La @policia no es tonta
La cuenta en Twitter del Cuerpo Nacional de Polic¨ªa, abierta hace cuatro a?os, es la m¨¢s seguida del mundo, despu¨¦s de la del FBI
¡°Eres hipster o de otra tribu o tendencia urbana y lo cuentas online. Pero no muestres toda tu intimidad. La privacidad prima sobre lo trendy¡±. El 25 de febrero, estos 140 caracteres dieron la campanada en Twitter. El mensaje gener¨® m¨¢s de 7.300 retuits, 1.600 favoritos y cientos de respuestas. El contenido no parece ninguna primicia. El en¨¦simo consejo a internautas en la jerga del medio. Lo ins¨®lito es la identidad del emisor. No se trataba de ning¨²n tuitero influyente, sino del Cuerpo Nacional de Polic¨ªa. Por perlas como esta, la cuenta @polic¨ªa se ha convertido, con 385.000 fieles, en la primera instituci¨®n espa?ola y el segundo cuerpo policial del mundo con m¨¢s seguidores en Twitter, tras el FBI.
Tweet significa p¨ªo, trino, gorjeo. Twitter es un inmenso gallinero donde no siempre destaca quien m¨¢s ruido hace, sino quien acierta con el tono del cacareo. En Espa?a, con m¨¢s de 5 millones de tuiteros, un tuit con m¨¢s de 300 retuiteos se considera un ¨¦xito de difusi¨®n. As¨ª que, parece que @policia p¨ªa bien. La cuenta naci¨® en 2009 de forma casi experimental con la intenci¨®n de dar presencia al cuerpo en la incipiente red social. Un intento, discreto, de aprovechar el nuevo canal para difundir campa?as de prevenci¨®n, publicitar los ¨¦xitos policiales, y solicitar la colaboraci¨®n ciudadana entre los tuiteros. Hoy, sus impulsores no acaban de dar cr¨¦dito al tir¨®n que ha logrado en el ecosistema de Twitter ¡ªse supone que poblado por una fauna joven, moderna y rebelde¡ª una cuenta que, al fin y al cabo, est¨¢ controlada por la pasma.
El cuartel general de @policia est¨¢ a la vera del despacho de su director general, Ignacio Cosid¨®. All¨ª, una docena de j¨®venes agentes ¡ªla mayor¨ªa andan por los 25¡ª, licenciados en Periodismo, Psicolog¨ªa o Sociolog¨ªa, gestionan el Twitter, adem¨¢s del resto de actividades del gabinete de comunicaci¨®n. Sin embargo, el cerebro de la cuenta no viste uniforme. Carlos Fern¨¢ndez Guerra, de 39 a?os, un experto en estrategia digital y redes, es el entusiasta community manager de la polic¨ªa. ?l es quien redacta cada tuit con los asuntos de la agenda que le proponen los mandos, y quien programa la hora de emisi¨®n de cada mensaje despu¨¦s del correspondiente filtro policial. Suyo es el aviso trendy a los hipsters que tanto impacto caus¨® en una parroquia curada de espanto en cuanto a modernidad, jergas y transgresi¨®n en el lenguaje.
¡°No somos el BOE, ni el escaparate del director que, por cierto, es tuitero y nos sigue. No puedes sonar oficialista, Twitter es cruel y te rechaza a la m¨ªnima. Donde fueres, haz lo que vieres¡±, arguye Fern¨¢ndez Guerra. ¡°El objetivo es llegar al ciudadano que usa la red, y prestarle un servicio. En este caso, advertirle del peligro de publicar datos privados. Para ello, usamos el lenguaje de nuestros seguidores. Les imitamos, aprendemos de ellos, somos una cuenta viva¡±. Las 1.000 menciones, 300 consultas y 100 respuestas que generan, de media, los 5-6 tuits diarios que emiten son la prueba del inter¨¦s que despiertan.
Porque @policia no solo tuitea, generalmente consejos y advertencias sobre uso seguro de Internet, ciberacoso, timos, violencia de g¨¦nero, acoso escolar o abuso de drogas. Tambi¨¦n responde. Atiende, mediante mensajes privados, las consultas o denuncias de los tuiteros, y las deriva al departamento policial correspondiente. Es as¨ª como, adem¨¢s de divulgativos, se obtienen resultados operativos, seg¨²n la inspectora Carolina Gonz¨¢lez, integrante del equipo. As¨ª fue, respondiendo al tuit de socorro que les envi¨® la humorista Eva Hache: ¡°Hola, buenas noches, se?or agente...¡± como se identific¨® al autor de una amenaza ¡°cre¨ªble, real y concreta¡± contra la humorista en 2011. Otras veces, son los seguidores los que se ponen la gorra de polic¨ªa: ¡°En las TuitRedadas que organizamos, recibimos miles de correos con pistas. Con una, detuvimos a nueve dominicanos con 277 kilos de coca¨ªna en un cami¨®n camufladas entre pieles de bovino¡±, informa. ?Chivatazos online? ¡°Colaboraci¨®n ciudadana¡±.
Otros seguidores no son tan diligentes. ¡°Estos son los mismos que me acaban de meter una porra en las costillas¡±, contestaba alguien al tuit de los hispters. ¡°Claro que tenemos trolls, no olvides que somos la poli. Sobre todo por la noche, cuando queda lo mejor de cada casa. La respuesta negativa es del 1%; cuando llegamos al 3%, me preocupo¡±, dice Fern¨¢ndez Guerra. Pero la mayor¨ªa son tuits entre regocijados y sorprendidos: ¡°Sois la ca?a¡±; ¡°No pod¨¦is ser m¨¢s divertidos¡±, ¡°Sois la mejor cuenta fake de Twitter".
¡°Soy fan. Es un fen¨®meno muy interesante¡±, opina Mauro Fuentes, socio en Espa?a de Ogilvy Social Media. ¡°Se nota que lo lleva gente que est¨¢ a la orden del d¨ªa de lo que pasa en el mundo real, y en la red. Los 7.000 retuits de los hipsters habr¨¢n llegado a todo el universo Twitter en Espa?a. Hay quien piensa que se pasan y que rozan la parodia, que son casi como Polic¨ªa Today, pero el medio online es potent¨ªsimo y muy eficaz. No son molestos, no son soeces y a veces son muy graciosos¡±.
Fern¨¢ndez Guerra deplora la noche en la que se le ¡°fue el dedo¡± y tuite¨® un comentario personal sobre el reality televisivo Qui¨¦n quiere casarse con mi hijo desde la cuenta de @policia. Fue Eva Hache la que dio la voz de alarma (¡°?Qu¨¦ hace @policia tuiteando sobre los #tr¨®spidos?¡±). ¡°Somos humanos¡±, admite el aludido.
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