C¨®mo evitar que la presi¨®n en el trabajo se convierta en estr¨¦s
La clave est¨¢ en romper el circulo vicioso de la rumiaci¨®n: conseguir dejar de preocuparte constantemente por eventos pasados o futuros
El estr¨¦s ya causa una de cada cuatro bajas en el trabajo y, junto con la ansiedad y la depresi¨®n, parece haberse convertido en la nueva epidemia laboral. Tener un trabajo exigente y sentir que tienes pocos recursos para afrontarlo es uno de los escenarios principales donde nace el estr¨¦s. Pero las personas tambi¨¦n se angustian cuando se les acumulan las tareas, tienen que tomar decisiones dif¨ªciles o encadenan proyectos sin descansar lo suficiente. En estas situaciones, lo que pasa es que los trabajadores han convertido la presi¨®n laboral en estr¨¦s, pero tiene soluci¨®n. Hay formas de conseguir que la presi¨®n juegue a nuestro favor y nos lleve a ser m¨¢s productivos.
Es clave entender que el estr¨¦s no depende objetivamente de las cosas que te pasen o de personas externas, sino de c¨®mo reaccionas ante estas circunstancias. En el trabajo, muchos empleados culpan de su ansiedad a su jefe, a sus tareas, a las fechas l¨ªmite... Pero varias personas que se enfrentan a lo mismo consiguen gestionar la presi¨®n de forma diferente. Lo que para uno es insoportable para otro puede ser un motivo para crecer.
Es clave entender que el estr¨¦s no depende objetivamente de las cosas que te pasen o de personas externas, sino de c¨®mo reaccionas ante estas circunstancias.
?De qu¨¦ depende esto? B¨¢sicamente de lo que pienses sobre lo que te est¨¢ pasando: puedes percibirlo como un reto o como una amenaza. As¨ª lo entiende Elisa S¨¢nchez, psic¨®loga laboral. "Hay personas que en los momentos de presi¨®n ven oportunidades para demostrar lo que saben y poner en marcha sus capacidades de afrontar de forma eficiente lo que les est¨¢ pasando", explica. Tambi¨¦n hay varios factores que influyen en tus pensamientos, como la autoestima y la seguridad que tengas en ti mismo.
Entonces que tener presi¨®n en el trabajo sea algo negativo o no depender¨¢ de c¨®mo la gestiones y pienses sobre ella. Te puede motivar y ayudar a concentrarte. "Yo es que trabajo mejor bajo presi¨®n". Pues eso. El problema viene cuando sientes que no tienes herramientas para hacer frente a todo lo que te piden: ah¨ª es cuando se convierte en estr¨¦s, sobre todo cuando las peticiones son muy exigentes, se prolongan mucho en el tiempo o son muy frecuentes.
Y la guinda del pastel la pone la rumiaci¨®n, la tendencia a pensar en eventos pasados o futuros ligando emociones negativas a estos pensamientos. Obviamente, es necesario hacer planes de futuro y repasar lecciones ya aprendidas, pero lo ideal es hacerlo desde un punto de vista anal¨ªtico, en un proceso corto y positivo en la medida de lo posible. La rumiaci¨®n es destructiva, da?a la salud, la productividad y el bienestar. "La gente que est¨¢ preocupada de forma cr¨®nica tiene m¨¢s problemas coronarios y un sistema inmunol¨®gico m¨¢s d¨¦bil", explica?Nicholas Petrie, que trabaja con CEOs y sus equipos para desarrollar estrategias de resiliencia. Tambi¨¦n se ven afectados lo que los expertos denominan "¨®rganos diana": las partes del cuerpo de las que somos gen¨¦ticamente m¨¢s sensibles, a unas personas le afectar¨¢ el sistema cardiovascular y a otras, el digestivo o la piel.
Para intentar romper con este c¨ªrculo vicioso presi¨®n-estr¨¦s-rumiaci¨®n-nopuedocontodo, los expertos aconsejan revisar las exigencias externas y en especial las autoexigencias ¡ªa veces nos imponemos una presi¨®n desmedida¡ª. Tambi¨¦n hay que mejorar las habilidades profesionales necesarias para estar seguro de que dominas las competencias clave de tu puesto y que eso no es una fuente de inseguridad y tensi¨®n. Nuestra psic¨®loga Elisa S¨¢nchez explica que "es necesario gestionar las emociones y trabajar la comunicaci¨®n, aprender a ser asertivo, a decir que no a determinadas peticiones, delegar y pedir ayuda".
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