Un informe policial se?ala a una de las espa?olas del ISIS por ¡°alentar¡± a otros a viajar a Siria
Otra de las mujeres, calificada como "l¨ªder" de las esposas de una c¨¦lula yihadista desmantelada
Las sospechas contra Yolanda Mart¨ªnez, una de las tres espa?olas del ISIS localizadas en el campo de retenci¨®n de Al Hol (Siria) y esposa de un reclutador yihadista de la c¨¦lula Al Andalus, parten de una carta que envi¨® a la mujer de otro islamista condenado por pertenecer a ese mismo grupo, asentado en Espa?a. En un documento policial, al que tuvo acceso EL PA?S, los investigadores concluyeron que esa misiva "probablemente se escribi¨®" para "alentar" a otros miembros de la c¨¦lula a viajar a Siria. La Fiscal¨ªa ha solicitado informes a Interior.
Tras recibir la petici¨®n del ministerio p¨²blico, la polic¨ªa ya ha comenzado a escudri?ar el pasado de Mart¨ªnez, seg¨²n fuentes de las Fuerzas de Seguridad. Esta mujer nacida en el madrile?o barrio de Salamanca, de 34 a?os y con cuatro hijos, consta en una investigaci¨®n impulsada por la Audiencia Nacional que permiti¨® desmantelar en junio de 2014 a esta c¨¦lula yihadista encargada de reclutar y enviar combatientes a la guerra de Siria. Entre los desplazados a la zona de combate se encuentra su propio marido, Omar El Harchi, que viaj¨® con ella a este pa¨ªs en mayo de ese mismo a?o, seg¨²n detalla el sumario de la causa, donde se incluye un informe policial que se?ala a la esposa.
El documento, fechado el 9 de diciembre de 2014, explica que los polic¨ªas encontraron en el registro de la casa de otro miembro del grupo islamista, Mohamed Khalouk, una carta firmada por Mart¨ªnez donde dice que "ante el conflicto sirio no hay que quedarse est¨¢tico, sino pasar a la acci¨®n". En esa misiva se despide tambi¨¦n de su "hermanita" ¡ªla esposa de Khalouk, Aicha, era su amiga¡ª. "Por tanto, se puede concluir que la carta probablemente se escribi¨® con un doble prop¨®sito. Por un lado, el de alentar a los dem¨¢s miembros del grupo a unirse a la yihad. Y, por otro, el de despedirse de los dem¨¢s componentes del grupo [que quedaban en Espa?a]", recalcan los agentes.
La Fiscal¨ªa ha solicitado informes a las fuerzas de seguridad ¡ªno solo sobre Mart¨ªnez, sino tambi¨¦n sobre las otras dos espa?olas localizadas en Al Hol: Luna Fern¨¢ndez, viuda de otro miembro del grupo Al Andalus, y Lubna Miludi¡ª para estudiar si act¨²a contra ellas, que han mostrado su voluntad de regresar a Espa?a (dos de ellas) y a Marruecos (la tercera). A otras mujeres que han tratado de desplazarse hasta Siria para sumarse a las filas del autodenominado Estado Isl¨¢mico se les ha imputado e, incluso, condenado por el delito de pertenencia a organizaci¨®n terrorista.
En este caso, ante la posibilidad de exigirles responsabilidad penal, las preguntas que se plantean son varias. ?Eran conscientes de ad¨®nde viajaban? ?Lo hac¨ªan enga?adas por sus maridos? ?Sab¨ªan que iban a sumarse a los yihadistas? Preguntadas por EL PA?S, las tres afirmaron que desconoc¨ªan que sus maridos las llevaban a Siria. "Llegu¨¦ sin saberlo. Pero estaba muy contenta. Nos dieron una casa y a mi marido un trabajo en el juzgado del ISIS, haciendo recados. Por fin tuvimos una situaci¨®n estable econ¨®mica", dijo Mart¨ªnez, convertida al islam y radicalizada tras conocer a su marido, y quien asegura que su esposo nunca combati¨®. Frente a esa versi¨®n, los investigadores espa?oles dejaron claro en sus pesquisas que la intenci¨®n de El Harchi, considerado uno de los "l¨ªderes operativos" de la brigada Al Andalus, era "integrarse dentro de la organizaci¨®n terrorista". Adem¨¢s, seg¨²n admiti¨® su mujer, d¨ªas antes de que el ISIS perdiera su ¨²ltimo basti¨®n en Siria, el yihadista se entreg¨® a las milicias kurdo-¨¢rabes y permanece en una prisi¨®n controlada por estas.
Por tanto, ?hasta d¨®nde sab¨ªan las mujeres? En el mencionado informe policial y otros incluidos en el sumario, los investigadores recalcan en distintas ocasiones que varias esposas del grupo conoc¨ªan las intenciones de sus parejas y algunas trataban de disuadirlos. Entre ellas, Aicha, que manten¨ªa una "estrecha relaci¨®n" con Mart¨ªnez y sobre la que los agentes escriben que sab¨ªa perfectamente que la finalidad del viaje de su amiga no era otro "que hacer la yihad en el seno del Estado Isl¨¢mico". De hecho, destacan un mensaje que esta amiga envi¨® a Mart¨ªnez despu¨¦s de que contactara con su madre por tel¨¦fono desde Turqu¨ªa, parada previa a su entrada en Siria: "Llam¨¦ [a tu madre] porque quer¨ªa hablar conmigo. Le dije que no s¨¦ nada de ti". "Espero que, aunque no respondas, leas lo que escribo. Y haz las cosas con cabeza, no con el coraz¨®n. Porque te salen mal".
Un papel no tan ingenuo
Los investigadores que desmantelaron la c¨¦lula Al Andalus no otorgaron un papel tan ingenuo a las mujeres. Aunque algunas mostraron sus reticencias a viajar a Siria, los agentes detallan en otro informe que las esposas tambi¨¦n conformaban un "grupo" dentro del colectivo radicalizado. Seg¨²n la polic¨ªa, el papel de "l¨ªder" de este grupo lo desempe?¨® Luna Fern¨¢ndez, de 32 a?os y cuatro hijos, hasta que se desplaz¨® con su pareja al pa¨ªs de Oriente Pr¨®ximo. Aicha, la amiga de Yolanda Mart¨ªnez, la sustituy¨® entonces en esa funci¨®n: "Esta mujer es consentidora y copart¨ªcipe de la ideolog¨ªa extremista yihadista de su marido", escribieron sobre ella los efectivos de las fuerzas de seguridad espa?olas, que sospechaban que ese car¨¢cter radicalizado de Aicha explicaba que la c¨¦lula se reuniera en su casa.
Fern¨¢ndez, tambi¨¦n localizada en Al Hol, es la viuda de Mohamed Amin El Aabou, otra pieza clave de Al Andalus. La Audiencia Nacional consider¨® probado que, junto a El Harchi, formaba parte del "n¨²cleo operativo" del grupo, asumiendo labores de selecci¨®n, adoctrinamiento, integraci¨®n de nuevos miembros y financiaci¨®n. Pero ninguno de ellos, procesados y declarados en rebeld¨ªa, llegaron a ser juzgados. Ambos se marcharon a Siria con sus familias meses antes de que se lograra desmantelar la c¨¦lula. "No he hecho nada. Si realmente en Espa?a la ley juzga con claridad, ?por qu¨¦ van a mandar a prisi¨®n a una mujer que ha sufrido tanto y ha estado en casa con sus hijos?", se defiende Yolanda Mart¨ªnez. "Yo soy musulmana y no voy a renegar de mi religi¨®n y como muchos pa¨ªses hacen sus leyes, Al¨¢ ha hecho una ley y ¨¦l sabe, nosotros no sabemos", a?ade Luna Fern¨¢ndez. Las dos quieren regresar a Espa?a
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