Las conversaciones de yihadistas en la c¨¢rcel muestran su radicalismo
223 reclusos son analizados por expertos dentro del Programa de Prevenci¨®n de la Radicalizaci¨®n en las prisiones
El recluso es uno de los cabecillas de la c¨¦lula que operaba hasta junio de 2013 en Ceuta para mandar yihadistas a Siria e Irak. Le han condenado a 12 a?os por reclutar y enviar a aproximadamente un centenar de combatientes al autodenominado Estado Isl¨¢mico (ISIS). La polic¨ªa sabe que al menos seis de esos muyahidines enviados desde Espa?a murieron matando a decenas de personas en ataques suicidas. El interno habla ahora por tel¨¦fono con su mujer desde la prisi¨®n. Le pregunta por sus hijos y por c¨®mo se vive su detenci¨®n en su entorno. Le dice que est¨¢ preocupado por su madre, que vive en Siria¡ Los 94 presos ligados al terrorismo islamistas que hay hoy en las c¨¢rceles Espa?olas, seg¨²n los ¨²ltimos datos de Instituciones Penitenciarias, son los m¨¢s vigilados, seguidos y analizados.
Adem¨¢s de formar parte del Fichero de Internos de Especial Seguimiento (FIES), desde julio de 2014 est¨¢n incluidos en un Programa de Intervenci¨®n y Prevenci¨®n espec¨ªfico para prisiones en contra de la radicalizaci¨®n, que se concreta en un bolet¨ªn semanal elaborado por un equipo multidisciplinar de especialistas. En ¨¦l se da cuenta de los comportamientos y actitudes de estos internos con informaci¨®n de confidentes que forman parte de la poblaci¨®n carcelaria, funcionarios, llamadas intervenidas a familiares, conversaciones con otros presos¡ Todos los datos recabados se estudian y archivan para prevenir procesos de radicalizaci¨®n dentro de la c¨¢rcel y fuera: no dejan de vigilarse las relaciones que mantienen con el exterior antes y despu¨¦s de salir, ante la posible comisi¨®n de actos terroristas o de apoyo al terrorismo una vez en libertad.
¡°?Por qu¨¦ has salido de casa?¡±, le pregunta otro de los reclusos a su mujer en una conversaci¨®n telef¨®nica en la que ella le cuenta desde Melilla que ha habido un terremoto. ¡°No debes salir, deben cumplirse los designios de Al¨¢, no vuelvas a hacerlo¡±. A ra¨ªz de los ¨²ltimos atentados de Bruselas se oyen entre los muros de las prisiones cosas como: ¡°Todos los j¨®venes musulmanes tendr¨ªan que pensar como los que han puesto esas bombas al ver lo que nos est¨¢n haciendo en Siria¡± o ¡°qu¨¦ pueden esperar, si est¨¢n bombardeando Siria¡±. ¡°A m¨ª me ayudaba a vender hach¨ªs¡±, dice uno al referirse al islamista argelino detenido en Italia por facilitar documentaci¨®n falsa a los terroristas de Bruselas.
Las mujeres ganan protagonismo entre rejas
Fuentes de Instituciones Penitenciarias aseguran que las mujeres han ganado protagonismo en las c¨¢rceles en los ¨²ltimos tiempos, convertidas muchas veces en gestoras de las c¨¦lulas yihadistas ¡ªcomo captadoras y/o reclutadoras¡ª y como apreciadas procreadoras en el autodenominado Estado Isl¨¢mico. En general, los reclusos islamistas en las prisiones espa?olas, generalmente hombres, tienen una media de edad de entre 19 y 35 a?os y la mayor¨ªa (el 80%) son de origen magreb¨ª (Marruecos y Argelia), sirios y paquistan¨ªes. Y mayormente con nacionalidad marroqu¨ª o espa?ola.
M¨¢s de la mitad est¨¢n casados y tienen hijos. Y la inmensa mayor¨ªa tiene residencia legal en Espa?a. La mayor parte son preventivos, aunque casi todos en r¨¦gimen cerrado. Con car¨¢cter general, los presos yihadistas carecen de beneficios penitenciarios.
El trabajo con estos presos, conscientes de que son vigilados y dispersados entre las c¨¢rceles espa?olas ¡ªque cuentan con una poblaci¨®n de unos 7.000 musulmanes¡ª, es complejo. Por eso no solo se act¨²a sobre ellos, sino que se han creado otros dos grupos de control. As¨ª, en el grupo A estar¨ªan esos 94 preventivos o penados por participar en actividades yihadistas. En el grupo B hay 34 ¡°potencialmente radicalizadores¡±. Internos que est¨¢n encarcelados por otros motivos pero que pueden ejercer de reclutadores o captadores ¡°por sus dotes de liderazgo, porque tienen experiencia en conflictos militares, porque son respetados internamente, o porque muestran profundos conocimientos de su religi¨®n y de la historia de sus tradiciones¡±. Act¨²an con individuos aislados o grupos reducidos y disponen de una capacidad econ¨®mica que les convierte en facilitadores de recursos, se?alan los expertos.
En el grupo C hay 95 miembros controlados por ser susceptibles de ser captados. ¡°Son reclusos que muestran una visi¨®n excluyente y totalitaria de su religi¨®n, personas decepcionadas, con un proyecto de vida frustrado, solitarios, inseguros. Gente seducible con proclamas que responsabilizan a Occidente de todos sus males¡±, explican.
Fuera de la prisi¨®n se controla a los imanes que entran y salen para cumplir labores pastorales. Al igual que se sigue a presos como Rafa Zouhier, c¨®mplice del 11-M, que quedan en libertad (16 de marzo de 2014) y se les expulsa y se les pone directamente en la frontera, como dicta la ley.
Cuando se puso en marcha el programa hace casi dos a?os, en el grupo A hab¨ªa 45 personas; en el B, 9; y en el C, 33. El incremento, seg¨²n los expertos, tiene que ver con el tiempo de observaci¨®n y con el mayor n¨²mero de detenciones que se han producido en ese tiempo (46 en 2014, 102 en 2015 y 14 en lo que va de a?o).
El ¨¦xito y el resultado del programa est¨¢n a¨²n por ver. Pero el secretario general de Instituciones Penitenciarias, ?ngel Yuste, hace una lectura positiva de su implantaci¨®n. Y pone como ejemplo ¡°el hecho de que los ¨²ltimos detenidos por yihadismo no se hayan radicalizado en prisi¨®n¡±. Y se?ala que se han desactivado c¨¦lulas con informaci¨®n obtenida en el medio penitenciario. Incluso se ha detenido a presos en prisi¨®n, como el pasado 23 de noviembre, cuando A. Chiakhi, de 42 a?os y entre rejas por violencia de g¨¦nero, le acusaron de captar a internos que estaban a punto de salir para que se unieran al ISIS. Seg¨²n Yuste, ¡°todo ello demuestra que se puede actuar de manera coordinada para evitar atentados¡±.
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