La ¡®startup¡¯ para crear puentes entre zetas y ¡®viejunos¡¯

Honestas, atrevidas, humanas,que sepan escuchar y ¡°con rollito¡±. As¨ª deben ser las marcas para conectar con los j¨®venes seg¨²n el Manifiesto Z que sienta las bases de Mazinn, la compa?¨ªa creada por Adri¨¢n Ballester y ?lvaro Justrib¨®.

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Los servicios de estos veintea?eros son contratados por firmas que nacieron mucho antes que ellos ¡ªcomo Mahou (fundada en 1890), Paradores de Turismo (1928), Grupo Antol¨ªn (1950) y Telepizza (1988)¡ª para idear acciones que seduzcan a los consumidores miembros de la generaci¨®n Z.

¡°Hacemos de traductores para que comprendan nuestro comportamiento y lenguaje antes de lanzar una campa?a. As¨ª evitan errores comunes, como considerarnos un grupo homog¨¦neo¡±, afirma Ballester. De entrada,existen discrepancias sobre el a?o que marca el inicio de esta generaci¨®n: mientras el Pew Research Center habla de 1997, otros expertos lo adelantan a 1994.

¡°Somos s¨²per heterog¨¦neos, s¨²per contradictorios y muy radicales,as¨ª que las marcas deben entender que conectar con todos es imposible y lo ideal es centrarse en cada momento con una tribu concreta de los Z para generar relaciones a largo plazo basadas en las emociones¡±, se?ala Justrib¨®.

Ambos reconocen que les cuesta etiquetar su actividad. Sin ser una consultora al uso, asesoran a sus clientes en sesiones de creaci¨®n de ideas basadas en el concepto de hackathon (donde desarrolladores sacan adelante un proyecto tecnol¨®gico de forma conjunta),pero tambi¨¦n participan en la definici¨®n de nuevos productos y servicios o en la concepci¨®n de campa?as de comunicaci¨®n.¡°Nacimos con la idea feliz de resolver problemas empresariales desde nuestra manera de consumir y de interactuar con las compa?¨ªas¡±, seg¨²n Justrib¨®.

Mazinn es su respuesta al proyecto empresarial que se exige a los alumnos de Leinn. En 2018, facturaron 100.000 euros.

Para ello, proponen transformar marcas ¡°zombis¡±, aquellas que no entienden a la generaci¨®n representada por Mazinn, en marcas ¡°zeta¡±, capaces de construir una relaci¨®n real con esos veintea?eros. ¡°Todo se resume en tres fases: conocer, cocrear y conectar. Esta ¨²ltima es la m¨¢s tangible porque se concreta en un evento, un v¨ªdeo, un post en Instagram o toda una campa?a de comunicaci¨®n¡±, concluye Ballester.