La madrina del independentismo

Carme Forcadell (Xerta, 1956), presidenta de la Asamblea Nacional Catalana (ANC),una funcionaria de la Generalitat con escasa trayectoria p¨²blica y sin aparentes condiciones para la oratoria o la pol¨ªtica, era hasta 2012 una desconocida en los c¨ªrculos de poder catalanes. ¡°Lo m¨¢s noticioso que puedo decir es que puedo decir muy poco de ella¡±, explica un alto cargo de la Generalitat vinculado al proceso y a la esfera pol¨ªtica desde la Transici¨®n. ¡°Pero es mucho m¨¢s sensata de lo que podr¨ªa parecer. Lo que ha hecho con la ANC es de una precisi¨®n de relojero¡±, agrega en referencia al ¨¦xito de las tres Diadas multudinarias que esta entidad de 51.000 socios ha convocado desde 2012.

Miltante de ERC, fue concejal en Sabadell desde 2003 hasta 2007

El tsunami popular de la primera movilizaci¨®n empuj¨® a Artur Mas a unas elecciones anticipadas que le costaron 12 diputados a CiU. La ¨²ltima, organizada con precisi¨®n germ¨¢nica por esa asociaci¨®n el pasado 11 de septiembre, logr¨® una asistencia r¨¦cord de 1,8 millones de personas, seg¨²n la Guardia Urbana, y fue la antesala a la pol¨¦mica firma del decreto de convocatoria de la consulta. ¡°President, ponga las urnas¡±, le espet¨® entonces Forcadell, en uno de esos momentos en los que parece que intente marcar la agenda de la Generalitat y que sirven al programa de s¨¢tira pol¨ªtica Pol¨°nia para caricaturizarla como una mujer de actitud mojigata y muy mandona ¨Cuna tieta, lo llamar¨ªan en Catalu?a- que le hace la vida imposible a Mas. Aunque muchas veces haya sido m¨¢s bien un apoyo. Pero a ella no le gusta esa parodia. Su relaci¨®n con el President, asegura, es escasa y meramente institucional. ¡°Ni yo tengo su tel¨¦fono, ni ¨¦l el m¨ªo, si es lo que me pregunta¡±.

Junto a la Sagrada Familia de Barcelona, en unos bajos de la calle Industria, se encuentra la sede de la ANC. El local sirve de oficina y tambi¨¦n de almac¨¦n para la enorme cantidad de merchandising amarillo con el que se financia la entidad. Vestida con unos vaqueros ce?idos, camiseta roja y una americana -que lucir¨¢ hasta que termine la jornada en un acto de campa?a en Martorell-, aparece por una escalera de caracol. ¡°No le gustan las preguntas personales¡±, advierten dos de sus j¨®venes colaboradores. Casada y con dos hijos, aparenta menos de sus 58 a?os. Camino a su despacho explica que no hace tanto ning¨²n medio sol¨ªa interesarse por ellos. Aunque ese cambio de tendencia no la ayude a relajarse en exceso durante la conversaci¨®n de una hora, entre t¨ªmida y herm¨¦tica cuando no se habla estrictamente de actualidad.

Forcadell, nacida en un pueblo de poco m¨¢s de 1.000 habitantes en las tierras del Ebro, se cri¨® en una familia humilde cuyo padre era pay¨¦s y camionero, seg¨²n cuenta una vecina en la carnicer¨ªa de Xerta. Junto a la vieja estaci¨®n de tren, en una casa con un huerto de ¨¢rboles frutales, colgaba hace una semana una estelada. Sin embargo, nadie en su familia ¨Ctampoco ella- era independentista cuando se march¨® a estudiar a los 18 a?os a la Universidad Aut¨®noma de Barcelona para quedarse a vivir en el centro de Sabadell hasta hoy. El descubrimiento de la historia y la lengua, cuenta, transformaron su visi¨®n pol¨ªtica hasta las posiciones actuales. ¡°En aquella ¨¦poca pensaba que alg¨²n d¨ªa podr¨ªa suceder esto, pero la verdad es que muchos gobiernos del PP en Espa?a, como el de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar han ayudado a acelerarlo¡±, se?ala. Y en gran medida, tambi¨¦n la asociaci¨®n que preside. ¡°Pero quiero que quede claro que no soy ni mejor ni peor que otro para esta funci¨®n¡±.

Sabe que su sobreexposici¨®n p¨²blica puede ser un arma para quienes piensan que la ANC se ha vuelto demasiado personalista. Incluso internamente, donde en alg¨²n momento ya han surgido voces cr¨ªticas por un cierto ¡°exceso de divismo¡±. Ella niega cualquier protagonismo e interpreta el ¨¦xito como la consecuencia de un ¡°terreno que ya estaba abonado¡±. ¡°La mayor parte de la gente que sale a la calle no es socia de la asamblea, pero defendemos lo que piensa la mayor¨ªa¡±, remarca. Una afirmaci¨®n que sorprende a muchos, como el polit¨®logo Nacho Corredor: ¡°Me llama la atenci¨®n que una persona a la que en 2014 votaron 6.905 personas, solo una parte de la ANC, hable en nombre del pueblo¡±.

Muchos gobiernos del PP han ayudado a acelerar esto", afirma Forcadell

Hoy Forcadell ¡ªfuncionaria del departamento de Educaci¨®n de la Generalitat en excedencia hasta que pase el 9-N¡ª ha desarrollado una cierta alergia a los partidos pol¨ªticos, con los que marca constantemente una cierta distancia que casa bien con el sentir de la calle, pero durante un tiempo habl¨® en nombre de uno de ellos. Tres ediles que coincidieron con ella en Sabadell, donde ejerc¨ªa labores de pol¨ªtica ling¨¹¨ªstica, resaltan su capacidad de trabajo, pero tambi¨¦n su indisimulable voluntad por destacar. ¡°Ten¨ªa una gran ambici¨®n personal. Intent¨® ir de cabeza de lista, pero en el partido, donde ya mandaba [Joan] Puigcerc¨®s, no se fiaban¡±, se?ala una antigua concejal. ¡°Estaba obsesionada con la independencia. Su gran propuesta fue un reglamento para que todos los escritos fueran en catal¨¢n¡±, critica otro edil que comparti¨® legislatura con ella. Josep Maria Civis, su primer avalador pol¨ªtico en el Ayuntamiento, en cambio, la considera ¡°una muer tenaz y una patriota que profundiza mucho en todos las asuntos que coge¡±. ¡°En aquella ¨¦poca, cuando el independentismo no ten¨ªa una predicamento mayoritario, tuvimos muchas dificultades. No ha sido un camino f¨¢cil¡±, recuerda.

Por entonces Forcadell, licenciada en Ciencias de la Comunicaci¨®n, Filosof¨ªa y m¨¢ster en Filolog¨ªa, ya pertenec¨ªa a ?mnium Cultural, a la Plataforma per la Llengua y hab¨ªa estado en la Comissi¨® de Dignitat para los papeles de Salamanca. Pero, sobre todo, formaba parte de la Plataforma Pel Dret a Decidir (PDD), una organizaci¨®n bendecida por ERC que hoy podr¨ªa verse como antesala (no por sus integrantes) de la ANC. Desde ah¨ª particip¨® en la organizaci¨®n de las primeras consultas populares por la independencia -muy parecidas a lo que ahora plantea Artur Mas- y vivi¨® la fuerte disputa ideol¨®gica y judicial desaloj¨® del poder a la direcci¨®n de la plataforma. Ella termin¨® como vicepresidenta. M¨°nica Sabata, en cambio, una de las caras j¨®venes y renovadas que ten¨ªa entonces el independentismo, fue una de las que hizo las maletas: ¡°Unos abog¨¢bamos por continuar trabajando para la mayor¨ªa social con el concepto del derecho a decidir. Otros creyeron que hab¨ªa llegado el momento de hacer un discurso claramente independentista¡±. Forcadell era de estos ¨²ltimos.

En 2011, casi en silencio, comenz¨® a gestarse la ANC. En la primera lista de 33 personas -confeccionada por sus 4 fundadores, que hablaban en c¨®digo cifrado por Internet- , ya estaba ella. Su trabajo de organizaci¨®n en las consultas hab¨ªa tenido eco. En la primera asamblea del secretariado nacional empez¨® a intervenir m¨¢s que los dem¨¢s, recuerda el vicepresidente Jaume Marfany. ¡°Daba ideas muy convencida y con mucha firmeza. Ve¨ªas que tiraba¡±, insiste. No ten¨ªa el pedigr¨ª de los l¨ªderes de toda la vida, pero justamente se buscaba a alguien con experiencia que no incomodase ninguna de las sensibilidades ideol¨®gicas independentistas que tradicionalmente se hab¨ªan peleado. Cinco a?os despu¨¦s de su derrota electoral, Forcadell volv¨ªa a estar en el lugar y el momento oportunos.

Una de las claves de su ¨¦xito reside en un mensaje sencillo, alejado de met¨¢foras y consignas mesi¨¢nicas del independentismo tradicional

Parte del ¨¦xito del nuevo personaje, convertida ya en 2012 en presidenta de la entidad, reside en un mensaje sencillo (nunca escribe sus discursos), alejado de met¨¢foras, consignas mesi¨¢nicas y radicalismos de los l¨ªderes tradicionales del independentismo. Ha logrado que los ciudadanos no la vean como una infiltrada del poder y que el poder no la vea a ella, de momento, como a una rival. M¨¢s all¨¢ del tono de ri?a que a menudo emplea y que puede incomodar, las clases medias, m¨¢s proclives estos d¨ªas al cambio, reconocen en ella a una figura familiar. Como explica el experto en comunicaci¨®n pol¨ªtica Toni Aira, en general ¡°se la percibe como a un ciudadano m¨¢s¡±. ¡°En un momento donde se buscan liderazgos compartidos o relaciones m¨¢s horizontales, ella, por mucho que haya militado en ERC, no se identifica elementos pertenecientes a ninguna casta, para decirlo en lenguaje de Pablo Iglesias. Iconogr¨¢ficamente es algo as¨ª como una madre coraje¡±, se?ala.

Bajo su mando -aunque algunos acusasen a la direcci¨®n que pertenece de falta de transparencia- varias fuentes de la ANC aseguran que ha aliviado m¨¢s de una tensi¨®n interna cuando el crecimiento de la organizaci¨®n provoc¨® entuertos contables. Pero, sobre todo, ha sabido recuperar un tono, m¨¢s suavizado que en otras de sus etapas, adecuado para integrar a un n¨²mero inusitado de corrientes pol¨ªticas. Incluso a castellanohablantes llegados de toda Espa?a. ¡°Fue important¨ªsima en la manifestaci¨®n de 2012. Hubo ciertos problemas internos porque muchos quer¨ªan que apareciera la palabra ¡®Independencia¡¯. Decidimos convocarla bajo el lema ¡®Catalunya, nou estat d¡¯Europa¡¯ y usar la palabra ¡®Llibertat¡¯. As¨ª se pod¨ªa incluir a gente que entonces no era independentista. Y se demostr¨® que fue un ¨¦xito¡±, remarca Marfany.

Puestos a imaginar la independencia, hay una fecha que a Forcadell le gustar¨ªa para una declaraci¨®n unilateral: el 23 de abril de 2015. Muy cerca del fin de su mandato en mayo en la ANC. Antes habr¨ªa que pasar por unas elecciones plebiscitarias para las que varios partidos han pedido ya una lista unitaria encabezada, o al menos escoltada, por alguien de la sociedad civil, probablemente vinculada a la ANC. Muchas de las 20 fuentes consultadas para este perfil creen que ser¨¢ el momento en el que vuelva a la pol¨ªtica. ¡°No lo tengo previsto¡±, responde ella. ¡°De momento, cuando termine, en lo ¨²nico que pienso es en unas vacaciones¡±. Tendr¨¢ 59 a?os y habr¨¢n pasado ocho desde que ERC minusvalor¨® su potencial.