¡°?A por ellos, Pedro! ?A por ellos!¡±
S¨¢nchez concentra su atenci¨®n en Barcelona, un granero de votos tradicionales del PSOE
El PSOE firm¨® su peor resultado en unas elecciones generales en 2011. La crisis, y su gesti¨®n por parte del Ejecutivo de Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, le hundieron de los 169 esca?os de 2008 a 110 asientos en el Congreso de los Diputados. Por el camino, adem¨¢s del Gobierno, Ferraz se dej¨® 4,3 millones de votos. De los 11,3 millones en la segunda y ¨²ltima legislatura de Zapatero ¡ªr¨¦cord de sufragios en las 11 generales celebradas desde 1977, con seis victorias socialistas¡ª se desmoron¨® hasta los siete millones. Con un mapa te?ido de azul y el PP marcando las reglas del tablero con su mejor resultado (10,9 millones), el hundimiento de los socialistas no fue mayor gracias a Sevilla (41,7%, seis diputados) y Barcelona (27,8%, 10 esca?os). Con la excepci¨®n de las otras tres provincias catalanas, donde se impuso CiU, de Bizkaia (PNV) y de Guip¨²zcoa (Amaiur), el PP barri¨® a los socialistas en el resto de provincias.
Cuatro a?os despu¨¦s, con un PSOE que contin¨²a lejos de su mejor momento, achicado su h¨¢bitat por Ciudadanos y Podemos por cada extremo, el ¨²ltimo bar¨®metro del CIS otorga a los socialistas entre cinco y seis diputados en Barcelona. Uno m¨¢s que en Sevilla. Unos pron¨®sticos que reflejan que, aunque el PSC no est¨¦ en su momento m¨¢s boyante, Barcelona se mantiene ¡ªpese a que sus votantes sean los m¨¢s codiciados por los emergentes¡ª como uno de los graneros socialistas.
"No ten¨ªamos que habernos juntado con los de Esquerra Republicana en el tripartito. Pero ya est¨¢, ya hemos aprendido la lecci¨®n y es hora de volver a ser los referentes en cuanto a derechos sociales se refiere", se calienta Carlos Guti¨¦rrez, pensionista de 70 a?os nacido en Almer¨ªa, que "nunca" ha dejado de votar "al pu?o y a la rosa". "Soy charnego a mucha honra, ya est¨¢ bien con concesiones a los independentistas", proclama, dando la vuelta al t¨¦rmino despectivo con el que se denomina a los espa?oles que se instalaron en Catalu?a?en las ¨²ltimas d¨¦cadas procedentes de otras zonas de Espa?a.
"Hubo gente que no entendi¨® el pacto con Esquerra, pero hay que tener muy en cuenta que entonces no quer¨ªa la independencia", observa Miquel Iceta, secretario general del PSC-PSOE. Fuera por lo que fuera, los socialistas perdieron 600.000 votos en 2011 en Barcelona (de 1,3 millones a 700.000). Aun as¨ª, repitieron en cabeza con una victoria apurada sobre CiU, a la que sacaron 16.000 votos. La resistencia de Barcelona, en la noche m¨¢s negra de los socialistas, no evit¨® lo que fue un triunfo hist¨®rico de Converg¨¨ncia i Uni¨®, que por vez primera gan¨® unas elecciones generales en Catalu?a.
La reflexi¨®n de Iceta se produce durante un paseo por Nou Barris, barrio de clase obrera y con mayor¨ªa de residentes de origen andaluz o extreme?o. "Estamos en una plaza de referencia para los socialistas, aunque ahora sea un territorio en disputa", concede Iceta. Unos pasos por delante, Carmen Chac¨®n, secretaria de Relaciones Internacionales del PSOE y cabeza de lista al Congreso por Barcelona, no se separa de Pedro S¨¢nchez. El secretario general del partido y candidato a la Presidencia del Gobierno defendi¨® el proyecto del PSOE en un entorno repleto de ciudadanos que se instalaron en Catalu?a hace d¨¦cadas.
"?A por ellos, Pedro! ?A por ellos!", le jale¨® Emilio Ruiz, que naci¨® hace 75 a?os en el valle de los Pedroches, al norte de C¨®rdoba. Los contendientes eran todos: PP, Artur Mas, Ciudadanos, Podemos... Pero sobre todo el presidente de la Generalitat. "Me vine de C¨®rdoba con 18 a?os y mire, lo de los ¨²ltimos a?os no puede ser. Artur Mas no tiene verg¨¹enza, no solo por el proceso para la independencia. ?Mientras se habla de eso se ignora que implant¨® el copago! ??l empez¨® y luego le siguieron en Madrid!", recalc¨® el jubilado.
Don Emilio reconoce que en su entorno abundan quienes se movilizan para votar al PSOE en las generales y no se muestran tan activos cuando toca concurrir a las urnas en las auton¨®micas. Se trata de una peculiaridad de Catalu?a que se conoce como el voto dual. "Hablamos de un voto m¨¢s vol¨¢til, de gente que no participa en las elecciones catalanas. Sobre todo es gente que procede de fuera de Catalu?a", explica Sim¨®n. "Tiene que ver tambi¨¦n con que voten en las auton¨®micas a otro partido y en las generales al PSOE... Ahora mismo, el tema catal¨¢n es un laboratorio en efervescencia", entiende Paloma Rom¨¢n, directora del Departamento de Ciencia Pol¨ªtica y de la Administraci¨®n II de la Universidad Complutense.
La polit¨®loga diferencia entre el voto combinado a Manuela Carmena (alcaldesa de Madrid por Ahora Madrid) y ?ngel Gabilondo (candidato a la Comunidad de Madrid por el PSOE) en las elecciones locales y regionales de mayo pasado. "En Barcelona no se puede producir porque no coinciden las municipales y auton¨®micas. La no coincidencia en fecha y hora tambi¨¦n influye, el votante hace una diferenciaci¨®n m¨¢s calibrada en el caso de Catalu?a. Se vota a conciencia. En Madrid, en cambio, fue m¨¢s un voto con el est¨®mago, de 'venga, me lanzo".
"?Peeeeedrooooo!". Isabel Mart¨ªn, de 54 a?os "y oriunda de Catalu?a", no para hasta que capta la atenci¨®n del candidato en su paseo por el Mercat de la Guineueta. S¨¢nchez acudi¨® a su establecimiento, Karn¨ªpolis, en el coraz¨®n del mercado, atra¨ªdo por las llamadas de atenci¨®n procedentes del establecimiento. "?Que soy militante!", r¨ªe Mart¨ªn, de padres andaluces. En su caso, de Osuna, en Sevilla. "Somos una familia socialista, el PSOE ha hecho mucho bien por Espa?a, aunque tambi¨¦n se hayan equivocado", cuenta antes de centrarse de nuevo en la clientela.
Mientras S¨¢nchez no reparaba en besos, abrazos, selfies y m¨¢s besos, en uno de los accesos al mercado, simpatizantes de Ciudadanos repart¨ªan propaganda bajo una p¨¦rgola naranja que captaba la atenci¨®n a una manzana larga de distancia. "Los nuevos est¨¢n muy bien, ?pero qu¨¦ experiencia tienen? Hay que reconocer la labor del PSOE, y el mozo este, Pedro, tiene pinta de buena gente", dice Antonia Garc¨ªa, de 75 a?os. Se niega a coger un panfleto de Ciudadanos, mientras un grupo de j¨®venes s¨ª los recoge. Celia Lomo, de 66 a?os y extreme?a de Herv¨¢s, en C¨¢ceres, interviene y reconoce que "se est¨¢ pensando" votar a S¨¢nchez. "Me gusta, me recuerda a Felipe [Gonz¨¢lez]. A Zapatero no le vot¨¦, pero a este yo creo que s¨ª", se despide.
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