M¨¢s de 350 diplom¨¢ticos firman contra la Ley de Acci¨®n Exterior

M¨¢s de 350 diplom¨¢ticos ¡ªdel millar que componen la carrera¡ª han firmado una carta dirigida al ministro de Asuntos Exteriores y Cooperaci¨®n, Jos¨¦ Manuel Garc¨ªa-Margallo, en la que muestran su ¡°preocupaci¨®n¡± por el borrador de la Ley de Acci¨®n Exterior y del Servicio Exterior que ultima el Gobierno.

Pese a reconocer que se trata de una ¡°iniciativa necesaria¡± y una ¡°oportunidad hist¨®rica¡±, los diplom¨¢ticos critican que la ley no recoja la ¡°dependencia org¨¢nica¡± del embajador de todos los funcionarios acreditados en un pa¨ªs ¡ªcomo figuraba en los primeros borradores y sucede en otros pa¨ªses occidentales¡ª y que esta expresi¨®n se haya sustituido por la ¡°dependencia jer¨¢rquica¡±.

Tambi¨¦n critican que el departamento de Exteriores no tenga suficiente peso en el Consejo Ejecutivo de Pol¨ªtica Exterior, un organismo interministerial al que corresponder¨¢ aprobar, por ejemplo, el despliegue, la estructura y la relaci¨®n de puestos de trabajo de las misiones diplom¨¢ticas.

Puestos de trabajo

El hecho de que esta ¨²ltima corresponda al Ministerio de Administraciones P¨²blicas ¡°compromete seriamente las funciones, el alcance y el n¨²mero de puestos destinados a la carreta diplom¨¢tica en el corto y medio plazo¡±, pese a que sus miembros tienen ¡°una espec¨ªfica preparaci¨®n multidisciplinar orientada hacia el servicio exterior¡±.

Los diplom¨¢ticos temen que se limite dr¨¢sticamente el n¨²mero de puestos que tienen ahora reservados en el exterior, mientras que no se atiende una de sus reivindicaciones hist¨®ricas: ¡°La homologaci¨®n de las condiciones de trabajo de los funcionarios en el exterior¡±. Aluden al hecho de que algunos colectivos, como los t¨¦cnicos comerciales, disfruten de mejores condiciones en el extranjero.

Los diplom¨¢ticos se quejan de que hasta el pasado d¨ªa 7 no se autorizara la distribuci¨®n del texto de la ley, por lo que no han podido expresar su opini¨®n, y de que tampoco se tuvieran en cuenta las ¡°enmiendas sustanciales¡± planteadas por sus representantes.

La inquietud de los diplom¨¢ticos por su futuro profesional queda patente en el hecho de que la carta haya sido firmada por casi 300 de los 400 secretarios de embajada, el escal¨®n m¨¢s bajo de la carrera, a quienes luego se han sumado consejeros, ministros y embajadores.