Aunque el momento de embadurnarse en crema hidratante corporal tras darse un ba?o o una ducha sea el s¨²mmum del autocuidado y todo un placer y efecto relajante para cuerpo y piel, solemos dejarlo de lado. ?La principal raz¨®n? No tenemos tiempo. Adem¨¢s, influyen otras como la pereza, o que, en ocasiones, la textura de algunas cremas corporales no nos resulta del todo amable o ligera como para llevar a cabo el ritual. Como es bien sabido, hidratar la piel (tambi¨¦n la del cuerpo, aunque suela ir cubierta con ropa) es esencial todos los d¨ªas del a?o, especialmente ahora en los meses de invierno en los que se reseca m¨¢s. Por eso, una soluci¨®n ideal para todos aquellos perezosos que huyen del proceso, son los aceites de ducha. Desarrollados por las principales marcas de cosm¨¦tica farmac¨¦utica y replicados por un sinf¨ªn de firmas de belleza, parece que han llegado para quedarse. ¡°Son productos de higiene diaria cuyo beneficio principal es que no solo no son agresivos para la piel, sino que est¨¢n concebidos con la idea de, adem¨¢s, aportarle hidrataci¨®n¡±, explica a S Moda el Doctor Juan Gav¨ªn, dermat¨®logo y miembro del GEDET (grupo espa?ol de dermatolog¨ªa est¨¦tica y terap¨¦utica) de la AEDV.? Getty Images?Hacen la misma labor que una crema al uso de las hasta ahora conocidas? La respuesta no es un¨¢nime ni firme porque la experiencia con ellos es mucho menor que con los hidratantes convencionales y se necesita m¨¢s tiempo de investigaci¨®n. Ahora bien: ¡°Son alternativas novedosas que, de momento, parece que gustan a cierto tipo de consumidores -especialmente por sus caracter¨ªsticas cosm¨¦ticas-. Intuitivamente, s¨ª parecen una buena alternativa a los productos jabonosos habituales y, si la comodidad percibida es mayor, esto incrementar¨¢ la adherencia a su uso, lo cual es positivo¡±, a?ade el Dr. Gav¨ªn. Al usarse como un gel normal, el proceso de lavado e hidrataci¨®n se convierten en uno solo y resulta un verdadero deleite para la piel. Sobre c¨®mo elegir el m¨¢s adecuado, habr¨¢ que tener en cuenta las necesidades de cada piel, pero ¡°sus bondades est¨¢n presentes en la totalidad de las alternativas dermofarmac¨¦uticas que encontramos en el mercado¡±, a?ade Juan Gav¨ªn; ahora bien, ¡°s¨ª podemos hablar de lo que no deben contener: conservantes sensibilizantes (especialmente isotiazolinonas), fragancias no consideradas como seguras, aceites esenciales (que pueden llegar a ser muy alerg¨¦nicos), y, en general, cualquier ingrediente que pueda producir una sensibilizaci¨®n de contacto. Hay que tener en cuenta que son productos que en muchas ocasiones estar¨¢n en contacto con piel irritada o lesionada por lo que la formulaci¨®n debe ser especialmente cuidadosa¡±, advierte el doctor.? Getty ImagesEva Armas GilEva Armas Gil