨¢neos, encaminados todos a que Mas se sienta acorralado y no tenga m¨¢s remedio que optar por la salida de la negociaci¨®n de un sistema de financiaci¨®n que permita a Catalu?a sobrevivir a la asfixia financiera que, seg¨²n el Ejecutivo, est¨¢ en el origen de su actuaci¨®n. Entre los primeros est¨¢ la Conferencia de Presidentes prevista para el 2 de octubre en el Senado. Entre los movimientos m¨¢s discretos est¨¢n las intensas gestiones con empresarios y l¨ªderes sociales catalanes, para hacerles ver el callej¨®n sin salida al que conduce la propuesta de Mas y las consecuencias negativas que esta tiene para todos.

Primero para que vean que unas elecciones con forma de plebiscito ser¨ªan muy negativas, y segundo para que sean conscientes de que, en todo caso, debe pensar en el d¨ªa despu¨¦s de los comicios, que puede ser imposible de gestionar. Por eso, el Gobierno cita estos d¨ªas las palabras del expresidente de la Generalitat Jordi Pujol, asegurando que es imposible la independencia, as¨ª como la mesura del l¨ªder del PNV, I?igo Urkullu, al no seguir la senda de CiU aunque hable de reformar el Estatuto de Gernika.

El Gobierno pretende aprovechar el miedo de los empresarios catalanes

Para la Conferencia de Presidentes, Rajoy pretende situar a Mas no solo ante el Gobierno central, sino tambi¨¦n ante el resto de comunidades, las del PP y las del PSOE. Quiere que escuche a todos sus hom¨®logos rechazar un modelo de financiaci¨®n distinto para Catalu?a y que, por el contrario, s¨ª se pueda estudiar un nuevo sistema global, tal y como exige el resto de comunidades. La imagen de esa cumbre, seg¨²n la pretensi¨®n del Gobierno, no ser¨¢ en todo caso la de Mas contra Rajoy, sino la de Mas contra el resto de l¨ªderes auton¨®micos, sin excepci¨®n.

De hecho, el presidente est¨¢ estos d¨ªas parapetado tras el apoyo del socialista Alfredo P¨¦rez Rubalcaba. Ambos han hablado antes y despu¨¦s de la reuni¨®n con Mas y est¨¢n de acuerdo en rechazar el pacto fiscal, en frenar al presidente catal¨¢n y en buscar f¨®rmulas para salir del embrollo. Mantienen discrepancias sobre hasta d¨®nde se puede llegar para desencallar el asunto, y el propio l¨ªder socialista quiere que Rajoy le deje margen de discrepancia para poder embridar al PSC. Al PSOE le aprieta el sector catalanista del PSC y la direcci¨®n de ese partido que desea marcar su propia estrategia sin que se les perciba que van de la mano del PP. En todo caso, Rajoy da por hecho el apoyo de Rubalcaba en las gestiones subterr¨¢neas para frenar a Mas.

El jefe del Gobierno, que durante los ¨²ltimos a?os busc¨® cultivar las relaciones con medios empresariales y de comunicaci¨®n de Catalu?a, intenta estos d¨ªas aunar voluntades a su favor, con la idea de que el proyecto de Mas no lleva a ninguna parte o, en el peor de los casos, al caos.

Si Rubalcaba tiene la presi¨®n del PSC, Rajoy tiene la de un sector de su partido mucho m¨¢s radical y con influencia medi¨¢tica. En los d¨ªas previos tuvo presiones de los suyos para no recibir a Mas si no retiraba el chantaje, a la vez que la l¨ªder del PP catal¨¢n, Alicia S¨¢nchez Camacho, le ha pedido sin ¨¦xito que ponga distancia con CiU en Barcelona y en Madrid. Pero Rajoy no ha abandonado ni abandonar¨¢ el tono conciliador. La consigna en el PP es evitar en p¨²blico el enfrentamiento y, desde luego, no mencionar posibilidades extremas como el uso del art¨ªculo de la Constituci¨®n que permite suspender la autonom¨ªa.

Ayer, en Galicia, el jefe del Ejecutivo habl¨® de la necesidad de un ¡°trabajo conjunto¡± con las autonom¨ªas. Mostr¨® su disposici¨®n a ¡°hablar, dialogar y escuchar, porque las cosas no son blancas o negras, hay otros tonos¡±. Sin mencionarlo, lanz¨® un mensaje a Mas: ¡°Estoy a disposici¨®n de quien quiera hacerlo [hablar y dialogar] porque es posible crear puntos de encuentro y por m¨ª no va a faltar¡±.

Su estrategia pasa tambi¨¦n por forzar al presidente de la Generalitat a presentar su propuesta en el Congreso, como hizo en su d¨ªa el entonces lehendakari Juan Jos¨¦ Ibarretxe con su plan. La salida ser¨ªa una votaci¨®n en la que estar¨ªa asegurado el no con los votos de PP, PSOE y UPyD.

El Gobierno quiere utilizar tambi¨¦n que el empresariado catal¨¢n vive entre el miedo y la preocupaci¨®n. Los empresarios m¨¢s significados hab¨ªan presionado a ambos para que abrieran v¨ªas de di¨¢logo en ese sentido, sobre todo teniendo en cuenta la abrumadora manifestaci¨®n independentista del pasado 11 de septiembre. Tras el encuentro de Moncloa se volvieron a repetir las llamadas, al menos a Mas, para que quitara presi¨®n a una nueva situaci¨®n que m¨¢s de uno considera ya ¡°un callej¨®n sin salida y sin hoja de ruta¡±. ¡°Se tiene que reconducir con prudencia y sentido com¨²n¡±, reclama uno de los empresarios consultados. ¡°Quiz¨¢s nos olvidamos de transmitir una cosa a Mas: que pese a tener la negativa al pacto fiscal no diera por cerrado el di¨¢logo¡±, se?alaba ayer el primer ejecutivo de una importante multinacional de servicios con base en Barcelona. Reconocidos empresarios que no reniegan de su potencial perfil independentista, admiten que este proceso se est¨¢ escapando de una senda l¨®gica. Y piden calma. ¡°La incertidumbre se lleva mal con el dinero y el mundo de los negocios; y eso es lo que hay ahora¡±, se?ala otro ejecutivo.

La Catalu?a empresarial se ha situado sin ambages a la estela del discurso del presidente de la CEOE, Joan Rosell. Aunque forzado por la presi¨®n de las patronales andaluza y madrile?a, los empresarios consideran que esas taimadas palabras del viernes expresan a la perfecci¨®n sus necesidades y reivindicaciones: la autonom¨ªa catalana necesita mejorar la financiaci¨®n pero sin el planteamiento de m¨¢ximos en el que se ha convertido el pacto fiscal y sin descartar la modificaci¨®n de la Constituci¨®n. El escenario de elecciones anticipadas no deja tranquila a la ¨¦lite empresarial. No creen que haya tiempo para desinflar el souffl¨¦ de las ¨²ltimas semanas, porque dan por descontado que entre los ejes de los programas de los partidos figurar¨¢ el debate sobre el derecho de autodeterminaci¨®n, que a su vez consumir¨¢ los titulares de la campa?a.

El jefe del Ejecutivo busca salidas pol¨ªticas y evita la confrontaci¨®n

Un veterano empresario, con evidentes muestras de enfado, recuerda el clima de tensi¨®n que se gener¨® durante la reforma del estatuto, aprobado en 2006. Los desencuentros fueron continuos y toda acci¨®n acab¨® politizada, como la opa de Gas Natural sobre Endesa, que lleg¨® a entenderse como un ataque desde Catalu?a.

Todos esos protagonistas estar¨¢n muy atentos al acto que Foment del Treball ha convocado el pr¨®ximo 18 de octubre en el Palau Blaugrana. Ideado antes de la celebraci¨®n de la Diada y como un acto reivindicativo de la empresa, ayer un joven ejecutivo se?alaba que se puede convertir en ¡°una bomba de relojer¨ªa¡± si se mantiene como un acto abierto a todo el empresariado y acaba copado por peque?os empresarios con banderas esteladas.

Mientras, CiU est¨¢ detallando su ruta a seguir con vistas a las probables elecciones anticipadas que, seg¨²n todas las previsiones, se celebrar¨¢n en noviembre. De hecho, CiU ha reservado el Palau Sant Jordi para diez fechas, incluida el 23 de noviembre, inform¨® ayer El Peri¨®dico de Catalunya, lo que da idea de que las elecciones podr¨ªan ser el 25-N. Todo apunta a que la federaci¨®n nacionalista no incluir¨¢ la palabra ruptura o independencia en su programa y que se decantar¨ªa por recoger el t¨¦rmino ¡°instrumentos de Estado¡±. Ese equilibrio contentar¨ªa seguramente a Josep Antoni Duran Lleida, l¨ªder de Uni¨®, que nunca ha sido soberanista y siempre se ha declarado partidario de la confederaci¨®n. El democristiano ya defendi¨® ¡°un paso adelante¡± tras el portazo de Rajoy al pacto fiscal del que era un entusiasta.

Mas despejar¨¢ los interrogantes en el debate de pol¨ªtica general que comenzar¨¢ el pr¨®ximo martes en el Parlament. Y queda la gran duda: si se inclinar¨¢ al final por consagrar la pr¨®xima legislatura a la convocatoria de un refer¨¦ndum secesionista al estilo del que se celebrar¨¢ en 2014 en Escocia. Precisamente, Iniciativa per Catalunya apost¨® ayer por el derecho a decidir con vistas a un Estado propio. Su idea es convocar un refer¨¦ndum con tres v¨ªas: Estado federal; confederal o un Estado independiente en la UE.

Con informaci¨®n de Fernando Garea, Carlos E. Cu¨¦, Angels Pi?ol, Dani Cordero y Pablo Taboada.