El sujetador-parche para mujeres que perdieron un pecho y no quieren disimularlo

Cada 20 minutos una mujer espa?ola escucha la frase ?tienes c¨¢ncer de mama?. Noelia Morales fue una de ellas. Despu¨¦s de un largo proceso y dos cirug¨ªas acab¨® someti¨¦ndose a una mastectom¨ªa radical de su pecho derecho. Y decidi¨® no reconstruirlo. ¡°No encontr¨¦ un motivo por el que volver a pasar por quir¨®fano y en vez de disimular que hab¨ªa perdido un pecho, me pareci¨® m¨¢s razonable aceptarlo¡±, cuenta a S Moda. Al principio, dice, le resultaba demasiado impactante mirarse en el espejo y evitaba dormir desnuda. Recuperar la intimidad con su pareja y encontrar la f¨®rmula para volver a vivir su sexualidad tampoco fue sencillo. M¨¢s a¨²n cuando la lencer¨ªa o los trajes de ba?o se reduc¨ªan a los modelos poco est¨¦ticos de las ortopedias. Fue as¨ª cuando, como si del parche de un pirata se tratara, decidi¨® cortar por la mitad uno de sus sujetadores coloc¨¢ndolo de tal forma que cubriera su cicatriz. A pesar de no tener formaci¨®n como dise?adora, Morales transform¨® aquella idea que le devolvi¨® confianza en s¨ª misma y le hizo sentir liberada al instante en Anna Bonny, una firma de lencer¨ªa para cubrir las necesidades de las mujeres que han pasado por lo mismo.

¡°Vi una foto de Paloma Picasso con un parche en un ojo y me inspir¨¦ para crear un sujetador siguiendo el mismo concepto. M¨¢s que identificarme como una guerrera o una amazona que lucha contra el c¨¢ncer prefiero sentirme una aventurera. El parche representa muy bien ese concepto y, adem¨¢s, cuando ves a alguien que lo lleva sabes que detr¨¢s hay algo que no funciona, pero al mismo tiempo transmite rebeld¨ªa y seducci¨®n¡±, explica la creadora. Incluso el nombre de la firma est¨¢ inspirado en una rebelde pirata del siglo XVIII, una de las m¨¢s famosas de la historia.

Lo primero que llama la atenci¨®n al ver los dise?os de la marca es que solo tapan la cicatriz, dejando el otro pecho al descubierto. Un patr¨®n que convierte esta prenda en una idea nueva y pionera, raz¨®n por la que Noelia Morales ha sido seleccionada entre los diez finalistas que optan a mejor dise?ador de accesorios en el prestigioso Festival Internacional de Moda y Fotograf¨ªa de Hy¨¨res 2019. ¡°Est¨¢n concebidos para llevarlos estando desnuda. Los cre¨¦ pensando en recuperar la intimidad con la pareja o en flirtear contigo misma en el espejo. Es una pieza de lencer¨ªa er¨®tica m¨¢s como puede serlo un liguero, por ejemplo?. Sus creaciones no pretenden disimular la falta del pecho, sino todo lo contrario: subrayar su ausencia de una forma est¨¦tica. ¡°Igual que no estamos rechazando nuestras u?as si las pintamos tampoco renegamos de la cicatriz si la adornamos¡±, reflexiona.

M¨¢s all¨¢ de la desnudez, defiende que cada mujer utilice sus prendas ¡°como le d¨¦ la gana¡±. ¡°Yo misma me las he puesto incluso por fuera de camisas o con escotes¡±, confiesa. Ella es tambi¨¦n quien las luce en las fotos de su tienda online, en la que es posible hacerse con una de sus prendas a partir de 49 euros y hasta los m¨¢s de 700 que cuesta un modelo que incorpora cristales Swarovski (en su web incluso se puede descargar gratis el patr¨®n del sujetador para aquellas que quieran probar a hac¨¦rselo en casa). ¡°Vendo en todo el mundo. No en grandes cantidades, pero s¨ª he tenido pedidos de todas partes. Y tambi¨¦n de hombres que los compran para sus mujeres, algo que me parece muy bonito¡±, asegura.

El feedback positivo que recibe de sus clientas ha animado a esta pirata a embarcarse en una nueva aventura. Anna Bonny tambi¨¦n firma turbantes, piezas que debutaron hace unos d¨ªas en la semana de la moda de Madrid como complemento perfecto a las delicadas creaciones estampadas de Ailanto. ¡°El parche va dirigido a un nicho dentro de un nicho: mujeres que se hayan sometido a una mastectom¨ªa y que, adem¨¢s, no hayan querido pasar por la reconstrucci¨®n. Los turbantes, sin embargo, est¨¢n pensados para un p¨²blico m¨¢s amplio, que en lugar de ocultar la p¨¦rdida de pelo con una peluca, prefieren optar por la opci¨®n de adornar m¨¢s que de disimular?, esgrime.

Adem¨¢s de una historia personal y de unos dise?os dispuestos a cambiar la vida de muchas mujeres, detr¨¢s de Anna Bonny hay una reivindicaci¨®n social ineludible. ?Todas las que nos hemos sometido a una mastectom¨ªa sabemos que perder un pecho hace que se cuestione tu feminidad, tu sentimiento de ser o no una mujer. Sentimos culpabilidad o rechazo por estar as¨ª y es necesario que se normalice?, reclama. Y termina: ?Parece que no puedes ir con un solo pecho por la vida. Creo que es muy injusto que tengas que hacer un esfuerzo para que no se note por lo que has pasado?. Un mensaje de fuerza y esperanza que necesitan tener presente esas mujeres que en nuestro pa¨ªs escuchan cada 20 minutos la misma frase.