Colau niega la violencia y socorre a los pol¨ªticos presos: ¡°Se me parte el alma¡±
La alcaldesa dice que exigi¨® al delegado del Gobierno detener ¡°las brutales cargas policiales¡± del 1-O
A Ada Colau se la acusa a menudo de equidistancia, de mantenerse en una tercera v¨ªa que no acaba de agradar a unos ni a otros, como cuando se opuso por igual a la declaraci¨®n unilateral de independencia (DUI) y a la aplicaci¨®n del art¨ªculo 155 de la Constituci¨®n. Este martes, sin embargo, ha salido en apoyo expl¨ªcito de los 12 dirigentes independentistas procesados por el Tribunal Supremo. ¡°Se me parte el alma vi¨¦ndoles en prisi¨®n¡±, ha declarado la alcaldesa de Barcelona, que ha negado la violencia del proc¨¦s pese no haber sido testigo directo de algunos de los hechos.
¡°Si por el 1-O estamos aqu¨ª, entonces deber¨ªamos estar millones de personas¡±, ha dicho Colau, que ha hecho una defensa cerrada de la gran ¡°movilizaci¨®n¡± que fue el refer¨¦ndum de independencia del 1 de octubre de 2017. Colau ha interpretado a su manera aquella jornada al definirla como una enorme ¡°movilizaci¨®n pac¨ªfica¡± que tuvo m¨¢s que ver con ¡°la defensa de derechos fundamentales¡± que con la independencia. ¡°El 1-O no fue de ninguna instituci¨®n ni partido, sino de la gente. Fueron millones de personas autorganizadas¡±, ha detallado en una breve declaraci¨®n de apenas media hora.
¡°Maravillada¡± por la respuesta de la gente, Colau ha rescatado su vieja faceta de activista -lider¨® la Plataforma de Afectados por la Hipoteca- para comparar aquellas luchas contra los desahucios con los votos del 1-O. ¡°Se puede trazar un paralelismo con cuestiones de desobediencia civil¡±, ha afirmado a preguntas de la defensa de Jordi Cuixart, el presidente de ?mnium Cultural, al que ha aprovechado para loar sin remilgos. ¡°Es una persona muy pac¨ªfica, de consensos, dialogante y muy querida en la ciudad¡±.
¡°Brutales cargas¡±
Colau particip¨® en la consulta ilegal ¡°como ciudadana y alcaldesa¡±. Hizo tres horas de cola para votar en el instituto La Sedeta. Y fue all¨ª, bajo una nube de paraguas en una jornada lluviosa, donde empezaron a llegarle ¡°noticias horribles¡± sobre ¡°cargas policiales brutales¡±, aunque no fue testigo directo de ninguna intervenci¨®n de la Polic¨ªa. Aquel d¨ªa, pidi¨® p¨²blicamente que se detuvieran las cargas y exigi¨® la dimisi¨®n de Mariano Rajoy por haber ¡°traspasado todas las l¨ªneas rojas¡±.
Como testigo, ha detallado las gestiones que hizo para poner fin a la actuaci¨®n policial. ¡°Llam¨¦ al delegado del Gobierno, Enric Millo [PP] y le exig¨ª que pararan las cargas policiales. Por la tarde, pararon¡±. La alcaldesa ha dado por buena la cifra que manejan las defensas sobre el n¨²mero de ciudadanos heridos aquel d¨ªa (un milllar) y ha sacado pecho por las actuaciones del Ayuntamiento de Barcelona aquellos d¨ªas: el Consistorio ¡°apoy¨® la movilizaci¨®n¡± del 1-O, se sum¨® al ¡°paro de pa¨ªs¡± del 3 de octubre -¡°hab¨ªa una sensaci¨®n de dolor y de indignaci¨®n muy amplias¡±- y ejerce la acusaci¨®n contra unos 30 mandos policiales investigados en un juzgado de Barcelona por las cargas.
La violencia policial que vio el 1-O no la apreci¨®, sin embargo, el 20 de septiembre de 2017, durante las protestas contra los registros judiciales en el Departamento de Econom¨ªa. Colau tampoco fue testigo directo de esos hechos (solo de referencia, por lo que le contaban miembros de su Gobierno que s¨ª estaban all¨ª) pero ha defendido que fue una ¡°movilizaci¨®n pac¨ªfica¡±. Los registros se produjeron en una situaci¨®n ¡°de excepcionalidad¡± y de ¡°alarma social¡±.
El abogado de Vox, Javier Ortega-Smith ¡ªColau ha manifestado su ¡°incomodidad¡± por tener que responder a un ¡°grupo de extrema derecha¡± ¡ªle ha mencionado un tuit que escribi¨® poco antes de las 9.00 del 20-S. ¡°Es un esc¨¢ndalo democr¨¢tico que se registren instituciones y se detengan cargos p¨²blicos por motivos pol¨ªticos. Defendamos las instituciones catalanas¡±, escribi¨® entonces la alcaldesa.
Colau cedi¨® ocho locales municipales para votar en el refer¨¦ndum
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