Los ocho de Airbus: ¡°Por la libertad sindical y el derecho a la huelga¡±

"No ha habido acuerdo. No existen esos delitos. Exigimos que haya una reforma del art¨ªculo 315.3 del c¨®digo penal", sentencia el secretario general de CCOO (Madrid), Jaime Cedr¨²n, que hoy en d¨ªa aboga por los ocho sindicalistas de la empresa Airbus en Madrid que se enfrentan a 64 a?os de c¨¢rcel ¡ªocho a?os y tres meses para cada uno, por petici¨®n de la Fiscal¨ªa¡ª por los sucesos ocurridos en la huelga general del 29 de septiembre de 2010 contra la Reforma laboral de Gobierno de Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero. El colectivo, tras dos a?os de proceso judicial, pide al Gobierno que reforme la parte del C¨®digo Penal, que marca como castigo penas de hasta tres a?os de prisi¨®n para quien actuando en grupo o individualmente, pero de acuerdo con otros, coacciona a otras personas a iniciar una huelga. Uno de los motivos por los cuales el fiscal ha imputado a los siete sindicalistas de CCOO y uno de UGT.

Despu¨¦s de cuatro a?os de proceso, ambas partes, Fiscal¨ªa y acusados, a¨²n no han llegado a un acuerdo en concreto. En todo este tiempo han pasado varias cosas.?En abril de 2012, dos a?os despu¨¦s de la identificaci¨®n de los imputados, se celebr¨® una rueda de reconocimiento de estos. Tuvieron que pasar otros dos a?os hasta que, en febrero pasado los sindicalistas recibieron el escrito de acusaci¨®n donde el fiscal solicita las penas de los 8 a?os y tres meses de prisi¨®n por cabeza para Tom¨¢s Garc¨ªa Rojas, Enrique Gil, Jos¨¦ Alc¨¢zar, entre otros.?

La pr¨®xima vista de conciliaci¨®n ser¨¢ el 11 de febrero, donde se decidir¨¢ si van o no a juicio. "Estamos pendientes de que la fiscal¨ªa pueda estudiar, si hace, alguna propuesta para encontrar alguna conformidad con los acusados. No ha habido un acuerdo m¨¢s all¨¢ de la suspensi¨®n de la vista", explica el letrado de uno de los imputados, Rufino Alarc¨®n, que como otros de los abogados de la defensa, amigos y familiares, esperan de pie en el vest¨ªbulo contiguo a las salas de vistas de la segunda planta en Getafe.

Alarc¨®n acent¨²a que "la defensa no admite" ninguno de los delitos por cuales se les acusa a los sindicalistas: atentado contra los polic¨ªas, otro de lesiones contra los polic¨ªas y otro m¨¢s contra el derecho de los trabajadores, por impedir laborar a aquellos que s¨ª quisieron hacerlo en la ma?ana de la manifestaci¨®n celebrada a la entrada de la puerta principal de la empresa Airbus. Este repite una y otra vez, que "el 29 de septiembre de 2010 los ocho trabajadores estaban ejercitando su derecho a la huelga". Y denuncia que para "la imputaci¨®n", el juez ha hecho "una selecci¨®n de los detenidos para descabezar el movimiento sindical y desactivar el derecho de huelga".

El juez a varios de los imputados los identific¨® despu¨¦s de que estos pasaran por la enfermer¨ªa de la empresa. Uno de estos fue el sindicalista Rodrigo Malo, de 55 a?os, que fue asistido por una lesi¨®n en su mu?eca izquierda."Yo realmente la imputaci¨®n que tengo por haber tenido agresiones. Ese d¨ªa hubo una carga policial, y por tal motivo, algunos trabajadores que est¨¢bamos en la puerta sufrimos lesiones. Pasamos por el botiqu¨ªn de la empresa para que nos atendieran, y luego, el juez pidi¨® que le facilitaran los nombres de nosotros, porque de esa forma nos situaba en el momento de los hechos", cuenta Malo, que posee la voz m¨¢s fuerte de los dem¨¢s colegas sindicalistas, tambi¨¦n imputados, que charlan en un semic¨ªrculo en la mitad del vest¨ªbulo. Muchos de ellos, visten una camiseta de la cual se lee: Huelga no es un delito. Los ocho de Airbus. Por la libertad sindical y el derecho a la huelga. ?

"Nosotros creemos que es un paso muy importante modificar el c¨®digo penal, y lo segundo, es que l¨®gicamente creemos que se est¨¢ planteando un delito por coacciones que tampoco tienen cabida, porque cuando ejerces con un piquete de huelga no est¨¢s ejerciendo coaciones. La instrucci¨®n de este sumario ha sido un poco deficiente, o sea, que hay algunas acusaciones que se sustentan sobre hechos que creemos que no son ciertos", sentencia el secretario general de CCOO (Madrid), Jaime Cedr¨²n.