Esquerra atenaza a Mas y le urge a que concrete la consulta soberanista
Los republicanos exigen un calendario y detallar todos los pasos del refer¨¦ndum El presidente catal¨¢n pide calma a CiU y prev¨¦ un acuerdo esta pr¨®xima semana

Desde las elecciones catalanas del 25 de noviembre, Artur Mas ha querido justificar los pobres resultados de su formaci¨®n (Converg¨¨ncia i Uni¨®) con el argumento de que los catalanes prefieren que el reto de avanzar hacia la autodeterminaci¨®n lo asuman conjuntamente tanto su partido como Esquerra Republicana. Mas no ha cesado de pedir a los republicanos que ejerzan ¡°su parte de responsabilidad¡±, una clara demanda de apoyo parlamentario, tanto para afrontar la senda soberanista como, sobre todo, para aprobar nuevos e impopulares ajustes. Los republicanos le han tomado la palabra y en la recta final de la negociaci¨®n han querido demostrar que no solo piensan marcar el ritmo de la negociaci¨®n, sino de la legislatura, algo que amenaza a Mas con restarle todo margen de maniobra.
El frenazo que a ¨²ltima hora del viernes dieron los republicanos a las negociaciones con CiU se prolong¨® ayer con nuevas advertencias desde la formaci¨®n republicana en el sentido de que no piensan aceptar medias palabras en lo referente a la consulta de autodeterminaci¨®n. Los republicanos no piden solo un calendario claro ¡ªconsulta el 2014¡ª sino tambi¨¦n una hoja de ruta espec¨ªfica sobre todos los pasos a dar para conseguir que los catalanes puedan decidir su relaci¨®n con el resto de Espa?a. ¡°Queremos ponerle fecha a la democracia, queremos un compromiso expl¨ªcito sobre la consulta; el c¨®mo y el cu¨¢ndo se debe hacer¡±, dijo el l¨ªder republicano, Oriol Junqueras. Este subray¨® que su partido no tiene prisa: buscar¨¢ el acuerdo ¡°tanto tiempo como haga falta¡±.
El frenazo en la negociaci¨®n ya oblig¨® ayer a rehacer la agenda que CiU ten¨ªa en mente. Uni¨®, Converg¨¨ncia y Esquerra ten¨ªan ayer convocados sus respectivos consejos nacionales para avalar un acuerdo que finalmente no se produjo. Tanto Artur Mas como Josep Antoni Duran i Lleida salieron del embrollo como pudieron ante los cuadros de su partido.
Junqueras insiste en el calendario:? ¡°Queremos poner fecha a la democracia¡±
Junqueras pudo presumir ante sus bases de haberse convertido en el verdadero ¨¢rbitro de la situaci¨®n en Catalu?a. El republicano, que evit¨® cualquier reproche, exhibi¨® la tranquilidad propia de quien se sabe con la sart¨¦n por el mango: si no hay acuerdo para la consulta, tampoco lo habr¨¢ para los Presupuestos. ¡°Estoy convencido de que lograremos el pacto¡±, recalc¨® Junqueras.
Mas opt¨® por la discreci¨®n mientras continuan las negociaciones. Su intervenci¨®n ante el consejo nacional fue vetada a los periodistas, que solo pudieron escuchar el discurso del secretario general de Converg¨¨ncia, Oriol Pujol, quien dio ¨¢nimos a la militancia y neg¨® tensiones con Josep Antoni Duran i Lleida. El objetivo es cerrar filas y evitar un escenario de desgobierno que podr¨ªa llevarse por delante al mismo Mas.
Pujol intent¨® mediar entre las posiciones de ERC y las de Uni¨®, contraria a ponerle fecha a la consulta. ¡°Tan importante como hacer la consulta es que la ganemos¡±, dijo. Mas incidi¨® ante los militantes en que el acuerdo es posible. Despu¨¦s, en una breve conversaci¨®n con los periodistas quiso transmitir tranquilidad hasta el punto de explicar que si es necesario retrasar¨¢ el debate de investidura para cerrar el acuerdo con ERC. El debate est¨¢ previsto para los pr¨®ximos jueves y viernes, pero legalmente se podr¨ªa retrasar hasta el 4 de enero.
?Converg¨¨ncia teme un escenario de desgobierno sin un pacto claro con ERC
Menos diplom¨¢tico fue Josep Antoni Duran i Lleida. Ante la militancia de Uni¨® asegur¨® que es ¡°favorable¡± al pacto con Esquerra Republicana, pero no se esforz¨® en esconder que el acuerdo no genera simpat¨ªa alguna en las filas democristianas. Duran recalc¨® que la ¡°cultura pol¨ªtica¡± de ERC es diferente a la de CiU, rechaz¨® el calendario que piden los republicanos para la consulta, se distanci¨® de la subida de impuestos que prev¨¦ el acuerdo y hasta insinu¨® que Converg¨¨ncia i Uni¨® buscar¨¢ otros socios si los republicanos no firman el pacto.
Pacto para un Consejo de ¡°Transici¨®n Nacional¡±
El acuerdo entre Converg¨¨ncia i Uni¨® y Esquerra Republicana para cerrar la convocatoria de una consulta por la autodeterminaci¨®n est¨¢ atascado. La mesa negociadora que se ha encargado del dise?o de la hoja de ruta de la consulta ha pactado un calendario que alcanza hasta el 1 de enero de 2014. En esa fecha, todo deber¨¢ estar preparado para celebrar la votaci¨®n: el Gobierno de la Generalitat tendr¨¢ que haber pedido permiso al Ejecutivo central para celebrar un refer¨¦ndum y el Parlament, ante la presumible negativa del Estado, tendr¨¢ aprobada la ley de consultas catalana para tener amparo legal. El acuerdo tambi¨¦n establece la creaci¨®n del Consejo Catal¨¢n de la Transici¨®n Nacional, un ¨®rgano abierto a los partidos que controlar¨¢ el cumplimiento de la hoja de ruta.
La fricci¨®n entre ERC y CIU, imposible de desbloquear en dos semanas de negociaciones, radica en la concreci¨®n de la hoja de ruta durante 2014. La federaci¨®n nacionalista apuesta por un redactado gen¨¦rico que manifieste el compromiso de convocar la consulta durante el 2014.
ERC quiere compromisos m¨¢s expl¨ªcitos. Los republicanos, igual que los nacionalistas, son conscientes que el Gobierno enviar¨¢ la ley de consultas al Tribunal Constitucional y que este, durante sus deliberaciones, suspender¨¢ cautelarmente la norma. La impugnaci¨®n inhabilitar¨¢ el ¨²nico amparo legal del Gobierno catal¨¢n para convocar la consulta. Por ello los republicanos quieren que en el pacto de legislatura se escriba un
Pese a plantear el
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