El ¨²ltimo gran salto a Ceuta se prepar¨® durante cuatro d¨ªas... y hay otro en ciernes
Los inmigrantes corrieron la voz el viernes de que se preparaba una acometida a la valla Los subsaharianos comenzaron a reunirse en los montes durante el fin de semana La supuesta debilidad de la Guardia Civil y de un pacto con la UE anima a los extranjeros Las redes sociales ya anuncian la preparaci¨®n de otra intentona
La ciudad de Ceuta se sinti¨® sorprendida por la magnitud que alcanz¨® el grupo de subsaharianos que intent¨® superar la frontera en varios puntos a lo largo de toda la madrugada del lunes 3 de marzo, casi un mes despu¨¦s del fallecimiento de 15 inmigrantes en la playa del Tarajal. La cifra de casi 1.500 sin papeles organiz¨¢ndose en la noche en partidas numerosas super¨® las expectativas. Fue un registro hist¨®rico, desconocido hasta el momento, pero no ser¨¢ el ¨²ltimo a la vista de cu¨¢nta informaci¨®n circula en las redes sociales, el nexo de comunicaci¨®n de los inmigrantes clandestinos en Marruecos. La consigna actual es intentar un gran salto en estas fechas por la debilidad de una Guardia Civil criticada en Espa?a y ante la perspectiva de que el Gobierno logre institucionalizar de alguna manera, de acuerdo con Europa, alguna f¨®rmula de devoluci¨®n en caliente. Esa creencia ha movilizado a los subsaharianos hasta niveles nunca vistos hasta ahora.
No por m¨¢s anunciado ha sido menos sorprendente. Desde el pasado viernes se sab¨ªa de un proyecto de salto masivo en ciernes. Desde que los montes cercanos a Ceuta se vaciaron tras el golpe de los 15 fallecidos, cientos de inmigrantes buscaron refugio en las ciudades, sobre todo en T¨¢nger y alrededores. La informaci¨®n flu¨ªa entre los inmigrantes, irregulares o no, desde T¨¢nger a Madrid, pasando por Par¨ªs y otras capitales europeas: era necesario intentar un gran salto a la vista de que la Guardia Civil espa?ola no podr¨ªa utilizar la contundencia de otras ocasiones (el uso de las pelotas de goma estaba restringido por ¨®rdenes superiores) y de que los medios de comunicaci¨®n y las ong vigilar¨ªan el recurso a la devoluci¨®n en caliente
As¨ª, desde el domingo y durante todo el lunes se fueron concentrando inmigrantes en los bosques cercanos a la espera de ¨®rdenes. Se produjo un ¨¦xodo hasta ahora desconocido desde las ciudades hasta el monte.
Esa informaci¨®n era conocida tambi¨¦n por las autoridades. Marruecos hab¨ªa reforzado sus posiciones en la frontera durante el fin de semana, bajo la autoridad de dos generales, seg¨²n algunas informaciones. La Guardia Civil, con unos 100 efectivos, estaba en situaci¨®n de alerta, as¨ª como efectivos del Cuerpo Nacional de Polic¨ªa, Salvamento Mar¨ªtimo e incluso la Cruz Roja. Todo estaba preparado para una noche tensa. Solo faltaba saber qu¨¦ itinerario elegir¨ªan los subsaharianos, si optar¨ªan por la playa, en la bah¨ªa norte o en la bah¨ªa sur, o elegir¨ªan un punto intermedio.
Esa decisi¨®n no se toma en conjunto: son dos o tres jefes quienes deciden cu¨¢ndo se act¨²a y hacia d¨®nde han de dirigirse. Reagrupar m¨¢s de 1.000 personas en el bosque y en la oscuridad no es f¨¢cil, pero para eso est¨¢n los tel¨¦fonos m¨®viles. Y nadie discute esas ¨®rdenes, a pesar de que los inmigrantes pertenecen a varias nacionalidades.
Las c¨¢maras t¨¦rmicas de la Guardia Civil, con una capacidad para distinguir cualquier persona o animal a una distancia de algo m¨¢s de dos kil¨®metros en el bosque, dieron la primera se?al de aviso. Hay entre hora y media y dos horas de plazo para que el grupo avistado llegue a la frontera, seg¨²n los c¨¢lculos de los hombres m¨¢s experimentados. Hacia las cuatro de la madrugada, el grupo que empezaba a vislumbrarse era extraordinariamente numeroso.
De lo sucedido hasta ese momento se desprende el alto grado de colaboraci¨®n que alcanzaron en esta ¨²ltima intentona los efectivos policiales marroqu¨ªes y espa?oles, dispuestos a no permitir que los inmigrantes alcanzaran la frontera. Seg¨²n las informaciones oficiales, el primer intento tom¨® direcci¨®n hacia una de las playas, donde las fuerzas marroqu¨ªes lograron impedir el paso de m¨¢s de 500 hombres bloqueando los accesos con coches y furgonetas. Paralelamente, se forma un grupo de unos 300 hombres que se dirige hacia la zona pr¨®xima al puente del Tarajal.
La nota oficial se?ala que los intentos de acceso fueron repelidos durante dos horas y media por un centenar de agentes espa?oles y unos 200 miembros de las fuerzas de seguridad marroqu¨ªes. Se cita la existencia de un tercer grupo de 500 personas que queda a la expectativa y parece echar marcha atr¨¢s. De c¨®mo se repelen estos intentos no hay detalle, salvo que se cuentan tres heridos leves entre los guardias civiles y 870 inmigrantes retenidos por las fuerzas marroqu¨ªes. Si los subsaharianos fueron alejados de alguna manera por los marroqu¨ªes no hay constancia: lo que se conoce de las ¨²ltimas actuaciones es que suelen ser transportados en veh¨ªculos hasta T¨¢nger. Se supone que el resto habr¨¢ regresado por su propio pie hacia los montes.
La Guardia Civil no actu¨® en territorio marroqu¨ª, aclaran fuentes de la delegaci¨®n de Gobierno, sino desde la zona internacional, la denominada tierra de nadie, que es la franja de terreno que separa suelo espa?ol de suelo marroqu¨ª. El delegado de Gobierno, Francisco Antonio Gonz¨¢lez P¨¦rez, aclar¨® que los agentes espa?oles actuaron ¡°siguiendo las instrucciones sobre uso de material antidisturbios¡±, en alusi¨®n a la no utilizaci¨®n de pelotas de goma. ¡°Habr¨¢ un antes y un despu¨¦s¡±, se?al¨® en un tono euf¨®rico. ¡±Lo que ha sucedido hoy va a cortar ese efecto llamada que se ha producido por quien desde la irresponsabilidad de instituciones y organizaciones ha criticado y cuestionado a la Guardia Civil¡±.
Si los subsaharianos entienden que lo sucedido el lunes significa un antes y un despu¨¦s est¨¢ por ver. La informaci¨®n volver¨¢ a fluir en breve tiempo y con ella las nuevas consignas. Hoy en d¨ªa, la necesidad de un gran salto no ha sido descartada en las redes sociales de los inmigrantes.
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