La d¨¦cada que so?¨® con el fin de los accidentes mortales en carretera
De 2001 a 2010 la cifra anual de fallecidos se redujo a menos de la mitad. El carn¨¦ por puntos y la reforma del C¨®digo Penal contribuyeron en gran medida a ese descenso
Los a?os 80 se despidieron con un saldo terrible: en 1989 murieron casi 6.000 personas en las carreteras. Con toda certeza, la cifra real fue mayor, pero en aquella ¨¦poca solo se contabilizaban las v¨ªctimas que fallec¨ªan en las primeras 24 horas despu¨¦s del accidente, y no hasta 30 d¨ªas despu¨¦s, como comenz¨® a hacerse en 1993. Los n¨²meros de v¨ªctimas fueron aflojando en los primeros 90, pero repuntaron hacia el final de esa d¨¦cada.
Espa?a entr¨® en el nuevo milenio con unas cifras a¨²n altas de muertos en carretera: 144 cada mill¨®n de habitantes (en 2016 fue de 39). La Uni¨®n Europea hab¨ªa activado un programa de actuaci¨®n vial, pero sus efectos no se hicieron notar apenas en Espa?a. En 2003 la tasa hab¨ªa descendido algo con respecto a 2001, aunque solo hasta los 133 muertos por cada mill¨®n de habitantes. Y las cifras de heridos incluso hab¨ªan aumentado. Se adoptaban medidas legales para restringir la actividad peligrosa al volante, pero como concluye un estudio espec¨ªfico de etapa, no se las dotaba de recursos suficientes para hacerlas efectivas.
En sus primeros 18 meses, el carn¨¦ por puntos salv¨® a 3.773 personas de ser v¨ªctimas graves de accidentes
En 2004 el nuevo Gobierno, del PSOE, designa a Pere Navarro como director de la DGT. La seguridad vial se establece como prioridad pol¨ªtica. Nace el Plan Estrat¨¦gico de Seguridad Vial 2005-2008, que planteaba reducir un 40% el n¨²mero de v¨ªctimas mortales y otras 28 medidas (entre ellas, reducir los heridos graves, tambi¨¦n de accidentes con v¨ªctimas, el n¨²mero de menores fallecidos, de peatones, salidas de v¨ªa en carretera, los puntos negros...). Al final la cifra qued¨®, en esos a?os, en un 30% de reducci¨®n del n¨²mero de muertos, pero la tendencia a la baja iniciada entonces se extendi¨® hasta 2014.
Un an¨¢lisis cient¨ªfico quiso encontrar, en mitad de los gr¨¢ficos puntiagudos de muertos mes a mes (v¨¦ase el gr¨¢fico que encabeza este reportaje), en qu¨¦ se tradujeron las medidas estrella adoptadas en aquel periodo. "Tres factores fueron clave en el ¨¦xito de aquella ¨¦poca: el permiso por puntos, la intensificaci¨®n de las medidas de vigilancia y sanci¨®n, y la presencia masiva de la seguridad vial en medios de comunicaci¨®n", resume Francisco Aparicio, presidente del Instituto de Investigaci¨®n del Autom¨®vil (INSIA), de la Universidad Polit¨¦cnica de Madrid, el centro donde se realiz¨® el estudio.
2004. Arranca la ¨¦poca de los radares
La primera gran medida fue una suma de actuaciones: aumentaron los equipos de control de velocidad (los de radar crecieron un 26% solo en aquel a?o), subieron los controles de alcoholemia, del uso del caso y de los sistemas de retenci¨®n, y se impulsaron campa?as medi¨¢ticas. Aquellos pasos redujeron las defunciones entre un 12,5% y un 13,1%, en los c¨¢lculos del INSIA. Uno de cada cuatro accidentes mortales derivaba de los excesos de velocidad en 2005. Tr¨¢fico apost¨® ese a?o por aumentar a¨²n m¨¢s los controles por radar: se propuso instalar 500 dispositivos fijos hasta 2007. Las cr¨ªticas por un supuesto af¨¢n recaudatorio acuciaron. En 2007 comenzaron a instalarse los primeros radares m¨®viles en helic¨®pteros y tambi¨¦n ese a?o llegaron los dispositivos "fantasma": solo un tercio de los 175 puntos de control instalados en ese ejercicio inclu¨ªan dentro de sus cajas un cinem¨®metro de verdad. En 2009, Tr¨¢fico sac¨® a las carreteras 264 dispositivos m¨®viles para controlar casi 2.000 tramos.
2006. Permiso por puntos
El carn¨¦ por puntos, una medida de 2006, logr¨® una reducci¨®n de entre el 11,3% y el 13,9%, que fue a¨²n mayor en los meses de julio y agosto (10 puntos porcentuales m¨¢s). La medida entr¨® en vigor en julio de 2006, pero sus beneficios se notaron al menos seis meses antes. El debate p¨²blico sobre la medida, instaurada en otros pa¨ªses europeos a?os atr¨¢s, hab¨ªa puesto sobre aviso a los conductores y muchos levantaron el pie del acelerador antes de que llegaran las penalizaciones. Un estudio liderado por la Ag¨¨ncia de Salut P¨²blica de Barcelona concluy¨® que el carn¨¦ por puntos reduc¨ªa m¨¢s de 11% el riesgo de resultar herido grave en las colisiones en carretera. En los primeros 18 meses tras su implantaci¨®n, se pudieron salvar de resultar heridas graves 3.773 personas.
El investigador Roberto Pereira, de la Universidad de Vigo, cree que el ¨¦xito de la medida fue de la mano del aumento de la vigilancia en carretera. "La Guardia Civil ten¨ªa una buena calidad operativa para haber instaurado ese carn¨¦ por puntos mucho antes en Espa?a. El carn¨¦ por puntos tard¨® demasiado", se?ala. Estudi¨® la importancia de la vigilancia en las medidas. En esos a?os, aument¨® con mucho la presencia de los agentes de tr¨¢fico del instituto armado en la carretera, hasta superar los 10.100 en 2010, su m¨¢ximo m¨¢s reciente.
2007. Reforma del C¨®digo Penal
Tambi¨¦n se adelantaron los efectos, pero solo un mes, de la reforma del C¨®digo Penal de noviembre de 2007, que endureci¨® mucho la penalizaci¨®n por delitos de tr¨¢fico. Cuando la pena impuesta superase los dos a?os, se retirar¨ªa para siempre el permiso de conducir. Se introduc¨ªan dos nuevos delitos de conducci¨®n peligrosa por exceso notable de velocidad y por superar en mucho los l¨ªmites de alcoholemia. Se persegu¨ªa la "conducci¨®n suicida", que pasa de conllevar de uno a cuatro a?os a pasar de dos a cinco. El INSIA cree que sus efectos redujeron la mortalidad entre un 17,8% y un 20,7%.
Ana Novoa, investigadora de la Ag¨¨ncia de Salut P¨²blica de Barcelona, analiz¨® el efecto en el n¨²mero de conductores involucrados en una colisi¨®n y en el n¨²mero de personas lesionadas de tr¨¢fico. Durante los 13 meses del per¨ªodo analizado, se pudieron evitar 9.789 hombres y 2.114 mujeres de ser lesionados por tr¨¢fico.?
La llegada de la crisis econ¨®mica a partir de 2008 y la reducci¨®n de los desplazamientos redujo a¨²n m¨¢s, a partir de entonces, el n¨²mero de v¨ªctimas mortales.