Una pintora revela el montaje para blanquear 560.000 euros de B¨¢rcenas
La testigo, Isabel Mackinlay, admite que recibi¨® 1.500 d¨®lares por firmar con un testaferro del extesorero del PP un contrato de falsa venta de obras de arte
La pintora argentina Isabel Mackinlay ¡ªanteriormente apellidada Ardanaz¡ª desmonto ayer las supuestas argucias de Luis B¨¢rcenas para justificar la procedencia de 560.000 euros que el extesorero del PP hab¨ªa atribuido a la venta de cuatro cuadros. Mackinlay ha reconocido desde Buenos Aires al juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz, instructor del caso G¨¹rtel, que Edgar Patricio Bell, supuesto testaferro de B¨¢rcenas y del tambi¨¦n extesorero de la formaci¨®n conservadora ?ngel Sanch¨ªs, le entreg¨® 1.500 d¨®lares en una fecha indeterminada por estampar su firma en un contrato simulado de compraventa de obras de arte.
A cambio de esta cantidad, Mackinlay, especializada en la restauraci¨®n de pa?os de oro en iglesias, se hizo pasar como marchante de arte intermediaria entre la esposa de B¨¢rcenas, Rosal¨ªa Iglesias ¡ªque ejerci¨® de supuesta vendedora¡ª, y un comprador de identidad desconocida. Esta treta permiti¨® a la mujer del extesorero popular ingresar en su cuenta 560.000 euros que en realidad pertenec¨ªan ya a su marido, seg¨²n fuentes judiciales.
La declaraci¨®n pone en entredicho el origen del dinero del extesorero del Partido Popular
Las mismas fuentes afirman que el contrato se realiz¨® en dos tiempos. Edgar Patricio Bell contact¨® con Mackinlay porque su sobrino y el hijo de la pintora coincid¨ªan como alumnos en el Liceo Franc¨¦s de Buenos Aires. El primer contrato recog¨ªa la compraventa de dos tablas del siglo XV y autor desconocido ¡ªLa circuncisi¨®n del Ni?o y La Presentaci¨®n del Ni?o en el Templo¡ª. Por su fingida labor intermediadora, Mackinlay recibi¨®, seg¨²n su testimonio, 1.000 euros. Este contrato se firm¨® en las oficinas bonaerenses de Patricio Bell. Seg¨²n la restauradora, el testaferro le dijo que actuaba por orden de su jefe, ?ngel Sanch¨ªs, que no pod¨ªa figurar en la operaci¨®n.
Posteriormente, Bell contact¨® de nuevo con la pintora para proponerle un cambio en el contrato. A cambio de 500 d¨®lares m¨¢s, se retiraban del documento las dos tablas an¨®nimas del siglo XVI y se sustitu¨ªa por un bodeg¨®n del pintor napolitano Giuseppe Recco. En esta operaci¨®n, seg¨²n el testimonio de la artista argentina, participaron Bell, Sanch¨ªs y un ¡°tercer hombre¡±, que no se present¨®. Mackinlay supo despu¨¦s que se trataba de Luis B¨¢rcenas al verlo en los medios de comunicaci¨®n cuando se interes¨® por el caso por el que hab¨ªa sido llamada a declarar por videoconferencia desde la Embajada de Espa?a en Buenos Aires.
Durante la comparecencia, la defensa de Luis B¨¢rcenas mostr¨® a la testigo otros dos contratos de compraventa de obras art¨ªsticas, en los que Mackinlay no reconoci¨® su firma. Fuentes de una de las acusaciones afirmaron que la pr¨®xima diligencia de investigaci¨®n que van a solicitar consistir¨¢ en solicitar al notario argentino que dio fe de la compraventa de los cuadros que certifique la verdad de la operaci¨®n.
La declaraci¨®n como testigo de Isabel Mackinlay pone en entredicho una de las patas de la fortuna de Luis B¨¢rcenas. El extesorero del PP, que lleg¨® a tener 38 millones de euros en cuentas bancarias en Suiza atribuy¨® su fortuna al acierto en operaciones burs¨¢tiles, a las inversiones inmobiliarias y a la compraventa de obras de arte.
El juez Ruz imputa a B¨¢rcenas numerosos delitos. El primero es la defraudaci¨®n de las cuotas de IRPF de 2002 y 2003 correspondientes a 459.565 euros y 515.350 euros que supuestamente le entreg¨® el cerebro del caso G¨¹rtel, Francisco Correa. Ruz tambi¨¦n menciona la ocultaci¨®n al fisco junto con su esposa, Rosal¨ªa Iglesias, de 222.112 euros en 2006 y las cuotas no ingresadas en 2007 por IRPF e Impuesto de Sociedades que se derivan del descubrimiento de su fortuna en Suiza, que suman hasta ahora un total de 1,08 millones de euros. El juez tambi¨¦n le imputa cohecho y blanqueo.
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