El caso de los discos duros de B¨¢rcenas vuelve a la juez

El caso de los discos duros de los ordenadores que el entonces tesorero del PP Luis B¨¢rcenas usaba en la sede nacional del partido, que fueron destruidos tras el despido de aquel y mientras el juez Pablo Ruz investigaba la caja b de la formaci¨®n conservadora, vuelve a ser un quebradero de cabeza para G¨¦nova 13. La Audiencia Provincial de Madrid ha ordenado la reapertura de la causa sobre la eliminaci¨®n de estas posibles pruebas, despu¨¦s de que la juez la archivara en octubre de 2013 sin haber realizado ninguna indagaci¨®n.

La Secci¨®n Cuarta de la Audiencia Provincial orden¨® este viernes a la titular del Juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 32 de Madrid, Mar¨ªa Esperanza Collazos, que reabra la causa sobre la destrucci¨®n y borrado de los discos duros de los ordenadores de B¨¢rcenas, al considerar ¡°prematura¡± la decisi¨®n de la magistrada de archivarla provisionalmente.

El juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz, entonces instructor del caso de los papeles de B¨¢rcenas, sobre la contabilidad secreta del PP, decidi¨® poner en conocimiento de los juzgados de Madrid, con sede en la Plaza de Castilla, la destrucci¨®n de los discos duros de los ordenadores que el tesorero usaba en la sede nacional del partido, en la calle de G¨¦nova, n¨²mero 13 de Madrid. El instructor apreciaba ¡°relevancia penal¡± en la eliminaci¨®n de las posibles pruebas y apuntaba dos tipos penales: encubrimiento y da?os inform¨¢ticos.

La juez Collazos dio carpetazo a la investigaci¨®n en octubre de 2013, sin haber realizado ning¨²n tipo de averiguaci¨®n sobre los hechos, al entender que el delito de encubrimiento por destrucci¨®n de pruebas ¡°no existe¡±. La magistrada basaba su decisi¨®n en que en la causa sobre los papeles de B¨¢rcenas ¡ªla contabilidad secreta del PP¡ª ¡°no se ha probado ning¨²n delito¡± que pueda ser encubierto.

En cuanto al delito de da?os, Collazos dio la siguiente explicaci¨®n: los ordenadores eran del PP y no de B¨¢rcenas, como recoge una resoluci¨®n de otro juzgado, el 21, de Plaza de Castilla. Y como el delito de da?os solo es aplicable a los bienes ajenos, el delito no existe en este caso.

Decisi¨®n recurrida

La decisi¨®n de la juez fue recurrida por varias de las partes personadas en el caso B¨¢rcenas, entre ellas Izquierda Unida y UPyD, que hab¨ªan pedido a la juez Collazos que realizara diversas averiguaciones. La Audiencia Provincial de Madrid en su resoluci¨®n de los recursos rebate las teor¨ªas de la juez Collazos y le ordena que se pronuncie sobre las peticiones de las acusaciones, lo que no hizo cuando archiv¨® la causa.

Sobre el delito de encubrimiento, el tribunal comparte que para que se produzca tiene que estar probada, mediante sentencia, la conducta que se quer¨ªa tapar, en este caso la existencia de una caja b en el PP. Sin embargo, nada impide investigar mientras tanto la acci¨®n del encubridor.

Respecto al delito de da?os, el tribunal discrepa tambi¨¦n de Collazos. La Audiencia Provincial no discute que los ordenadores pertenec¨ªan al Partido Popular, pero entiende que los ficheros almacenados en el disco duro pueden ser de otras personas, extremo que no se ha investigado. ¡°No disponemos de tal informaci¨®n, que debe ser judicialmente recabada pues puede ser relevante para determinar fundadamente la existencia de la responsabilidad penal¡±, afirma el tribunal.

La Audiencia a?ade que tambi¨¦n debe investigarse ¡°qui¨¦n, en la organizaci¨®n del Partido Popular, orden¨® o acord¨® la destrucci¨®n de los discos duros utilizados¡± por B¨¢rcenas. Esta eliminaci¨®n se produjo, recuerda la Secci¨®n Cuarta, ¡°en un momento temporal en el que era p¨²blico y notorio, dado su impacto medi¨¢tico, que [el extesorero] estaba siendo sometido a investigaci¨®n penal por graves delitos cometidos con ocasi¨®n del desarrollo de su actividad laboral¡±.