Rog¨¦rio, la otra cara de un triunfador
Un veintea?ero promociona desde Madrid un negocio que dice tener 200.000 inversores La fiscal¨ªa brasile?a le atribuy¨® un fraude piramidal millonario
Rog¨¦rio Alves da Silva se mueve como un telepredicador. Tiene tablas, labia y maneja las pausas con la soltura de un pastor televisivo. ¡°Pido a Dios que me proteja. Tengo una misi¨®n muy grande¡±, revel¨® en junio ante 700 seguidores en el auditorio de un hotel de Madrid.
La misi¨®n de este brasile?o de 22 a?os consiste en promocionar WishClub, una compa?¨ªa multinivel que promete ganancias por ver anuncios en Internet y distribuir una revista. Desembarcar en el negocio cuesta entre 225 y 1.125 euros.
Enfundado en un traje negro, Alves se presenta sobre los escenarios como el fundador aunque su nombre no aparece en la sociedad. Dice haber captado 200.000 inversores en dos meses. Y pilotar una empresa que figura ¡°entre las 300 [m¨¢s importantes] de Espa?a¡±. Proyecta su imperio hacia 52 pa¨ªses desde un enjambre de oficinas en Alcobendas, Madrid. Ah¨ª pasa las tardes asesorando a futuros emprendedores, seg¨²n una trabajadora que se niega a mostrar sus instalaciones. La videovigilancia cerca las dependencias. Ni Alves ni el resto de responsables de WishClub responden a EL PA¨ªS. ¡°Est¨¢n de viaje en Brasil¡±, zanja una portavoz cuando se pregunta por el pasado del protagonista de esta historia.
Desembarco de l¨ªderes piramidales
El emprendedor Rog¨¦rio Alves salt¨® de BlackDever a WishClub. Ocurri¨® cuando la justicia brasile?a se?al¨® a su primera compa?¨ªa como un esquema piramidal. Otros empresarios espa?oles del denominado sector multinivel han recalado en WishClub desde TelexFree, una sociedad suspendida por operar con unmodelo fraudulento despu¨¦s de que el FBI aterrizara en abril en sus min¨²sculas oficinas en Massachusetts. El exl¨ªder de TelexFree Juan Carlos Molina recogi¨® un cheque de 33.000 euros en la convenci¨®n que WishClub celebr¨® en Madrid el pasado junio. Otros casos de puerta giratoria desde la pir¨¢mide son Jos¨¦ G. o Silvia P.
Roberto Z., que se reconoce en la red Linkedin como cofundador del equipo de TelexFree, aterriz¨® tambi¨¦n en el proyecto del brasile?o. La pir¨¢mide bajo sospecha ha nutrido incluso listas electorales. El exresponsable de marketing de TelexFree en Brasil, Carlos Roberto Costa, se present¨® como candidato del Partido Republicano Progresista. En su declaraci¨®n de bienes p¨²blica registr¨® un patrimonio que superaba los cuatro millones de euros. TelexFree atrap¨® los ahorros de 240.000 brasile?os. Y Costa lleg¨® a decir en plena investigaci¨®n a la prensa que la sociedad hab¨ªa cumplido muchos sue?os. La explosi¨®n de la empresa origin¨® uno de los mayores esc¨¢ndalos financieros del pa¨ªs.
Los or¨ªgenes del precoz directivo hay que buscarlos en el n¨²mero 515 de la calle General Osorio del municipio brasile?o de Uberl?ndia. Ten¨ªa 21 a?os, llevaba ortodoncia y se presentaba como consejero delegado. Corr¨ªa 2013 y su empresa se llamaba BlackDever. Promet¨ªa ganancias de hasta 63.000 euros al mes. Incluso, auguraba en su publicidad en la red quintuplicar los beneficios de TelexFree, una colosal pir¨¢mide que atrap¨® los ahorros de un mill¨®n de inversores del planeta que respondieron a la llamada de la fortuna expr¨¦s.
La justicia brasile?a cerr¨® la firma de Alves, BlackDever, despu¨¦s de que la fiscal¨ªa del estado de Minas Gerais acusara al veintea?ero de levantar una pir¨¢mide financiera. Su negocio exig¨ªa el pago por desembarcar en un sistema que promet¨ªa miles de euros a cambio de colocar anuncios en Internet. El modelo era insostenible y requer¨ªa el reclutamiento constante de inversores, seg¨²n la fiscal¨ªa. De lo contrario, la arquitectura se desplomaba. La fiscal Larissa Brisola Brito desmont¨® la par¨¢bola del ¨¦xito. Atribuy¨® al veintea?ero y a otros tres directivos pr¨¢cticas abusivas y usar publicidad enga?osa. Afirm¨® que el esquema persegu¨ªa recoger dinero con la baza de una alta rentabilidad. Con un capital de 33.000 euros, BlackDever lleg¨® a mover m¨¢s de 24 millones, seg¨²n fuentes de la investigaci¨®n. ¡°El negocio de Rog¨¦rio Alves ol¨ªa mal. Solo hab¨ªa dep¨®sitos. No era un banco y no se vend¨ªa nada¡±, explica a EL PA?S el fiscal de delitos contra el consumidor de Minas Gerais, Fernando Rodrigues, que interrog¨® a Alves y recuerda como ¡°ins¨®lito¡± que el precoz directivo se presentara en el juzgado con ocho abogados. ¡°Cuando le llamamos para un segundo interrogatorio, ya estaba en Espa?a¡±, a?ade Rodrigues. El fiscal se ¡°sorprendi¨®¡± de la juventud del consejero delegado, informa Carla Jim¨¦nez.
Pero el emprendedor sali¨® del bache. Una multinivel cerraba en Brasil, otra surg¨ªa en Santa Cruz Tenerife. Se llamaba WishClub y estaba vinculada al veintea?ero. La compa?¨ªa naci¨® en diciembre bajo la matriz Asblkeu y un capital de 62.000 euros. Su administrador es Ezequiel Hip¨®lito, hemanastro de Alves, seg¨²n una portavoz. Y su vicepresidente, el ¡°entrenador de l¨ªderes¡± Ezequiel Mel¨¦ndez. La corporaci¨®n tiene seis sociedades vinculadas a la matriz, seg¨²n su web. Solo dos figuran en la base de datos mercantil Informa. La mitad de sus portales no funcionaban este s¨¢bado.
BlackDever y WishClub surgieron como un sistema multinivel, recurren a im¨¢genes de coches de lujo y viajes ex¨®ticos para atraer a inversores. Y utilizan una escalera de incentivos donde Black Diamond (diamante negro) encarna la met¨¢fora de la fortuna: m¨¢s de 60.000 euros al mes. Alves, del que se desconoce si curs¨® estudios superiores, presume en p¨²blico de haber ganado ya 52.000 euros en WishClub. Y se hace acompa?ar en su nuevo proyecto de directivos de la compa?¨ªa cercada por la justicia brasile?a. El expresidente de BlackDever, Jo?o Mercucci, asisti¨® a la presentaci¨®n de WishClub en Madrid el pasado junio. Mercucci fue uno de los cuatro empresarios mencionados en el escrito de la fiscal¨ªa de Minas Gerais por levantar un esquema piramidal.
WishClub se desmarca de un fraude. Apunta que el grupo solo tiene 12.000 distribuidores en Espa?a, Portugal, Brasil, Rep¨²blica Dominicana y Colombia. Y no los 200.000 que airea Alves sobre los escenarios. ¡°Le puede la euforia. Es muy joven¡±, precisan. El veintea?ero, a?aden, carece de cargos judiciales y ha demandado a la administraci¨®n brasile?a por el cierre de su multinivel.
Hoy, el emprendedor que luce un ostentoso reloj, se maneja en perfecto castellano -estudi¨® en Espa?a-, y salpica sus discursos de referencias religiosas sigue reclutando a inversores para su esquema de ¨¦xito. En una de sus ¨²ltimas intervenciones, aleccionaba as¨ª a sus correligionarios. ¡°En los ¨²ltimos meses hemos aprendido que no se construye una compa?¨ªa de la noche al d¨ªa¡±.
investigacion@elpais.es
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