Fr¨ªo y enfermedades respiratorias: ?qu¨¦ sabemos de esta relaci¨®n?
Las bajas temperaturas, aunque no son causa directa de las patolog¨ªas, ponen una alfombra roja a los virus. As¨ª funciona este fen¨®meno y esto es lo que podemos hacer para prevenirlo
Es una de las creencias m¨¢s extendidas: exponernos al fr¨ªo nos enferma, nos lleva directos al resfriado, la aspirina y la cama. Pero no es as¨ª: nos ponemos malos cuando contraemos un virus, no cuando cogemos fr¨ªo. Lo constatan los expertos, que desmienten el mito de que las bajas temperaturas nos enfermen per se: ¡°La llegada del fr¨ªo provoca un notable aumento en la incidencia de dolencias respiratorias. Pero es crucial distinguir entre evidencias cient¨ªficas y saberes comunes: el fr¨ªo no causa un resfriado, pero s¨ª puede aumentar la probabilidad de contraer infecciones¡±, se?ala Sara Heili, jefa asociada del servicio de Neumolog¨ªa del Hospital Universitario Fundaci¨®n Jim¨¦nez D¨ªaz (Madrid). Como sugiere Heili y refrendan las estad¨ªsticas, el fr¨ªo facilita la vida a los pat¨®genos durante los meses de invierno: en diciembre de 2023, seg¨²n el Instituto de Salud Carlos III, la prevalencia de enfermedades respiratorias pas¨® en una semana de 523 casos por cada 100.000 habitantes a casi 800 casos por cada 100.000 habitantes. En la actual campa?a 2024-25, a¨²n en marcha y con datos en constante cambio, el panorama es similar: la tasa estimada de gripe en la primera semana de enero duplic¨® a la del resto del a?o, estima el mismo organismo. La tendencia, con ligeras variaciones, se repite a?o tras a?o. ?C¨®mo funciona, entonces, esta relaci¨®n entre fr¨ªo e infecciones? ?Qu¨¦ sabemos y qu¨¦ no de ella?
El fr¨ªo pone una alfombra roja a los virus
Uno de los ¨²ltimos hallazgos en torno a esta relaci¨®n se produjo en 2023, cuando un grupo de investigadores de la universidad de Harvard (EE UU) demostr¨® que el fr¨ªo reduce la efectividad del sistema inmunol¨®gico local de las v¨ªas respiratorias. ¡°Las bajas temperaturas pueden desencadenar una inflamaci¨®n en los pulmones¡±, explica Heili, ¡°disminuyendo as¨ª la creaci¨®n de ves¨ªculas extracelulares, un escudo vital contra las infecciones virales¡±. Es decir, los virus tienen menos obst¨¢culos que esquivar, con lo que su potencial infeccioso crece.
As¨ª merma el fr¨ªo nuestras defensas
La principal puerta de acceso de los virus respiratorios es la nariz. Es ah¨ª donde nuestro cuerpo coloca la primera defensa antes las infecciones
Esta primera defensa son unas microsc¨®picas ves¨ªculas que encapsulan prote¨ªnas, l¨ªpidos y ¨¢cidos nucleicos
En la pr¨¢ctica, estas ves¨ªculas act¨²an en las v¨ªas respiratorias 'cazando' y eliminando los virus antes de que causen la infecci¨®n. Se encargan, adem¨¢s, de coordinar una respuesta defensiva y controlar los niveles de inflamaci¨®n de la zona
Se ha descubierto que el fr¨ªo, concretamente las temperaturas inferiores a cuatro grados, reduce la producci¨®n de estas ves¨ªculas a casi a la mitad. Y las que se generan cuentan tan solo con la mitad de su potencia antiviral
Fuente: Estudio de la Universidad de Harvard publicado en The Journal of Allergy and Clinical Immunology (2023)
Esta primera l¨ªnea inmunitaria debilitada, con menos capacidad antiv¨ªrica, es uno de los efectos m¨¢s recientes y reveladores que se asocia al invierno. Pero el fr¨ªo tambi¨¦n altera el comportamiento de los virus ¨Chay m¨¢s de 200 tipos solo para el resfriado, como el adenovirus o el coronavirus; diversos virus de la gripe; el virus de la covid o el virus respiratorio sincitial, entre otros¨C, seg¨²n Jos¨¦ Daniel Alc¨¢zar, jefe del servicio de Neumolog¨ªa del Hospital Quir¨®nsalud M¨¢laga: ¡°Son termosensibles. Con temperaturas bajas se reproducen con m¨¢s facilidad y se vuelven m¨¢s virulentos. Por ejemplo, las neumon¨ªas proceden en su mayor parte de g¨¦rmenes que habitan de manera normal en la garganta. Cuando baja la temperatura se vuelven pat¨®genos y pasan a ser un problema¡±.
El fr¨ªo acusado, adem¨¢s, fomenta la aparici¨®n de ciertos organismos biol¨®gicos que juegan a favor de los procesos v¨ªricos. ¡°Se emiten m¨¢s mediadores proinflamatorios [una especie de mensajeros que regulan la respuesta inflamatoria del organismo] como la histamina y los leucotrienos, unas mol¨¦culas que tienen el potencial de incrementar la inflamaci¨®n en las v¨ªas respiratorias¡±, retoma la doctora Heili, que adem¨¢s de neum¨®loga es responsable de la Unidad de Cuidados Intermedios Respiratorios de la Fundaci¨®n Jim¨¦nez D¨ªaz. ¡°Eso empeora el da?o en la mucosa y puede propiciar el acceso de agentes pat¨®genos¡±.
El fr¨ªo tambi¨¦n trastoca nuestros h¨¢bitos. Cae el term¨®metro y pasamos mucho m¨¢s tiempo a cubierto, en contacto m¨¢s estrecho. ¡°Las bajas temperaturas favorecen una menor ventilaci¨®n de los espacios cerrados que habitamos, como por ejemplo colegios, domicilios o centros sanitarios, lo que facilita la infecci¨®n entre personas¡±, se?ala Carlos Agust¨ª Garc¨ªa-Navarro, neum¨®logo del Hospital Universitari Sagrat Cor (Barcelona). La gripe, por ejemplo, es muy contagiosa: ¡°Una persona con gripe puede infectar a los dem¨¢s incluso d¨ªas antes de iniciar los s¨ªntomas y hasta cinco-siete d¨ªas despu¨¦s¡±, subraya.
La doctora Heili habla de una de las derivadas m¨¢s graves de la llegada del fr¨ªo: el empeoramiento de algunas enfermedades respiratorias cr¨®nicas como el asma, la EPOC (enfermedad pulmonar obstructiva cr¨®nica) o las bronquiectasias. ¡°En estos casos, es el fr¨ªo por s¨ª mismo el que puede desencadenar una broncoconstricci¨®n, lo que afecta a la funci¨®n pulmonar de varias maneras, como por ejemplo estrechando los bronquios y reduciendo la capacidad de inhalar y exhalar aire de manera eficiente¡±, desarrolla.
La exposici¨®n al aire seco y fr¨ªo, a su vez, es una especie de resorte para el asma: lo activa y provoca ¡°una respuesta exagerada de las v¨ªas respiratorias, lo que llamamos hiperreactividad bronquial, y finalmente puede aumentar la resistencia al flujo de aire en los bronquios, dificultando el intercambio de gases¡±, prosigue. Como curiosidad, la experta explica que uno de los test m¨¢s comunes para evaluar la salud bronquial se realiza exponiendo al paciente a un aire fr¨ªo y seco, similar al que se da en invierno. ¡°Entonces comparamos los valores de la funci¨®n pulmonar antes y despu¨¦s de la aplicaci¨®n del fr¨ªo¡±, detalla.
Vacunaci¨®n, la prevenci¨®n primordial
En estos meses invernales, es m¨¢s probable que un simple resfriado puede transformarse en una infecci¨®n m¨¢s seria, como una bronquitis o una neumon¨ªa, alertan los especialistas. ¡°En el agravamiento de las enfermedades influyen factores como la edad, la debilidad del sistema inmunol¨®gico que puedan tener pacientes con c¨¢ncer y enfermedades autoinmunes o hematol¨®gicas, y la existencia de comorbilidades, especialmente cardiovasculares y pulmonares¡±, cuenta Heili. Por eso mismo, prosigue, la inmunizaci¨®n es la ¡°piedra angular¡± de la prevenci¨®n. ¡°Las vacunas antigripales, anti-VRS (virus respiratorio sincitial) y antineumoc¨®cicas no solo protegen al ser humano, sino que limitan la expansi¨®n de las enfermedades virales y alivian el peso del sistema sanitario al reducir los casos m¨¢s severos¡±.
El efecto multiplicador del fr¨ªo en las enfermedades respiratorias
- Durante la temporada de gripe 2022-23, que se concentra en los meses de diciembre y enero, las tasas de hospitalizaci¨®n aumentaron un 60% respecto al resto del a?o.
- En diciembre de 2023, por ejemplo, la prevalencia de enfermedades respiratorias pas¨® en una semana de 523 casos por cada 100.000 habitantes a casi 800 casos por cada 100.000 habitantes.
- Las patolog¨ªas respiratorias son una de las causas principales de muerte en Espa?a. En 2022 se contabilizaron 43.024 fallecimientos relacionados con estas enfermedades.
Fuente: Instituto de Salud Carlos III
Una vacunaci¨®n que, entiende el doctor Alc¨¢zar, cobra a¨²n m¨¢s importancia en los segmentos de poblaci¨®n m¨¢s vulnerables: los cr¨®nicos, los inmunodeprimidos, los mayores de 65 a?os y los ni?os. ¡°A estos pacientes, si les toca la gripe, van a ponerse muy malos. No es que tengan m¨¢s cantidad de patolog¨ªas, es que van a tener una agudizaci¨®n grave. Y es aqu¨ª donde las vacunaciones tienen todo el sentido del mundo¡±, tercia.
Seg¨²n el Observatorio de Vacunaci¨®n Antigripal, en la temporada 2023-24 el 65% de la poblaci¨®n mayor de 65 a?os se vacun¨®, un 3% menos que el curso anterior. En esta campa?a, el ¨²ltimo informe del organismo refleja una menor intenci¨®n de vacunaci¨®n, con un 55% de los espa?oles manifestando que no lo har¨¢n.
Esta ca¨ªda en las intenciones vacunatorias deriva del hartazgo que arrastramos de la ¨¦poca covid, coinciden los expertos consultados. Hay que combatirlo. ¡°La pandemia ha generado una desconfianza en la vacunaci¨®n. Debemos hacer un esfuerzo entre todos para luchar contra la desinformaci¨®n y recuperar la confianza¡±, reclama Heili. ¡°El personal sanitario tiene la responsabilidad del manejo cl¨ªnico de las infecciones respiratorias, pero tambi¨¦n debe divulgar y favorecer que la poblaci¨®n de riesgo cumpla con el programa de vacunaciones¡±, a?ade el neum¨®logo Agust¨ª. Seg¨²n la OMS, al a?o mueren cuatro millones de personas por infecciones respiratorias agudas.
Recomendaciones al alcance de todos
M¨¢s all¨¢ de la vacunaci¨®n, la prevenci¨®n m¨¢s eficaz ¨Cla vacuna de la gripe, por ejemplo, reduce a la mitad el riesgo de muerte¨C, no hay ninguna receta milagrosa para evitar la ca¨ªda. Aunque s¨ª existen ciertas recomendaciones cotidianas de f¨¢cil cumplimiento y que siempre resultar¨¢n ¨²tiles. ¡°La preservaci¨®n de una salud integral impecable, acompa?ada de una alimentaci¨®n equilibrada, una vida activa y un estilo de vida saludable, entro otros, pueden mitigar el peligro de infecci¨®n¡±, se?ala la doctora Heili.
Tambi¨¦n es vital el uso de la mascarilla, que tanta pereza provoca desde los tiempos pand¨¦micos. ¡°La mascarilla es uno de los mecanismos defensivos m¨¢s eficaces. Previene el contagio y combate el fr¨ªo en las v¨ªas respiratorias, calentando la respiraci¨®n y humedeci¨¦ndola¡±, asegura el doctor Alc¨¢zar. ¡°No hay que abandonarla, sobre todo si estamos enfermos o vamos a visitar a personas delicadas¡±.
A ello se suma ¡°la importancia de purificar los ambientes, ventilar las estancias, consultar siempre en caso de duda al especialista, vacunarse y evitar la automedicaci¨®n¡±, enumera Heili. E inculcar cierta cultura m¨¦dica: ¡°Es crucial educar a la poblaci¨®n para que puedan detectar signos que demandan atenci¨®n inmediata, como la dificultad respiratoria o la fiebre alta persistente. Este ejercicio no debe llevarse a cabo s¨®lo en los meses complicados sino todo el a?o y por todos los medios posibles¡±, se?ala.
El objetivo, concluye la experta, es minimizar el golpe de los meses m¨¢s fr¨ªos, que se produce cada a?o con exacta recurrencia: ¡°Es nuestra responsabilidad como m¨¦dicos informar, prevenir, y educar a la poblaci¨®n. Se pierden demasiadas vidas por una epidemia que es previsible y dimensionable¡±.