?Es posible que una moto ande sola?
Las grandes marcas de motocicletas investigan en conducci¨®n aut¨®noma para mejorar la seguridad, a sabiendas de que nunca eliminar¨¢n al motorista del asiento
El ingeniero canadiense Charles Bombardier ¡ªfundador de la ONG Imaginactive¡ª tiene un prop¨®sito en la vida: tener ideas. Hace unos a?os imagin¨® un nuevo veh¨ªculo para la movilidad urbana. Se trataba de una cabina cerrada y aut¨®noma con dos ruedas, y por tanto con cierto aspecto de moto, en la que dos pasajeros podr¨ªan viajar frente a frente sin preocuparse del tr¨¢fico de la ciudad.
Llam¨® a su invento Cyclotron y le dio forma con la ayuda del dise?ador industrial Ashish Thulkar, del Indian Institute of Science. Cuando lo present¨® en 2016, Bombardier reconoci¨® que se hab¨ªa inspirado en el Lit Motors C1, un raro h¨ªbrido con algo m¨¢s de moto que de coche cuyo sistema girosc¨®pico lo manten¨ªa estable en todo momento, detalle primordial para una moto aut¨®noma. Como cualquier otro dise?o de Bombardier, que no patenta las creaciones de Imaginactive, el Cyclotron est¨¢ a la espera de que alguien alguna vez decida desarrollarlo. Si un d¨ªa existe un veh¨ªculo de dos ruedas aut¨®nomo, ser¨¢ ese o parecido.
El resto es humo. ¡°Las motocicletas nunca viajar¨¢n de forma aut¨®noma, no tiene sentido¡±. Las palabras del consejero delegado de BMW Motorrad, Markus Schramm, en una entrevista en mayo en Forbes no desmienten, sin embargo, que exista una decidida investigaci¨®n ¡ªno muy abundante, tambi¨¦n es verdad¡ª en el campo de las motos autopilotadas.
Control autom¨¢tico de frenada
As¨ª lo demuestra el ¨²ltimo gran avance de la firma alemana, que lleva al mundo de las dos ruedas el control de crucero activo (ACC, por sus siglas en ingl¨¦s). Esta tecnolog¨ªa de ayuda al motorista, muy extendida ya entre los coches, funcionar¨¢ igual en las motocicletas: el sistema regula autom¨¢ticamente la velocidad cuando se reduce la distancia con el veh¨ªculo precedente y mantiene la distancia definida por el piloto. Asimismo, el ACC reduce autom¨¢ticamente la velocidad al tomar una curva ¡ªsi es necesario¡ª y regula la aceleraci¨®n y la frenada en funci¨®n del ¨¢ngulo de inclinaci¨®n para no desestabilizar al piloto.
El camino hacia ciertos niveles de conducci¨®n autom¨¢tica todav¨ªa es largo en las motos: la tecnolog¨ªa, desarrollada junto con Bosch, solo reconoce veh¨ªculos en movimiento, as¨ª que no act¨²a, por ejemplo, cuando la moto llega a un sem¨¢foro en rojo con coches detenidos. La investigaci¨®n, no obstante, cuenta con logros significativos, como la tecnolog¨ªa Riding Assist de Honda, que mantiene la moto en equilibrio y es capaz de llevarla por s¨ª sola desde el garaje hasta la calle, por ejemplo.
En 2016, BMW cumpli¨® 100 a?os y se sac¨® de la chistera la moto del a?o 2116. Un bello ejercicio est¨¦tico y de paso ideol¨®gico: el modelo podr¨ªa conducirse sin casco, pero no ser¨ªa aut¨®nomo. Para garantizar la seguridad, la BMW Motorrad Vision Next 100 contaba con un sistema de autobalance, similar al de Honda y presente en cualquier proyecto de motocicleta futura, y tambi¨¦n un sistema llamado FlexFrame que permite torcer el bastidor en la direcci¨®n en la que el piloto gira el manillar.
Poco despu¨¦s, present¨® en el CES 2019 ¡ªla gran feria tecnol¨®gica de Las Vegas¡ª un ¡°veh¨ªculo de investigaci¨®n y prueba¡± (creado sobre una R1200GS) capaz de ponerse en marcha, acelerar, frenar, tomar curvas y volver a su sitio. No era una motocicleta aut¨®noma, sino un laboratorio de dos ruedas que sirve para entender mejor la conducci¨®n y crear tecnolog¨ªas que ayuden al piloto a realizar ciertas maniobras, especialmente en circunstancias de riesgo.
Las marcas apuntan de hecho hacia la inteligencia artificial y, sobre todo, hacia la conectividad. El prototipo Motoroid de Yamaha integra entre sus funciones la posibilidad de seguir a su due?o e ir a buscarlo cuando lo necesite, pero tambi¨¦n la de comunicarse con las infraestructuras para obtener las mejores rutas. ¡°Estar conectado ser¨¢ un requisito urgente para todos los segmentos de motocicletas. Esto mejorar¨¢ la seguridad y garantizar¨¢ que esta actividad est¨¦ preparada para el futuro¡±, sostiene Schramm. La pura conducci¨®n seguir¨¢ siendo humana. Entre tanto, la idea de Bombardier se queda, de momento, en el quebradizo terreno de las ideas.
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