El poder de la microbiota: por qu¨¦ nuestras emociones o nuestra buena cara se deciden en el est¨®mago

No es una met¨¢fora: que sintamos un nudo en la garganta en momentos de nerviosismo o que al enamorarnos cientos de mariposas aleteen en nuestro est¨®mago es porque, literalmente, en el interior del aparato digestivo se decide gran parte de nuestra salud y bienestar. Para ser exactos, a lo largo del tracto intestinal y, sobre todo, en el intestino grueso, hay un complejo ecosistema de microorganismos que condiciona en gran medida nuestro funcionamiento. ?Os suena el nombre de microbiota intestinal? Lo que conoc¨ªamos vagamente como flora intestinal, se trata en realidad de m¨¢s de 39 billones de microorganismos, en su mayor¨ªa bacterias ¡ªy en menor medida, hongos, virus, arqueas, levaduras o protozoos¡ª, con funciones totalmente diferentes entre s¨ª, cuyo equilibrio y diversidad deber¨ªa encabezar nuestra lista de prioridades diarias.

Aunque la ciencia tiene una deuda pendiente con el intestino y las funciones gastrointestinales son las m¨¢s estudiadas, se ha demostrado que la microbiota influye en la salud de nuestro cuerpo. El bi¨®logo estadounidense Jeffrey Gordon, pionero en este campo e impulsor del Proyecto Microbioma Humano, descubri¨® que la funci¨®n principal de las bacterias que habitan en nuestro intestino es evitar las enfermedades. En las diferentes investigaciones que este doctor de la Universidad de Chicago ha publicado en los ¨²ltimos 20 a?os, ha comprobado que el desequilibrio de la microbiota est¨¢ relacionado con enfermedades como la diabetes, la obesidad o la desnutrici¨®n, pero tambi¨¦n afecta en nuestro desarrollo neurol¨®gico e inmunitario. Seg¨²n sus investigaciones, los ni?os que crec¨ªan con un sistema microbi¨®tico mal desarrollado eran m¨¢s proclives a sufrir determinadas patolog¨ªas inmunes o inflamatorias.

Los expertos han comprobado tambi¨¦n que la microbiota est¨¢ estrechamente relacionada con nuestro estado an¨ªmico. Estudios publicados por la revista Gastroenterolog¨ªa y Hepatolog¨ªa en los que han participado varios especialistas del Instituto Danone se?alan que las bacterias intestinales pueden sintetizar serotonina, adrenalina, dopamina y todas esas hormonas que nos ponen de buen humor. En otras palabras, la causa de que nos sintamos tristes o especialmente irritables puede estar en el desequilibrio intestinal. Y cuanto antes lo sepamos, antes podremos ponerle remedio. Porque la microbiota es totalmente ¨²nica en cada persona y var¨ªa en cada momento de nuestra vida: la edad, la dieta, el estr¨¦s o el embarazo influyen en su equilibrio. La buena noticia es que una alimentaci¨®n variada puede ayudarnos a resetear esos microorganismos que nos hacen la vida m¨¢s f¨¢cil.

Una nutrici¨®n consciente prolonga la calidad de vida

El ritmo de vida acelerado que llevamos provoca que muchas veces descuidemos nuestra alimentaci¨®n, y nuestra microbiota es el reflejo de lo que comemos y bebemos. Hace m¨¢s de cien a?os, el microbi¨®logo ucraniano y Nobel de Medicina, Elie Metchnikoff demostr¨® que la mayor¨ªa de las enfermedades comienzan en el tracto digestivo, cuando las bacterias ¡®buenas¡¯ son incapaces de controlar a las ¡®malas¡¯. Considerado el padre cl¨ªnico de los probi¨®ticos ¨Cantes de que el t¨¦rmino existiera¨C, el experto recogi¨® en su libro La prolongaci¨®n de la vida: estudios optimistas, que el consumo diario de l¨¢cteos fermentados contribuye a eliminar los clostridios y dem¨¢s bacterias responsables de los problemas digestivos y el envejecimiento prematuro.

El tiempo ¡ªy estudios como el recientemente liderado por la Universidad de Oviedo y publicado por la revista Nature Medicine que relaciona la salud de la macrobiota con la esperanza de vida¡ª le ha dado la raz¨®n: cuanto m¨¢s consciente y equilibrada sea nuestra alimentaci¨®n, mejor ser¨¢ nuestra salud f¨ªsica y psicol¨®gica. Raz¨®n por la que los prebi¨®ticos y probi¨®ticos han ganado una posici¨®n cada vez m¨¢s importante en nuestra rutina de autocuidados. El primer paso es saber distinguir qui¨¦n es qui¨¦n. Los probi¨®ticos ¡ªpresentes en el yogur, k¨¦fir y dem¨¢s l¨¢cteos fermentados¡ª, son los microorganismos vivos que habitan en nuestro cuerpo y contribuyen a su buen funcionamiento; mientras que los probi¨®ticos son fibras que se encuentran en alimentos de origen vegetal ¡ªlos encontramos en cereales, verduras de hoja verde o frutos secos¡ª, se podr¨ªan considerar el alimento de todas estas bacterias. En otras palabras, cuando renunciamos a alg¨²n alimento con la excusa de que nos hincha el est¨®mago o ralentiza la digesti¨®n, es posible que estemos privando a nuestro organismo de nutrientes muy beneficiosos para la salud.

Una vez conocida la teor¨ªa, el verdadero reto es aplicarla. Cu¨¢ntas veces la falta de tiempo nos ha obligado a comer y cenar salt¨¢ndonos los horarios, por no hablar de c¨®mo el cansancio nos ha hecho recurrir a procesados que solo aumentan el malestar. Los nutricionistas coinciden en la importancia de llevar una alimentaci¨®n consciente y los desayunos son una buena forma de practicarlo: tenemos un mejor control del tiempo, nadie osa molestarnos con emails o llamadas, y su sencillez a la hora de preparar es el mejor remedio frente la pereza. Tampoco es casualidad que Instagram, bajo el hashtag #girlfood, se haya llenado de desayunos vistosos, protagonizados por boles rebosantes de yogurt y todo tipo de cereales y frutas.

El reciente informe elaborado por la Sociedad Espa?ola de Microbiota, Probi¨®ticos y Prebi¨®ticos (Semipyp) en colaboraci¨®n con Activia, ha demostrado que las leches fermentadas con probi¨®ticos reducen las molestias digestivas y mejoran la tolerancia a los alimentos. Otro de sus beneficios colaterales es que mejora el ritmo intestinal y debido a su poder saciante es nuestro mejor aliado para evitar el picoteo entre horas. ?Qu¨¦ debemos tener en cuenta a la hora de incorporarlos en nuestra dieta? Como se?alan desde Activia, para que los probi¨®ticos cumplan su funci¨®n, es imprescindible que permanezcan vivos en su viaje digestivo, solo as¨ª podr¨¢n formar parte de la microbiota y ejercer sus muchas y muy importantes funciones. Una condici¨®n que la marca cumple a rajatabla.

Lo que comes siente por ti, as¨ª que si¨¦ntate a pensar bien lo que comes

Cuidar la salud intestinal repercute m¨¢s de lo que creemos en nuestro estado de ¨¢nimo. Como recoge el libro La incre¨ªble conexi¨®n intestino-cerebro de Camila Rowlands, ambos ¨®rganos est¨¢n en constante comunicaci¨®n. A lo largo de las paredes se extienden millones de neuronas y terminaciones nerviosas que recogen informaci¨®n de lo que est¨¢ sucediendo en nuestro cuerpo, para que el cerebro act¨²e en consecuencia: qu¨¦ debe sentir, qu¨¦ debe hacer, qu¨¦ debe pasar... Para que lo entendamos: ?Cu¨¢ntas veces hemos asaltado la despensa para arreglar un mal d¨ªa? Como recoge el libro Inteligencia Digestiva, de la doctora Irina Matveikova, se calcula que el 90% de la serotonina se produce en nuestro intestino, gracias a unos amino¨¢cidos presentes en huevos, pl¨¢tanos o nueces.

Eso tampoco significa que cuanto m¨¢s comamos m¨¢s cerca estaremos de alcanzar la felicidad. Se trata de relacionarnos con la comida de la misma forma que lo hacemos con nuestras aficiones. Si hacemos deporte porque nos genera dopamina o practicamos actividades manuales, como la cer¨¢mica o la pintura, porque reducen el estr¨¦s y mejoran la concentraci¨®n, ?por qu¨¦ no convertimos nuestra relaci¨®n con los probi¨®ticos en otro momento mindfulness?

Activia lleva a?os poni¨¦ndolo f¨¢cil con sus leches fermentadas de diferentes sabores ¡ªnatural, con frutas o cereales¡ª y k¨¦fir. Cada envase contiene una mezcla ¨²nica de cultivos, con una combinaci¨®n exclusiva de fermentos y millones de probi¨®ticos ¡ªprobi¨®ticos que se ha comprobado que llegan vivos hasta la microbiota y superan los 10.000.000 UFC por gramo¡ª, que le aporta esa textura cremosa tan caracter¨ªstica. Cremosa y, sobre todo, vers¨¢til: tan solo hay que pasarse por su web oficial e inspirarse en las deliciosas recetas que ha ideado el Chef Bosquet. Porque la salud no tiene edad pero s¨ª muchas aceptaciones, en el caso de Activia es sin¨®nimo de bienestar, placer y mucho, mucho sabor.