Muerte en el faro

Me acabo de dar cuenta de que ayer me lie a hablarte de extraterrestres y se me pas¨® decirte lo m¨¢s flipante que me contaron Alicia y Maite, al menos mientras lo de los extraterrestres no sea cierto, claro. ?Patricio es ahora el alcalde del pueblo! Patricio, ya sabes, el padre de Juanjo. Qu¨¦ fuerte.

Se ve que se present¨® hace unos a?os y parece que lo est¨¢ haciendo bastante bien, porque ya ha sido reelegido un par de veces. Por eso no me encontr¨¦ con ¨¦l cuando baj¨¦ ayer al restaurante,...

Me acabo de dar cuenta de que ayer me lie a hablarte de extraterrestres y se me pas¨® decirte lo m¨¢s flipante que me contaron Alicia y Maite, al menos mientras lo de los extraterrestres no sea cierto, claro. ?Patricio es ahora el alcalde del pueblo! Patricio, ya sabes, el padre de Juanjo. Qu¨¦ fuerte.

Se ve que se present¨® hace unos a?os y parece que lo est¨¢ haciendo bastante bien, porque ya ha sido reelegido un par de veces. Por eso no me encontr¨¦ con ¨¦l cuando baj¨¦ ayer al restaurante, ni con ¨¦l ni con Juanjo. Seg¨²n me cont¨® un camarero, parece el negocio lo lleva ahora Juanjo, pero justo ayer tuvo que ir al Ayuntamiento para ayudar a su padre con unos papeles o no s¨¦ qu¨¦. Me hace mucha gracia imaginarles ah¨ª.

Ya que estaba por all¨ª acab¨¦ comiendo en el restaurante. Se llen¨® enseguida de turistas ¡ªentre los que me incluyo¡ª y la ¨²nica mesa con gente del pueblo la ten¨ªa detr¨¢s, con un par de se?ores mayores hablando del farero. Estaban comentando que lo encontraron muerto el martes, el d¨ªa que estuve en la otra punta de la isla visitando la Redacci¨®n del peri¨®dico. Aunque nadie lleg¨® a verlo, al parecer se cay¨® desde lo alto del faro. Ya era muy mayor y ni tan siquiera hac¨ªa falta que siguiera encarg¨¢ndose de aquello porque el faro est¨¢ ya muy automatizado, pero como no ten¨ªa otra cosa que hacer ni otro sitio donde vivir le permit¨ªan seguir all¨ª. Pobre hombre.

El resto del d¨ªa lo pas¨¦ un poco de aqu¨ª para all¨¢. Por la ma?ana me compr¨¦ unas gafas de sol en un Niela, una de estas tiendas de las que te habl¨¦, y por la tarde las cambi¨¦ por otras. Me quedan muy bien.

Hay una cosa a la que he estado d¨¢ndole vueltas. He dado por hecho que Tom¨¢s ¡ªla persona que trabaja en el archivo del diario¡ª es la que viajaba con la maleta llena de peri¨®dicos, pero si lo piensas no tiene mucho sentido, ?no? Porque, claro, a no ser que esa persona volviera de sus vacaciones el mismo d¨ªa que yo viaj¨¦ hasta aqu¨ª, no deber¨ªamos haber coincidido en el aeropuerto. Tal vez s¨ª volvi¨® y ya est¨¢ en la isla, pero todav¨ªa no ha regresado a su puesto de trabajo. O igual lo que pasa es que el propietario de la maleta es otra persona. Y sea quien sea, ?por qu¨¦ viaj¨® fuera con todos esos peri¨®dicos y luego regres¨® con ellos a la isla? Porque supongo que eso es lo que hizo, ?no?

Espero que cuando Tom¨¢s regrese y me llame se solucione todo este asunto. En cuanto sepa algo te cuento.

Descubra las mejores historias del verano en Revista V.