La tesis secreta de Francisco Camps

Tiene 697 p¨¢ginas. Se titula Propuestas para la reforma del sistema electoral. Y es un documento secreto. Ning¨²n investigador, estudiante o profesor puede consultar la tesis doctoral que el expresidente de la Generalitat Valenciana Francisco Camps defendi¨® en 2012 en la Universidad Miguel Hern¨¢ndez de Elche (Alicante). El trabajo de Derecho Constitucional recibi¨® un sobresaliente cum laude.

Camps dio orden de blindar su investigaci¨®n. As¨ª lo recoge la base de datos interna del centro. ¡°Esta tesis no se puede consultar ni prestar por deseo del autor¡±, admite la directora de la biblioteca de la Miguel Hern¨¢ndez, Encarna Rodr¨ªguez. Una trabajadora de esta universidad detalla as¨ª las medidas de seguridad aplicadas al documento: ¡°La tesis est¨¢ custodiada. Hay una copia en la biblioteca. Pero ni nosotros tenemos acceso¡±.

Camps respondi¨® de este modo a la llamada de EL PA?S.

¡ª ?Por qu¨¦ impide ver su tesis?

¡ª Es la primera informaci¨®n que tengo. No ten¨ªa ni idea. Me alegro de que alguien se interese por mi trabajo.

El profesor de Filosof¨ªa del Derecho de la Universidad P¨²blica de Navarra Jorge Urd¨¢noz descubri¨® el car¨¢cter confidencial del tratado acad¨¦mico de Camps el pasado septiembre. La Miguel Hern¨¢ndez neg¨® entonces a este especialista en sistemas electorales la consulta de una copia aludiendo que estaba desautorizada por el autor. Urd¨¢noz, que precisaba la informaci¨®n para un ensayo sobre la reforma electoral, volvi¨® a la carga. Solicit¨® hace tres semanas un ejemplar al director de la investigaci¨®n, el profesor de Derecho Constitucional de la Universitat de Val¨¨ncia Vicente Garrido. Despu¨¦s, contact¨® con el propio Camps a trav¨¦s de su secretaria. Ninguno contest¨® a sus correos. La directora de la biblioteca ya le hab¨ªa advertido de que el pol¨ªtico pidi¨® ¡°por escrito¡± que nadie accediera al texto.

"El texto est¨¢ custodiado", dicen en la Universidad de Elche

Dos semanas despu¨¦s de ser absuelto de un delito de soborno por recibir trajes de la red corrupta G¨¹rtel, Camps ley¨® durante 40 minutos su tesis. Fue el 10 de febrero de 2012. Un d¨ªa antes de la entrada en vigor de una disposici¨®n del Real Decreto 99/2011 que obligaba a los doctores a publicar y colgar sus investigaciones en formato PDF para su consulta p¨²blica. La norma que ampar¨® la investigaci¨®n del expresidente de la Generalitat Valenciana, de 2007, no exig¨ªa la difusi¨®n pero s¨ª autorizaba la consulta en la biblioteca de la universidad, donde se deposita un ejemplar en papel, seg¨²n el vicerrector de Investigaci¨®n de la UNED, Ricardo Mairal. La Miguel Hern¨¢ndez vet¨® tambi¨¦n a este peri¨®dico ver el texto en sus instalaciones. ¡°El autor no lo permite¡±, justificaron en la biblioteca. El centro que concedi¨® a Camps el t¨ªtulo de doctor en Derecho se sum¨® en 2013 al movimiento Open Access (acceso abierto) para divulgar gratis tesis, trabajos fin de carrera y art¨ªculos.

¡°Todas las tesis son p¨²blicas de forma obligatoria¡±, indica Alfred Giner, jefe de la secci¨®n de Postgrado de la Universitat de Val¨¨ncia. La norma, explica, no ampara el blindaje voluntario. La confidencialidad solo se justifica cuando se trata de proteger una patente o un descubrimiento cient¨ªfico. No es el caso de Camps. Solo tres de las 409 tesis le¨ªdas en la Universitat de Val¨¨ncia en 2014 estaban protegidas.

En la Universitat Aut¨°noma de Barcelona (UAB), donde el pasado a?o se defendieron 600 tesis, reiteran la idea que manejan las cinco universidades consultadas: ¡°Los trabajos se hacen p¨²blicos s¨ª o s¨ª¡±. Un portavoz de la Secretar¨ªa de Estado de Investigaci¨®n (Ministerio de Econom¨ªa) se muestra tajante: ¡°Resulta inaudito que un estudiante oculte su tesis. Los textos se hacen para divulgarlos. Los doctores quieren ser citados por otros y que sus descubrimientos se recojan en libros y art¨ªculos¡±.

La tesis de Francisco Camps fue dirigida por el profesor de la Universitat de Val¨¨ncia Vicente Garrido Mayol, quien ocupa desde 2003 la presidencia del Consejo Jur¨ªdico Consultivo (CJC) de la Comunidad Valenciana. Camps design¨® a Garrido en el cargo. Y cuando el expresidente valenciano dimiti¨® de la Generalitat para sentarse en el banquillo por el caso G¨¹rtel entr¨® a formar parte del CJC como miembro nato de este organismo jur¨ªdico con un sueldo anual de 58.000 euros. Tambi¨¦n disfruta de coche oficial, despacho y secretaria.

El tribunal de cinco expertos que distingui¨® al pol¨ªtico con un sobresaliente cum laude inclu¨ªa tambi¨¦n al entonces presidente del CJC de Murcia, el catedr¨¢tico de Derecho Constitucional Mariano Garc¨ªa Canales, quien aterriz¨® en este puesto designado por la Asamblea regional controlada por el PP.

Cuando Camps ley¨® su tesis sobre la reforma del sistema electoral ¡ªdonde reclam¨® las listas abiertas en circunscripciones uninominales para elegir diputados, senadores y parlamentarios regionales¡ª dijo ser un ¡°hombre feliz¡±. ¡°Me encantar¨ªa poder ense?ar todo lo que he aprendido durante estos a?os¡±, a?adi¨®.

El expresidente inaugur¨® entonces su carrera como docente en la Universidad Cat¨®lica San Vicente M¨¢rtir, propiedad de una fundaci¨®n del Arzobispado de Valencia. El pasado curso particip¨® en un programa dirigido a preparar a candidatos a doctor en Derecho. Y este a?o forma parte de un equipo de 14 profesores de un postgrado en legislaci¨®n mar¨ªtima. Tambi¨¦n dirige el seminario permanente Grandes temas de actualidad.

El principal activo de la universidad privada que emplea a Camps es la carrera de Medicina. Su autorizaci¨®n lleg¨® en 2007 en una pol¨¦mica decisi¨®n del expresidente auton¨®mico. El pol¨ªtico lleg¨® a desafiar a los rectores valencianos y al Ministerio de Ciencia, entonces en manos del PSOE, para conseguir que el centro cat¨®lico impartiera el codiciado t¨ªtulo.

investigacion@elpais.es