¡°Piensa primero, compra despu¨¦s¡±: Vestiaire Collective proh¨ªbe vender Zara por considerarla moda r¨¢pida

Hace un a?o, la web francesa de compra-venta de segunda mano Vestiaire Collective, una de las m¨¢s importantes del mundo, decidi¨® rechazar los productos de Asos, Shein o Boohoo. ¡°En Vestiaire Collective no queremos formar parte de este sistema. Al decir no a la moda r¨¢pida y elegir art¨ªculos de segunda mano, nuestra comunidad pretende mejorar la industria de la moda¡±, explicaban entonces en un comunicado. Desde el pasado viernes, tampoco se podr¨¢n vender y comprar piezas de otras treinta grandes ense?as, entre ellas Zara, H&M, Uniqlo o Mango. Desde la compa?¨ªa afirman que se percataron de q...

Hace un a?o, la web francesa de compra-venta de segunda mano Vestiaire Collective, una de las m¨¢s importantes del mundo, decidi¨® rechazar los productos de Asos, Shein o Boohoo. ¡°En Vestiaire Collective no queremos formar parte de este sistema. Al decir no a la moda r¨¢pida y elegir art¨ªculos de segunda mano, nuestra comunidad pretende mejorar la industria de la moda¡±, explicaban entonces en un comunicado. Desde el pasado viernes, tampoco se podr¨¢n vender y comprar piezas de otras treinta grandes ense?as, entre ellas Zara, H&M, Uniqlo o Mango. Desde la compa?¨ªa afirman que se percataron de que, con la prohibici¨®n del a?o anterior, ¡°el 70% de los miembros afectados volvieron a la plataforma para comprar art¨ªculos de mejor calidad e invertir en segunda mano¡±, por lo que han decidido ampliar su ¡®lista negra¡¯ y lo han anunciado con un v¨ªdeo, ya viral, en el que los principales monumentos mundiales quedan sepultados por monta?as de ropa. ¡°Con la aceleraci¨®n de la crisis clim¨¢tica y los noventa y dos millones de toneladas de residuos textiles que se desechan cada a?o, es un paso necesario para reducir el impacto medioambiental y social de la moda¡±, explican.

Para dilucidar qu¨¦ se entiende por moda r¨¢pida y elaborar el listado, Vestiaire Collective reuni¨® a nueve expertos en sostenibilidad (entre ellos, Orsola de Castro, creadora de la organizaci¨®n Fashion Revolution o Eva Kruse, fundadora de la Global Fashion Agenda). Fueron ellos los que se?alaron los criterios a evitar, es decir, los que fomentan el consumo excesivo entre la poblaci¨®n: precio bajo, ritmo r¨¢pido de renovaci¨®n de stock, tama?o de las colecciones, rapidez del ciclo de producci¨®n y distribuci¨®n y frecuencia en las promociones. Las marcas que cumpl¨ªan con estos cinco requisitos han sido rechazadas por la empresa.

Desde la compa?¨ªa explican que la iniciativa forma parte de un plan m¨¢s amplio que empez¨® el a?o pasado y se seguir¨¢ desarrollando en los siguientes. Porque no s¨®lo rechazan la moda r¨¢pida, tambi¨¦n el ¡®Black Friday¡¯ (al que se han opuesto con la campa?a ¡®Better Friday¡¯, cuyo lema es ¡°Piensa primero, compra despu¨¦s¡±) y ha iniciado un proyecto de concienciaci¨®n sobre la compra de segunda mano de calidad. ¡°Los usuarios ver¨¢n mensajes informativos en cada paso de su experiencia de compra o venta. Tambi¨¦n recibir¨¢n alternativas pr¨¢cticas para sus art¨ªculos de moda r¨¢pida a trav¨¦s de una gu¨ªa digital con recursos para estrategias de donaci¨®n¡±, explican.

Francia, sede de Vestiaire Collective, es el ¨²nico pa¨ªs de la Uni¨®n Europea que aplica por ahora la Ley de responsabilidad ampliada del productor (RAP) que obliga a los productores y distribuidores textiles a detallar las caracter¨ªsticas de sus productos y envases y a hacerse cargo y ser transparentes con la gesti¨®n de sus residuos. Adem¨¢s, cada cinco a?os deben presentar un nuevo plan en el que se detallen las mejoras en materia de reciclaje de aquello que fabrican. En la compa?¨ªa, explican que est¨¢n elaborando un documento ¡°examinando las carencias del sistema franc¨¦s, que sigue dependiendo en gran medida de la exportaci¨®n masiva de textiles, para proponer una gesti¨®n responsable y circular de las prendas usadas, sobre una base s¨®lida, dentro de la Uni¨®n Europea y en todo el mundo¡±.

La iniciativa de Vestiaire Collective es pionera. Ninguna otra plataforma de reventa de ropa se ha opuesto tan frontalmente a la moda r¨¢pida, pese a tener la sostenibilidad en el centro de su imagen de marca o, en algunos casos, de publicitarse como webs de art¨ªculos de lujo. Sin embargo, la plataforma francesa, una de las primeras en apostar por la segunda mano de alta gama (desde 2009) ha decidido apoyarse en las propias firmas de lujo para crear colaboraciones que promuevan la econom¨ªa circular. Desde 2021, se han aliado con marcas como Alexander McQueen, Courr¨¨ges, Jean Paul Gaultier o, m¨¢s recientemente, Burberry, para vender sus prendas de stock y hasta piezas vintage de archivo. Ese mismo a?o fue nombrada empresa B Corp por sus din¨¢micas sostenibles y regenerativas.