Rajoy salva el envite soberanista de Mas y prepara la siguiente batalla

Solo dos d¨ªas despu¨¦s de la manifestaci¨®n del 11 de septiembre, a la que ¨¦l no acudi¨®, Artur Mas fue a Madrid. Despu¨¦s de un desayuno en un conocido hotel, en el que lanz¨® un discurso independentista sin pronunciar esa palabra maldita, el presidente catal¨¢n comentaba en corrillos con varios dirigentes de CiU: ¡°No podemos dejar este proceso en manos de ERC, no podemos permitir que el pueblo de Catalu?a se lance en sus manos en un momento as¨ª¡±. Mas decidi¨® ponerse al frente de la manifestaci¨®n para evitar lo que pas¨® ayer, que los votos se los llevara ERC. Y Mariano Rajoy, despu¨¦s de muchas dudas, y muchos silencios que desesperaban a su partido, decidi¨® hace un mes convertir las elecciones catalanas en un mano a mano con Mas. Era un juego arriesgado.

Rajoy se moj¨® en campa?a, acudi¨® cuatro veces a Catalu?a, se tir¨® a la yugular de Mas, le acus¨® de chantajearle y de llevar al pueblo catal¨¢n a la divisi¨®n y a una aventura. Y una vez m¨¢s, como sucedi¨® en las elecciones gallegas, el superviviente Rajoy consigui¨® ganar anoche ese ¨®rdago contra Mas. Ahora se prepara para la pr¨®xima batalla, la posibilidad de un pacto CiU-ERC y que se plantee un refer¨¦ndum que est¨¢ decidido a parar.

El presidente solo ten¨ªa un objetivo: impedir que CiU obtuviera la mayor¨ªa absoluta. Para lograrlo, ech¨® tanta carne en el asador que incluso abandon¨® su habitual tono tranquilo para machacar en los m¨ªtines al ¡°irresponsable¡± Mas, del que lleg¨® a decir que no tiene ¡°agallas¡± para afrontar la crisis. En la ¨²ltima semana, la m¨¢s dura, Rajoy incluso permiti¨® que el Gobierno alentara el informe policial sin autor conocido contra Mas. Ese pulso dur¨ªsimo lo gan¨® Rajoy. Por eso la c¨²pula del PP vivi¨® una noche de euforia contenida. El presidente vuelve a salvar una bola de partido, y ahora tiene dos a?os sin elecciones para acometer m¨¢s recortes y negociar el posible rescate sin temer consecuencias pol¨ªticas inmediatas.

Los populares tratar¨¢n de evitar que CiU pacte con ERC ¡°Ser¨ªa un desastre

El panorama no est¨¢ despejado. El Parlamento catal¨¢n est¨¢ dominado por los independentistas y sobre todo por los que est¨¢n a favor de un refer¨¦ndum, lo que anticipa graves problemas pol¨ªticos para Rajoy en los pr¨®ximos meses a los que se suman la mayor¨ªa soberanista en el Pa¨ªs Vasco. Mas dijo anoche que la consulta sigue adelante. Pero esto era una batalla a todo o nada entre Rajoy y Mas, y claramente el que ha perdido es el catal¨¢n.

Alg¨²n dirigente incluso se anim¨® a hacer un an¨¢lisis contundente contra Mas. ¡°Mas ha hecho el rid¨ªculo. Antes era un fr¨ªvolo, ahora un irresponsable¡±. ¡°Ahora dir¨¢n que hay una mayor¨ªa soberanista. Eso ya exist¨ªa, si se sumaban los votos de CiU y ERC, pero Mas no convoc¨® las elecciones para que subiera ERC, las convoc¨® para lograr una mayor¨ªa absoluta y se ha metido un batacazo¡±, sentenciaban fuentes del PP. En esta interpretaci¨®n, ¡°Mas ha decidido radicalizar la pol¨ªtica catalana y el resultado es que los electores votan al original, ERC, y no a la copia, Mas¡±.

¡°Mas hizo de estas elecciones un plebiscito, dijo que su objetivo era una mayor¨ªa absoluta. Estas elecciones no eran necesarias, la convocatoria ha sido un fracaso¡±, sentenci¨® Dolores de Cospedal, la secretaria general. Para ella, hay adem¨¢s otra lectura muy favorable para Rajoy. ¡°El PP ha logrado el mejor resultado de su historia en Catalu?a cuando el Gobierno est¨¢ tomando medidas muy dif¨ªciles, impopulares. En toda Europa los gobiernos pierden elecciones regionales por las decisiones dif¨ªciles, pasa en Alemania o en Francia; y en Espa?a eso no pasa porque los espa?oles saben cu¨¢l es la situaci¨®n¡±.

Algunos incluso planteaban en privado que Mas deber¨ªa pensar en dimitir. Sin embargo, otros planteaban que habr¨ªa que abrir una puerta a Mas para que vuelva a una posici¨®n m¨¢s moderada y no se lance en los brazos de ERC. ¡°Mas debe tomar nota, un pacto con ERC ser¨ªa un desastre, un tiro en el pie¡±, se?alaba uno. Sin embargo, en p¨²blico, Cospedal cerr¨® la puerta: ¡°No vamos a poder realizar ning¨²n pacto con Artur Mas ni con CiU. El PP no puede apoyar un programa que quiere la separaci¨®n de Catalu?a¡±. ?Pero podr¨ªan abstenerse para evitar que pacte con ERC y se radicalice? se le pregunt¨®. ¡°CiU est¨¢ ya radicalizado. Esto de que el PP tenga que pactar para que Mas no se al¨ªe con ERC y se radicalice... no s¨¦ c¨®mo se podr¨ªa radicalizar m¨¢s¡±.

S¨¢nchez Camacho aspiraba a ser la segunda; es la cuarta aunque logra subir

A esa euforia por las consecuencias pol¨ªticas del resultado, que debilita a Mas, un claro rival para Rajoy y un problema may¨²sculo en las ¨²ltimas semanas, se sumaban los datos del PP catal¨¢n. No eran tan buenos como se esperaba, pero mejoran los ¨²ltimos, los de 2010, que ya fueron los mejores de la historia del PP catal¨¢n, por encima de los m¨ªticos de Alejo Vidal Quadras.

Ciutadans ha triplicado esca?os. Al PP, dicen en su direcci¨®n, se le ve demasiado de derechas, y los votantes descontentos del PSC se van a Ciutadans. Esto tambi¨¦n es un mensaje para el PP de toda Espa?a: Ciutadans en Catalu?a, UPyD en toda Espa?a, especialmente en Madrid, puede quitarle votos. De hecho, Rajoy ya lo sabe y con nadie se enfrenta en el Congreso de manera tan virulenta como con Rosa D¨ªez.

La aspiraci¨®n del PP, que seg¨²n Alicia S¨¢nchez Camacho estaba al alcance de la mano, era conseguir ser el segundo partido catal¨¢n. Y eso qued¨® muy lejos. Sin embargo, la victoria sobre Mas era de tal calibre que anoche nadie en el PP quer¨ªa ponerle peros.