Nos subimos a un Tesla... y esto es lo que pensamos al bajarnos
Nos subimos al Model 3 Performance de Tesla, el veh¨ªculo de su gama m¨¢s esperado, sin haber tocado nunca antes un coche el¨¦ctrico.
Probablemente, el puerto de Galapagar (sierra de la Comunidad de Madrid) es el que m¨¢s veces he coronado en veh¨ªculo particular en mi vida. Esta tachuela rumbo a la sierra Oeste de Madrid constitu¨ªa en los a?os 70 y 80 el ¨²nico impedimento para llegar en hora a las vacaciones. Al subir a la cima, el conductor ten¨ªa que echarse a la derecha para aliviar al carburador del utilitario con unos buchitos de agua.
Esta ¨²ltima vez lo he subido a los mandos de un Tesla Model 3 Performance, que ni siquiera tiene en el frontal la rejilla por la que sacaban la lengua aquellos b¨®lidos. Normal: ahora no hay que refrigerar nada. Los 30 cambios de marcha que requer¨ªan esas reviradas curvas en un coche convencional ahora se negocian solo con el acelerador, porque (alguien lo dudar¨¢, como yo) los el¨¦ctricos no tienen marchas. Ninguna.
En el Performance todo se gobierna desde una pantalla de 15 pulgadas a la derecha del volante. No hay panel de cuentakil¨®metros ni relojitos. Apenas hay botones: el de las luces de emergencia y el de llamada al 112, ambos sobre el parabrisas. Incluso los retrovisores y la guantera se regulan desde la pantalla.
Sus incontables tentaciones geek generan adicci¨®n en el piloto. La ausencia de ruido impide percibir cu¨¢ndo se superan los 120 por hora, y se pone de 0 a 100 en apenas 3,4 segundos, un br¨ªo que dejar¨¢ clavados a muchos deportivos con motor convencional. En el modo piloto autom¨¢tico, el veh¨ªculo circula sin tocar volante ni acelerador, solo orientado por las l¨ªneas de los carriles de la autopista o autov¨ªa.
Para la mayor¨ªa de los ciudadanos, la conducci¨®n sin manos es uno de los progresos de la ciencia-ficci¨®n m¨¢s anhelados. El reciente Global Insights Survey ha revelado en 2019 que al 50% de los espa?oles (encuestados) le gustar¨ªa tener un veh¨ªculo aut¨®nomo. Este Tesla ser¨¢ de los primeros, con una simple actualizaci¨®n del software. Mientras, resulta gozoso disfrutar de la conducci¨®n, con las pistas que facilitan sus ocho c¨¢maras perim¨¦tricas, que permiten controlar, en 360?, la convivencia con el resto de veh¨ªculos en marcha. O de la seguridad que proporcionan sus 12 sensores ultras¨®nicos, que ayudan a orientarse incluso en medio de una densa niebla. O del radar que mapea hasta 160 metros por delante del veh¨ªculo.
Al solicitar en el GPS una ruta, en la pantalla se sugiere la parada para recargar la bater¨ªa en lo que dura un caf¨¦. En apenas 20 minutos habremos alimentado al veh¨ªculo para unos 250 kil¨®metros, y recibiremos una estimaci¨®n de lo que restar¨¢ de carga al llegar a destino. A modo de orientaci¨®n al bolsillo: el uso de uno (o varios) supercargadores supone un gasto de 81 euros (a 0,29€ el kilowatio) y dar¨ªa para 3.000 kil¨®metros. Recorrer esa distancia requiere 276 euros en un coche hom¨®logo movido por gasolina (a 1,16€ el litro y un consumo estimado de 8 litros a los 100 km). El Tesla es bueno, bonito... y m¨¢s verde que barato.?
Conclusi¨®n
Si se tiene la suerte de disponer de 68.500 euros, una vocaci¨®n realmente ecol¨®gica y mucha paciencia (la entrega puede tardar varios meses), es buena opci¨®n. Pero ojo con los modos para la conducci¨®n: el deportivo no es aconsejable en la ciudad. Demasiado br¨ªo en un sem¨¢foro. Mejor el modo relax.
No hay llave
El coche se abre y se activa por aproximaci¨®n de una tarjeta que cabe perfectamente en la cartera. Tambi¨¦n se puede gobernar desde una app gratuita. Ello permite programar a distancia la carga, la calefacci¨®n o sacar el coche del parking sin manos.
Huevos de pascua
Este modo alberga juegos Atari y bromas de diverso gusto (se puede programar desde la pantalla una ventosidad para cada asiento). Engancha una sugerente opci¨®n chimenea: ocupa toda la pantalla con el crepitar del fuego. ?Pegar¨ªa una m¨²sica chill out o rom¨¢ntica? Basta con volver a tocar la pantalla.
Modo perro
Podemos dejar sola a la mascota durante un buen rato sin miedo a que nos denuncien por desaprensivos. Un r¨®tulo en la pantalla que se lee desde fuera advierte ¡°Mi due?o volver¨¢ pronto, no te preocupes¡± y salta el climatizador del habit¨¢culo.
Modo centinela
Se activa gracias a sus ocho c¨¢maras perif¨¦ricas y permite grabar lo que suceda en nuestra ausencia. Un puerto USB puede servir de prueba contra quien ha intentado abrir o rayar el veh¨ªculo.
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