La sentencia de La Manada desata una tormenta pol¨ªtica y social
El caso cambia la agenda del Gobierno, salta al Parlamento Europeo y ha impulsado el Me too espa?ol
El fallo judicial de La Manada ha causado un enorme estruendo pol¨ªtico y social en Espa?a y ha llegado al Parlamento Europeo. A las movilizaciones multitudinarias del primer d¨ªa le han seguido la unanimidad de los partidos cuestionando la sentencia y la promesa del Gobierno de revisar el C¨®digo Penal. Una nueva protesta marc¨® en Madrid el Dos de Mayo con mujeres que coreaban: ¡°No es abuso, es violaci¨®n¡±. El caso ha impulsado una especie de Me too espa?ol: las redes sociales se han llenado de historias de mujeres que relatan abusos con la etiqueta Cu¨¦ntalo.
La cita era este mi¨¦rcoles a las 11.00 y para hacer ruido: ¡°Nos van a o¨ªr¡±, rezaba el cartel de la convocatoria informal que pas¨® de un m¨®vil a otro. Centenares de mujeres de distintas edades se juntaron en el centro de Madrid con camisetas y brazaletes morados y avanzaron hasta la Puerta del Sol, frente a la sede del Gobierno regional en la que se celebraba el Dos de Mayo, d¨ªa de la Comunidad de Madrid. La fiesta auton¨®mica m¨¢s importante de la regi¨®n estuvo protagonizada por las mujeres que protestaban en la calle, a escasos metros de los pol¨ªticos que asist¨ªan al desfile en una cita a la que no acudi¨® ninguno de los expresidentes auton¨®micos de Madrid del PP, salpicados o imputados por casos de corrupci¨®n.
¡°Qu¨¦ casualidad, qu¨¦ casualidad, que uno de ellos era militar¡±, gritaban las feministas mientras sonaba la marcha militar. Coreaban tambi¨¦n el ¡°No es abuso, es violaci¨®n¡± que han repetido en decenas de movilizaciones. Las primeras, apenas horas despu¨¦s de que, el pasado 26 de abril, la Audiencia Provincial de Navarra sentenciara que los cinco miembros de La Manada cometieron un delito de abuso sexual y no una violaci¨®n contra una joven en los Sanfermines de 2016. Fueron condenados a nueve a?os de prisi¨®n.
La comisi¨®n del Pacto de Estado se re¨²ne este jueves
El d¨ªa de la sentencia, con las protestas ya en las calles, el PSOE y Podemos pidieron una reuni¨®n urgente, que tendr¨¢ lugar hoy, de la comisi¨®n creada en el Congreso para controlar el cumplimiento del Pacto de Estado contra la Violencia de G¨¦nero, aprobado en septiembre. M¨¢s de 200 d¨ªas despu¨¦s de su aprobaci¨®n, no se ha celebrado ninguna reuni¨®n del acuerdo, que prev¨¦ cambios en la formaci¨®n de los jueces, ni el Gobierno ha liberado los 200 millones prometidos para el primer trimestre de 2018.
Los gritos de indignaci¨®n de las manifestantes irrumpieron en el acto solemne de forma inesperada, como lleva ocurriendo durante casi una semana con esta ins¨®lita movilizaci¨®n que ha capturado la atenci¨®n de otros pa¨ªses. Las reacciones a la sentencia de La Manada han desbordado a la clase pol¨ªtica y han cambiado el gui¨®n del Gobierno y de la oposici¨®n.
No estaba en los planes del Ejecutivo de Mariano Rajoy tocar el C¨®digo Penal, que recoge una tipificaci¨®n de los delitos contra la libertad sexual inamovible desde 1995. La jurisprudencia establece que para considerar la violaci¨®n tiene que haber violencia (una agresi¨®n f¨ªsica con fuerza) o intimidaci¨®n (una amenaza de un mal grave a la v¨ªctima para que ceda a la pretensi¨®n de los agresores), dos cosas que los jueces no vieron en el caso de La Manada. La indignaci¨®n social ha empujado al Gobierno a hacer un anuncio que a¨²n no se ha concretado.
Y, en este cambio de paso, el ministro de Justicia se sali¨® del camino. Rafael Catal¨¢ declar¨® esta semana que el magistrado que firm¨® el voto discrepante pidiendo la absoluci¨®n de los cinco acusados, Ricardo Gonz¨¢lez, ¡°tiene alg¨²n problema singular¡±. Tir¨® la piedra y escondi¨® la mano: no ha aclarado cu¨¢l es ese problema ni si afecta a su trabajo como juez.
El PP y el Gobierno han evitado respaldar a Catal¨¢. Y su declaraci¨®n consigui¨® la unanimidad de todas las asociaciones de jueces y fiscales criticando la intromisi¨®n.
Salto internacional
La pol¨¦mica ha dado tambi¨¦n un salto internacional. Ayer se traslad¨® a Bruselas, donde el Parlamento Europeo debati¨® ¡°la aplicaci¨®n por parte de Espa?a de los est¨¢ndares internacionales sobre violencia sexual a ra¨ªz de la sentencia de La Manada¡±. El debate lo impuls¨® Podemos, con la oposici¨®n del PP y el apoyo del PSOE. La formaci¨®n de Pablo Iglesias busca una definici¨®n legal m¨¢s clara de la violaci¨®n que incluya toda relaci¨®n sexual no consentida. Un comunicado de la responsable de la ONU para la Mujer, Purna Sen, referido a los delitos sexuales en todo el mundo, dedicaba tambi¨¦n ayer unas l¨ªneas al caso de La Manada, afirmando que la sentencia ¡°subestima la gravedad de la violaci¨®n¡±.
Casi 1.800 psic¨®logos y psiquiatras espa?oles se sumaron a las cr¨ªticas con una carta en la que explican que el bloqueo de la v¨ªctima es normal en una situaci¨®n de p¨¢nico y reclaman que no se ponga el foco en la v¨ªctima en los procesos judiciales ni se cuestione el hecho de que intenten recuperar su vida tras el trauma, algo que hizo en un momento dado del juicio la defensa de algunos de los acusados de La Manada, aunque no lo hace la sentencia.
La misiva de los psic¨®logos y psiquiatras se gest¨® en las redes sociales. Igual que el movimiento promovido por la periodista Cristina Fallar¨¢s con la etiqueta Cu¨¦ntalo. ¡°Tenemos que contar las agresiones, violaciones, compa?eras. Este relato nos lo han hurtado. Debemos construirlo para que otras reconozcan¡±, ped¨ªa Fallar¨¢s el mismo d¨ªa que se conoci¨® el fallo. Centenares de mujeres han compartido desde entonces historias de abusos y agresiones sexuales.
Entre ellas, la concejal de Igualdad y Pol¨ªticas Inclusivas de Valencia, Isabel Lozano, que relat¨® que sufri¨® abusos sexuales con 10 a?os por parte de un profesor de k¨¢rate. ¡°Es necesario visibilizar toda esta historia de la infamia que hemos llevado en nuestras vidas, cada una de manera individual y sin poner demasiado en com¨²n¡±, explic¨® Lozano a la Cadena SER. O la exdiputada de Coalici¨®n Canaria y exviceconsejera del Gobierno canario Dulce Xerach, que cont¨® que sufri¨® abuso sexual y de poder de un pol¨ªtico que a¨²n se encuentra en activo.
El movimiento feminista ha convocado para ma?ana una nueva manifestaci¨®n en Madrid con el lema Stop cultura de la violaci¨®n. Aseguran que sus protestas no quedar¨¢n ah¨ª.
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